
Oaxaca fue el escenario de una de las jornadas más violentas de que se tenga memoria en la administración del presidente Enrique Peña Nieto, cuando integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE).
y organizaciones sociales afines, peleando con elementos de la Policía Federal que buscaban enfrentar a balazos un bloqueo en la comunidad de Nochixtlán con un saldo de entre 8 y 10 muertos, según dicen las partes.