
Bastaron tres minutos y medio de imágenes contenidas en dos videos difundidos por internet, para que en Reynosa se abrieran las heridas por la pasada explosión en el Centro Receptor de Gas de Pemex, del pasado 18 de septiembre.
El accidente, como se recordará, es considerado el más grave que se ha registrado en las actividades de la paraestatal en la región, con un saldo de 31 personas muertas y más de 40 lesionados.
Y aunque las autoridades se comprometieron a que en 30 días darían a conocer los resultados de la investigación sobre las causas del percance, la realidad es que a la fecha sigue siendo un misterio qué fue lo que sucedió en las instalaciones ubicadas en el kilómetro 19 de la carretera Reynosa-Monterrey.
De hecho, personal de la paraestatal ha intentado acallar a los familiares de las víctimas, impidiendo que hablen con los medios de comunicación.
Además existen denuncias de que algunos funcionarios de la empresa han querido encubrir las posibles irregularidades que dieron paso al estallido.
Hace unas semanas y desafiando la “ley mordaza” impuesta por Petróleos Mexicanos, Juan Martín Sánchez Fernández, trabajador en activo y hermano de Víctor de Jesús Sánchez Fernández, quien pereció el día del siniestro, denunció que Crescencio Estupiñán Saucedo, coordinador de Transporte y Distribución de Hidrocarburos Sector Burgos, está realizando acciones encaminadas a encubrir la verdad de lo que sucedió el pasado 18 de septiembre.
Por medio de una carta abierta dirigida al entonces presidente de la República, Felipe Calderón Hinojosa y los mandos superiores de Pemex, Sánchez Fernández acusó a Estupiñán Saucedo de incurrir en actos “mezquinos y faltos de valor” para ocultar las verdaderas causas de la tragedia.
“¿Por qué evitar a toda costa que el personal que se encontraba de guardia en la Central de Medición km. 19 emita declaraciones ante las autoridades competentes?, ¿por qué no llamar a declarar a las personas que vieron y vivieron el siniestro?, ¿por qué autoriza declarar a ingenieros que, a pesar que les tocaba entrar en turno, no se encontraban en la instalación el día del suceso (Marco Pazzi y Ángel Real), ingenieros que se presentaron cuando ya todo estaba incendiado? (sic.)”, escribe.
En la carta, Sánchez Fernández aseguró que persisten muchos de los problemas que provocaron el estallido.
“Veo con asombro que continúan los mismos vicios y malas prácticas que desencadenaron la tragedia más grande del Activo Integral Burgos el pasado 18 de septiembre”, dice.
Sin embargo, aunque esta carta abierta fue publicada por medios nacionales e internacionales, el silencio por parte de Pemex respecto a las causas del accidente sigue siendo la constante.
Incluso el alcalde de Reynosa, Everardo Villarreal Salinas, recordó que en repetidas ocasiones han demandado a la paraestatal que informe qué fue lo que pasó.
Villarreal Salinas aseguró que Pemex se ha negado a las peticiones de la autoridad local de conocer las causas del accidente.
Indicó que en repetidas ocasiones le ha pedido a Petróleos Mexicanos que presenten al Ayuntamiento y a la sociedad en general un informe de lo ocurrido, pero hasta la fecha no hay respuesta.
De hecho toda la información alrededor de estos hechos se ha conocido a cuentagotas, por medio de trascendidos no oficiales.
De lo poco que se sabe es que apenas cuatro de las 30 familias de trabajadores fallecidos que interpusieron una demanda ante las autoridades laborales, han sido indemnizadas por Petróleos Mexicanos.
De acuerdo a reportes periodísticos, la presidenta de la Junta Especial Federal de Conciliación y Arbitraje número 60 con sede en Reynosa, Emilia Morales Escobar, informó que existen nueve expedientes relacionados con los hechos del pasado 18 de septiembre, de los cuales cuatro ya fueron resueltos a favor de las familias.
“Por seguridad no puedo revelar las cantidades de dinero que recibirán las familias de las víctimas en su indemnización, pero sí puedo informar que se llegó a un muy buen arreglo, más de lo que está marcado por la ley”, apuntó.
Sin embargo aún falta un trámite por parte del Seguro Social para que estas familias puedan recibir su dinero, por lo que se espera no sea sino hasta enero cuando pueda darse un pago.
Hay que recordar que la mayoría de las personas que murieron en la explosión no eran trabajadores de Petróleos Mexicanos, sino de empresas contratistas que realizaban labores para la paraestatal.
Algunos no contaban con contrato de trabajo o estaban registradas ante el IMSS con salarios muy menores a los que realmente recibían, además de otras irregularidades.
Es porque ello que la mayoría de sus familiares se quedaron en el desamparo al momento de la tragedia, y no fue sino por la generosidad de algunos trabajadores petroleros que pudieron recibir algo de dinero.
Esta donación fue difundida por Pemex por medio de un comunicado oficial que detalla: “Trabajadores de confianza y sindicalizados de Pemex Exploración y Producción otorgan apoyo económico a hijos de los trabajadores tanto de Pemex como de compañías contratistas que perdieron la vida en el accidente registrado el pasado 18 de septiembre en Reynosa”.
En el comunicado se explica que este programa está dirigido a estudiantes y beneficiará a un total de 39 niños y adolescentes que se encuentran cursando desde la educación preescolar hasta la universidad.
“La entrega de este apoyo inició el pasado 8 de noviembre, por lo que los familiares pueden acudir al módulo de atención instalado en boulevard Acapulco s/n, puerta 4 en la zona industrial de esta ciudad, para recibir este beneficio”.
Y se aclara: “Este apoyo voluntario es totalmente independiente de las indemnizaciones a las que los familiares tienen derecho”.
LOS VIDEOS
Los días 9 y 11 de diciembre pasado, por medio del canal de videos por internet Youtube, usuarios identificados como Von Spielzeug y Crios Reynosa subieron dos videos que, se presume, provienen de cámaras de seguridad del Complejo Procesador de Gas de Pemex en Reynosa.
El primero de los videos, de un minuto y medio de duración, muestra la llegada de una pipa y una camioneta pick up a un área ubicada aproximadamente a 300 metros de una tubería donde se registró el estallido.
También pueden verse al menos dos trabajadores quienes no parecen percatarse de que algo anda mal.
En una parte del video se ve que al momento de la explosión, una nube de color negra abarcó violentamente el área del accidente para luego, casi de inmediato, encenderse en llamas y arrasar con todo lo que tuvo enfrente.
En ese primer video apenas se pueden ver unos segundos de la explosión, pues todo parece indicar que la cámara resultó dañada con la onda expansiva.
Aunque apenas estuvo disponible un par de días, la grabación registró más de 13 mil reproducciones.
Posteriormente, el 11 de diciembre, un usuario identificado como Crios Reynosa subió otro video, titulado: “EXPLOSIÓN PEMEX REYNOSA KM 19 OTRO ANGULO + NUEVO+”.
De dos minutos de duración, esta grabación no sólo muestra otro ángulo del accidente, sino los segundos posteriores al percance, con una enorme zona del complejo de Pemex envuelto en llamas.
Además es posible ver al menos una docena de trabajadores correr en su intento de escapar del fuego.
Cabe señalar que a unas horas de que se subió el segundo video, ambas grabaciones fueron eliminadas del internet y ya no pueden verse por medio de Youtube.
Sin embargo, aún es posible observarlos por otros medios, ya que algunos portales de noticias y usuarios del canal de videos en línea subieron por su cuenta las imágenes.
LA INVESTIGACION Y LA INDIGNACION
Tras la difusión de las dos grabaciones, Petróleos Mexicanos informó que está investigando cómo fue que se filtraron los videos de las cámaras de seguridad del Centro Receptor de Gas de Reynosa que aparecieron en internet.
En declaraciones a El Universal, Eloy Olivares, vocero de la paraestatal, aseguró que la postura oficial de los hechos será hecha por corporativo central dentro de unos días.
El vocero confirmó que estos videos fueron considerados como “clasificados”, por lo cual no debieron de haberse hecho públicos.
Ante ello habrá una investigación para saber quién y cómo obtuvo esos videos, y con qué intención los subió a la red.
Fue por las redes sociales que estos videos recibieron una difusión mucho más rápida de lo que se hubiera esperado.
Sin embargo, en estos mismos foros pudieron encontrarse todo tipo de reacciones a estas imágenes.
Por un lado estaban quienes apoyaban que las imágenes se hicieran públicas pues, con ello, se obligaba a las autoridades de Pemex a que dieran a conocer de una vez por todas qué fue lo que sucedió el pasado 18 de septiembre.
Sin embargo también estaban algunos amigos y familiares de los fallecidos, quienes consideraron que estas grabaciones lo único que lograron fue remover el dolor de haber perdido un ser querido.
NUEVA ADMINISTRACION ¿NUEVA ESTRATEGIA?
En un discurso emitido al asumir la dirección general de Pemex, Emilio Lozoya Austin, expresó que Petróleos Mexicanos debe ser la empresa más transparente y contar con un sistema real y permanente de rendición de cuentas.
“Mi administración tendrá tolerancia cero ante comportamientos fuera del marco legal”, dijo.
Sin embargo, entre algunos trabajadores petroleros que aún laboran dentro del Centro Receptor de Gas, persisten las sospechas de hay intenciones de encubrir lo que realmente pasó el 18 de septiembre, además de que se desea culpar a algunos de los fallecidos de la tragedia.
Además está la frustración de las familias enlutadas, pues hasta la fecha nadie les ha informado las causas reales del percance. Un sentimiento que, poco a poco, se está empezando a convertir en furia y rencor.