
Comprometido con la conducción de un gobierno humanista y honesto, con amor a Tamaulipas, combatiendo la corrupción, el saqueo, la “explotación neoliberal”, el despilfarro, el abuso de poder y la persecución a opositores, para superar la “bancarrota moral”, el doctor Américo Villarreal Anaya asumió la gubernatura de Tamaulipas. El ejecutivo estatal llamó a partidos políticos y representantes de los tres niveles de gobierno a la unidad, a evitar la división y respetar las diferencias en una sincronización de esfuerzos, en una transformación que tiene el gran desafío de garantizar la paz y la tranquilidad.
Emocionado, sonriente, festivo, arropado. El doctor Américo Villarreal Anaya rindió protesta en el Teatro del Pueblo de la capital tamaulipeca como gobernador constitucional, tras hacerlo ante el Congreso, luego de haber sorteado un sinfín de batallas durante 282 días, desde el momento en que las encuestas internas de Morena lo hicieron su abanderado.
Hoy es 1 de octubre, día de radiante sol. Atrás quedaron aquellas horas de la guerra sucia y los embates de sus adversarios, y de debates ganados. El Movimiento de Regeneración Nacional y la voluntad popular de los tamaulipecos lo tenían ahí, arrancando su sexenio.
Treinta y cinco años atrás su padre Américo Villarreal Guerra (abril de 1931-junio de 2010) inició su mandato como gobernador en esta tierra para el periodo 1987-1993, y ahora la hace él, que al igual que su progenitor, antes fue senador de la República.
En aquel entonces, 1987, el doctor tenía 29 años de edad y cursaba su especialidad en la Ciudad de México; hoy tiene 64 años.
“Asumo el cargo de gobernador con un cúmulo incontenible de emociones, de memorias e ideales reunidos a lo largo de mi vida, gracias a la generosidad de su apoyo me han permitido cumplir el anhelo de seguir los pasos de mi padre que sirvió con voluntad y trabajo desde esta misma responsabilidad.
“Dedicaré, como él lo hizo, cada minuto de mis horas, cada hora de mis días y todos los días de mi tiempo en la misión de engrandecer a Tamaulipas, honrando siempre el legado y el ejemplo de Américo Villarreal Guerra”.
Poco antes, a las 9:20 horas Villarreal Anaya arribó al Congreso del Estado acompañado de su esposa, la también doctora María de la Luz Santiago de Villarreal y el secretario de Gobernación Adán Augusto López, donde rindió protesta en sesión solemne.
Desde el Poder Legislativo, el flamante gobernador saludó y agradeció al pueblo tamaulipeco por su participación valiente y anunció el inicio de una nueva etapa de esperanza para Tamaulipas.
“Porque este proyecto humanista es para la inclusión, dejando atrás viejas formas de hacer política que no cumplieron con las expectativas de la sociedad tamaulipeca, por haber demostrado tanta fuerza democrática, este triunfo es del pueblo de Tamaulipas”.
RECONCE AL CONGRESO
En el pleno, el médico cardiólogo reconoció al Congreso del Estado como pilar de la condición republicana y democrática y compartió con sus integrantes de las diversas fuerzas políticas su disposición “para construir consensos, y con ello, allanar el camino a un futuro mejor en nuestro estado”.
Pero ahora está ante un amplio público, miles que abarrotan el Teatro del Pueblo del recinto ferial de Ciudad Victoria. Colonos, líderes de distritos, simpatizantes, doctoras, doctores, enfermeras y enfermeros, maestras, maestros, trabajadores en general, burócratas, comerciantes, simpatizantes, petistas, del Verde y la clase política morensita, desde secretarios de estado hasta líderes de barrio.
El gobernador agradeció la presencia de la multitud en esta su protesta, un acto que consideró histórico por la importancia que reviste hacia el futuro del Estado.
…“Porque después de muchos años sí cambió la política realmente, hoy aquí arranca la verdadera alternancia por la decisión libre y valiente de nuestro pueblo, y después de superar cientos de obstáculos, me da gusto confirmar que el gobierno de la transformación en Tamaulipas es una realidad”.
CASTIGO A SAQUEADORES
En su protesta ante el pueblo, cuya transmisión fue vista en televisión y en redes sociales, el cuadragésimo noveno gobernante tamaulipeco, después de la Revolución, dijo estar consciente que toma su responsabilidad en el ocaso de un modelo de saqueo y explotación neoliberal que llevó al estado a extremos jamás vistos.
“Su traición a la sociedad tamaulipeca nos colocaron en una gravísima decadencia, debido a su incompetencia, a su hipocresía y su deshonestidad dejaron a Tamaulipas no solo en una crisis por la debilidad de sus finanzas, sino por la bancarrota moral con la que concluyeron su mandato.
“Todo eso, quedó atrás, pero no sus consecuencias; donde encontremos conductas ilegales o desvíos de recursos públicos, simple y llanamente: el castigo que marca la ley”.
Antes del mensaje, en el evento fue proyectado un audiovisual en el que el gobernador entrante reafirma sus propósitos y objetivos para su gestión 2022-2028.
“Hemos recorrido un largo camino, pero hoy Tamaulipas se une al movimiento que une al país, de tener un gobierno que los represente, que los sirva y dejar atrás el legado de abusos y corrupción que hemos padecido.
“El viento ya sopla a nuestro favor. El ánimo social por la transformación se percibe por todas partes de nuestro estado. Las y los tamaulipecos tenemos tanto que ofrecer, tanto que dar, tanto que hacer y hacerlo requiere el mutuo apoyo del pueblo y el gobierno. Fundaremos, juntos una cultura participativa y democrática”, destaca en su mensaje.
LLAMADO A LA UNIDAD
Villarreal Anaya mencionó que como parte del cambio del actual gobierno de la Transformación se promoverá que los tres órdenes de gobierno sincronicen sus esfuerzos.
“Tamaulipas inicia así una nueva etapa de colaboración positiva y respetuosa con el gobierno federal, al mismo tiempo a las señoras y presidentes municipales les reitero que renovaremos los vínculos institucionales y estrecharemos la coordinación en un pleno respeto de autonomía”.
A la totalidad de alcaldes del estado, el gobernador les agradeció su presencia, les dijo que contaran con él para participar en una gran alianza por el estado.
Dijo que entre poderes y órdenes de gobierno como en la diversidad de la sociedad tamaulipeca es necesario que la política deje de dividirlos y sirva por el contrario a la unidad y a la consolidación de una democracia verdaderamente participativa.
“Para eso debemos cambiar el gobierno a fondo y lo haremos, pero también debemos regenerar nuestra vida pública, desterrando la corrupción, la mentira y el robo. Ya acabando con el abuso del poder que ha derrochado el inmenso potencial de una de las entidades más ricas del país”…
Américo Villarreal Anaya expresó que hoy es tiempo de darnos la mano y respetar las diferencias porque en la agenda de transformación de Tamaulipas se necesita civismo, tolerancia y política de altura.
“Necesita aliviar tensiones, necesita también una amplia participación de individuos libres, autónomos, pero que estén conscientes de su pertenencia a esta gran comunidad que es Tamaulipas, … las puertas a la colaboración están abiertas para todo aquel que desee el cambio verdadero en nuestra tierra”.
El gobernante dijo que como lo prometió, conducirá el gobierno inspirado en el humanismo, de ahí que su primer objetivo será social.
Agregó que gobernará para todos, pero dando preferencia a los más necesitados, guiado por el principio que dice: “Por el bien de todos, primero los pobres”, en apego a la política del presidente Andrés Manuel López Obrador.
“Le expreso desde aquí mi agradecimiento por su respaldo, por sus repetidas expresiones de afecto, para nuestra gente y nuestra tierra. Entiendo la importante responsabilidad que tiene frente al pueblo de México”.
En este sentido le envió el mansaje a López Obrador de que tenga la confianza que sus acciones como gobernador tamaulipeco reflejarán siempre el apoyo incondicional a su persona, a la lucha por la regeneración de nuestra vida pública y a la noble causa de servir a la nación.
Les ofrecía además un gobierno honesto. “Con una nueva base ética desterraremos la corrupción; se acabó el moche en obras y contratos, el arrendamiento innecesario de equipos o servicios y los negocios privados al amparo del poder público.
“Se acabaron las concesiones onerosas que beneficiaban a unos cuantos, pero que perjudican el patrimonio de las y los tamaulipecos”.
En este tenor, Villarreal Anaya anunció que se pone fin a las compras a empresas fachadas y a precios inflados, así como queda excluida la mala costumbre de endeudar innecesariamente al Estado.
“Al conducimos con honestidad y con sus valores concurrentes de verdad y transparencia restableceremos la confianza ciudadana”.
GUARDIA ESTATAL Y NUEVAS SECRETARÍAS
El Gobernador indicó que para materializar las metas de su gobierno de transformación le acompaña un gabinete integrado a partir de un análisis cuidadoso, garantizando su capacidad técnica, una honestidad acreditada y lealtad a Tamaulipas.
El ejecutivo estatal dejó constancia que, adoptando los criterios de la austeridad republicana, el gobierno tamaulipeco contará con más recursos para destinarlos al bienestar de la gente, al crecimiento del empleo, la economía y por supuesto a la seguridad.
Consciente del desafío de garantizar la paz y la tranquilidad en el estado, refirió que la seguridad sigue siendo por mucho la exigencia más recurrente de la sociedad tamaulipeca, por lo que asume la responsabilidad que le confiere la Constitución.
“Depuraremos nuestras corporaciones y crearemos la Guardia Estatal, una institución de seguridad moderna que será valorada por su gestión disciplinada y eficiente, por el uso racional de la fuerza y el respeto total a los derechos humanos”.
“En Tamaulipas nunca más un cuerpo de seguridad será usado para perseguir a nadie por razones políticas, para despojarlo de sus bienes o para reprimir gente inocente”.
En el terreno económico, Villarreal Anaya dijo que el reto es el empleo y una distribución más equitativa de los ingresos, por lo que se requiere consolidar actividades y sectores exitosos que ya son competitivos y tienen los mejores pronósticos para su expansión.
Por ello, dijo, habrán de llevar oportunidades de trabajo e ingresos a las familias que viven en regiones y municipios hasta ahora olvidados.
“Impulsaré obras estratégicas como la conexión de los puertos de Tampico y Altamira hacia la zona industrial de Monterrey y Saltillo, completando la autopista de doble carril en el tramo comprendido entre Magueyes y Ciudad Victoria.
“Obras que se complementan con el recinto fiscal estratégico en Ciudad Victoria, que representa empleos vinculados a los servicios de autotransporte y la logística en el centro del Estado, además de promover el turismo de naturaleza.
Anunció que impulsará también el puerto de Matamoros, que es otra ruta de acceso hacia los mercados internacionales para esta región noreste y se estudiará la viabilidad y los términos para la construcción y operación de la carretera que conecte a Tamaulipas con la dinámica zona del centro del Bajío y la industria de San Luis Potosí.
Para dar fuerza al liderazgo aduanero del estado y al comercio internacional, junto a la construcción de las próxima Agencia Aduanal de México en Nuevo Laredo, promoverá la ampliación y conectividad de los cruces fronterizos y el reinicio de las negociaciones para tener nuevos puentes internacionales.
Ante el estrés hídrico y el calentamiento global, en Tamaulipas es obligatorio un aprovechamiento justo y sostenible del agua, por lo que se requiere una política de estado, inversiones y obras de gran magnitud.
“Para esto escalaremos las atribuciones de la actual Comisión Estatal de Agua para convertirla en la Secretaría de Recursos Hidráulicos y Desarrollo Social, … reitero mi compromiso de la segunda línea del acueducto Guadalupe Victoria”.
Como profesional de la salud, Américo Villarreal Anaya se comprometió a esforzarse para garantizar un futuro mejor y saludable a todos los habitantes de Tamaulipas, garantizando el acceso universal y la gratitud en los servicios de salud en todos los niveles y especialidades, atendiendo el deterioro en el que se encuentran hospitales y centros de salud.
De entrada, anunció que Tamaulipas se suma al acuerdo del nuevo modelo de salud para el Bienestar.
El gobernador resaltó que el gran objetivo de éste, su gobierno de la transformación, es ampliar el horizonte de justicia e igualdad social, por lo que se esforzará para complementar con acciones estatales los programas de bienestar del gobierno federal.
“La meta es hacer historia en el combate a la marginación y a la pobreza, es ahí precisamente en la calidad de vida de las y los tamaulipecos donde deseamos que mejor se expresen los resultados del gobierno con el que me propongo servirles”.
En este sentido destacó la importancia que tendrá el sistema DIF Tamaulipas, que encabezará su esposa la doctora María Santiago de Villarreal.
Américo Villarreal Anaya refirió que llega a la gubernatura del estado por un movimiento que luchó por un cambio inspirado en los principios de la cuarta transformación de no mentir, no robar y no traicionar al pueblo.
“Los próximos seis años gobernaré de manera congruente con esas bases, les hablaré invariablemente con la verdad, me conduciré con honestidad y seré siempre leal a Tamaulipas”.