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La población general de este tipo de insectos ha proliferado de manera inusual en los últimos años, llamando la atención de la ciudadanía, que no se acostumbra a lidiar con cantidades masivas que hay, inclusive, durante la temporada de frío. Los expertos analizan no solamente la incidencia de su comportamiento biológico en los periodos de incubación, sino también en materia epidemiológica como foco transmisor de infecciones, bacterias y padecimientos que afectan a otros seres vivos y los humanos.
Aunque actualmente los días no son tan cálidos por el transcurso de la época invernal, los habitantes de algunas ciudades en la frontera de Tamaulipas ya se han percatado que existe una plaga de insectos voladores intentando obstinadamente ingresar a las habitaciones de sus casas y hasta el interior de los vehículos.
Y es que en Reynosa, a pesar de las campañas de fumigación implementadas por la Secretaría de Salud, los enjambres de moscas (de la especie de los dípteros) se han convertido en foco de infección, amenazando la salud de las familias.
Debido a su gran cantidad y persistencia tales insectos ya no pueden pasar desapercibidos, especialmente en las cocinas, comedores industriales y centros laborales; en supermercados y establecimientos de productos alimenticios y condimentados.
Los mentados bichos ahora pululan no sólo en los depósitos de basura, sino también se posan y aparean en las paredes y superficies cálidas de los hogares reynosenses.
Incluso ya hay reportes de personas que han terminado en consulta médica por haber contraído infecciones derivadas de este problema público.
Recientemente una familia de la colonia Balcones de Alcalá salió de casa con la intención de comprar algunos productos enchilados para satisfacer el antojo. Un vehículo perifoneaba una canción del grupo Pegasso, que a su vez les anunciaba la venta de elotes preparados y otras golosinas acostumbradas en la región.
La señora Adriana no dudó en comprarse uno para calmar el hambre; instantes después lo degustaba con ansias cuando una mosca detuvo su vuelo en su alimento y sin darse cuenta se lo llevó a la boca con todo e insecto.
Al advertirle sus acompañantes del bicho en la mazorca rápidamente lo arrojó al piso. Pasaron pocos minutos cuando un fuerte dolor de estómago la doblegó, le causó vomito y temperatura que tuvo la necesidad de buscar atención médica.
El personal de salud le comentó que había adquirido una infección en el aparato digestivo, por lo que requirió de tratamiento para poder erradicarla.
Iliana Villarreal Cantú, titular de la IV Jurisdicción Sanitaria con sede en Reynosa, reconoció que este tipo de casos se están replicando con frecuencia en la ciudad, pues al haber mayor cantidad de moscas la población se expone al riesgo de contraer enfermedades transmitidas por la contaminación de los bacilos que éstas desprenden.
La situación predomina con más razón en las estaciones cálidas del año, pero incluso durante el invierno se observan en grandes cantidades, provocando un cambio de hábitos en los usos y costumbres de los residentes fronterizos, ya que algunas actividades al aire libre relacionadas con la preparación y consumo de alimentos han dejado de ser aconsejadas.
“Se muestran inofensivas, reposan aquí, segundos después allá y levantan el vuelo como si tararearan una picaresca melodía, se posan en tu ropa y finalmente aterrizan en tu comida llamando tu atención, y es ahí cuando comienzas a bailar con ellas intentando matarlas, levantas los brazos, buscas alejarlas, pero no hacen más que burlarse de ti”, menciona simpáticamente un vendedor ambulante de la zona Centro de Reynosa.
Lo cierto es que este tipo de insectos, además de posarse en los alimentos, desciende y frecuenta materias descompuestas, heces fecales, cadáveres de animales, agua contaminada y compuestos orgánicos en contenedores de basura, entre otros desechos.
LOS INSECTOS SE CONTROLAN,
PERO NUNCA MUEREN
En el invierno los moscas no desaparecen, por el contrario, buscan refugio para mitigar las temperaturas gélidas y aprovechan para reproducirse.
“Así es este tipo de insecto, no se muere por más frío que haya, pues se termina escondiendo en lugares más cálidos, hendiduras o zonas con humedad”, confirmó la doctora Villarreal Cantú.
Admitió que precisamente se han observado muchas moscas y eso se debe, señaló, a que tardan semanas concentradas en lugares cerrados. Por lo regular viven entre 15 y 25 días, pero en condiciones óptimas su ciclo puede alcanzar los dos meses.
Su longevidad depende de la temperatura, pero cada una pone hasta 500 huevos y repite este patrón varias veces antes de morir, cuando ya maduraron sus larvas.
“Por el frío se mantienen en una sola área, por lo que las recomendaciones son usar telas mosquiteras, limpieza en los patios, lavar bien frutas y verduras para evitar enfermedades diarréicas, así como el constante lavado de manos es muy importante para poder prevenir sus efectos”, recomendó.
LO QUE TRANSMITEN
Los padecimientos más comunes relacionados con los gérmenes de las moscas son la fiebre tifoidea, el cólera, salmonela y otras infecciones gastrointestinales. Por eso expertos en salud emiten una serie de recomendaciones para inhibir a los insectos.
De acuerdo con la opinión de la epidemióloga, Gloria Leticia Doria Cobos, la reciente plaga se debe a que hay muchos desechos por todos lados en la ciudad.
Por esto consideró importante que la comunidad tome medidas paliativas, ya que esta clase de insectos son evidentemente transmisores de enfermedades.
La entrevistada pidió evitar que los bichos estén en contacto con comestibles, lavarse las manos antes de comer y después de ir al baño como una medida importante, procurar no tener desechos y basura en el interior de su casa que puedan atraer a este tipo de seres voladores.
“Si se paran en los alimentos pueden contaminarlos y producir infecciones diarréicas, y algunas otras. Es importante cubrir los alimentos sobre todo los que ya están preparados y son para consumirse porque puede ser un mecanismo de transmisión”, explicó.
“Es importante que la basura y los restos de alimentos estén bien tapados en bolsas; si es posible mantenerlos en el refrigerador antes de que se tiren para evitar la proliferación de las moscas”, agregó la doctora Doria Cobos.
CAMBIO CLIMÁTICO REPERCUTE
De acuerdo con la información proporcionada por el docente en ingeniería ambiental de la Universidad Autónoma de Tamaulipas (AUT), Teófilo Flores Santiago, estos insectos indican que en algún lugar existe un factor de riesgo por contaminación.
Explicó que el clima puede ser un regulador natural, ya que los cambios meteorológicos de la región son variables, por lo que se incrementa la fecundidad de los insectos; incluso, también afecta a esta especie, pues las temperaturas muy elevadas reducen su fertilidad y provocan una modificación en la distribución geográfica de las especies.
Por lo general, los bichos adultos pueden desarrollarse entre los entre 10 y 26 grados centígrados.
El catedrático advirtió que para afrontar la plaga de moscas en Reynosa es necesario vigilar el entorno donde éstas se encuentran. Esto por medio de una serie de actividades como la limpieza, ya que la higiene es una responsabilidad que comienza en casa.
“Por ejemplo cuando sacamos al perro hay que levantar sus heces, no tener perros y gatos en las calles, la basura, nosotros mismos hacemos deprorable nuestro medio ambiente y debemos de ser solidarios”, explicó Flores Santiago.
MEDIDAS CASERAS
En algunos hogares se acostumbra a colgar bolsas de plástico transparente con agua, como medida para ahuyentarlas.
En otros casos existen plantas aromáticas que funcionan como repelentes de moscas y de otros insectos. Algunas especies que pueden ayudar a espantar a los dípteros son la citronela, albahaca, laurel, caléndula, salvia, menta, lavanda, romero, y ajenjo.
También hay quienes hacen uso de desinfectantes y productos de limpieza, como remedio para mitigar los efectos de las mencionados insectos.
Aunque éstas son más notables en las colonias con mayor contaminación, en general la ciudad de Reynosa está invadida de moscas, lo cual causa una molestia a las familias que deben mantener las puertas y ventanas de sus casas cerradas.
La ciudadanía ha solicitado a las autoridades acciones para contener esta plaga, así como campañas públicas de limpieza para erradicar los focos de infección.