Muy lejos de las canchas del máximo circuito del futbol nacional, dos de las joyas del futbol tamaulipeco se toman un descanso en su tierra natal que les sabe a oxígeno puro antes de comenzar la pretemporada en sus equipos y una agenda muy cargada de encuentros locales y de la Interliga.
Edgar Hernández, ex de Tigres y actual portero de los Jaguares de Chiapas, terminó con su equipo en el lugar treceavo de la clasificación general, con Luis Fernando Tena como técnico.
Fuera de casa demostraron ser el mejor conjunto, pero en el estadio “Víctor Manuel Reyna” no pudieron sacar los resultados que esperaban. De todas maneras el fronterizo cumplió con un buen papel en el marco alternando con el veterano Oscar “El Conejo” Pérez.
Por su lado, Arturo Echavarría, pivote
creativo de los Indios de Ciudad Juárez, ex jugador del Once Caldas de Colombia y de las Chivas Rayadas del Guadalajara, completó su cuarta temporada en Primera División.
Con la presión de una olla exprés, por la mala marcha que dejó a su equipo como el sotanero de la tabla con seis unidades, Echavarría aprovecha el tiempo libre para despejarse e intentar descifrar el crucigrama del descenso para aportar un mejor rendimiento junto con sus compañeros en miras al Torneo Clausura 2010.
Ambos deportistas se encontraron en Reynosa en un juego amistoso, donde fueron invitados a participar como rivales en la cancha Scratch Fut Siete, localizada por el rumbo del Puente Internacional Reynosa-Hidalgo.
Con buenas acciones de Edgar, Arturo y de los “amigos del barrio”, el encuentro terminó empatado a seis goles. Al final, una carne asada les fue preparada como parte de la bienvenida.
En entrevista con Hora Cero ambos jugadores reconocieron su alegría de estar nuevamente en sus lugares de origen, con su gente.
“Me siento contento de venir a mi tierra y compartir con la familia después de haber estado con el equipo. La verdad fue un torneo de muchos contrastes, porque no pudimos ganar de local, pero de visita fuimos los mejores”, destacó el portero de los Jaguares.
Con cinco temporadas en el conjunto naranja e igual número de directores técnicos (Víctor Manuel Vucetich, René Isidoro García, Sergio Almaguer, Miguel Angel Brindisi y Luis Fernando Tena) Edgar Hernández comentó sentirse muy agradecido.
“La verdad a todos ellos les aprendí mucho y desde luego han dejado huella y muy buenas cosas para mi carrera. En Brindisi veo a un tipo honesto que hacía lo que decía. Me dio mucha experiencia, oportunidad, confianza y en su era fui el capitán del equipo.
“Y de Luis Fernando podría decir que es una persona muy seria, que trabaja mucho el aspecto mental con todo el grupo. Creo que es un excelente entrenador, pero en general a todos los recuerdo muy bien”, señaló.
POR MEJORAR
Arturo Echavarría en tanto, se mostró feliz por estar de regreso en la ciudad donde comenzó a jugar el deporte que más ama.
“Eran merecidas unas vacaciones, yo creo que ya era necesario estar con la familia y con los amigos conviviendo un rato”, dijo.
Sin embargo, el jugador de la Tribu no escondió su inconformidad por no haber terminado la temporada como deseaba.
“A nivel personal muy bien, sigo en Indios, me he sentido muy bien, creciendo como futbolista y persona, pero lamentablemente el equipo no repitió el buen trabajo de la campaña anterior.
“Esperamos que la próxima nos salgan mejor las cosas como grupo y hay que seguir trabajando para salir de ese bache, porque nos estamos jugando el descenso. Para nadie y menos para nosotros es ideal regresar otra vez a Primera A. Lo importante es dar un paso adelante y no volver hacia atrás”, señaló el entrevistado.
Arturo aprovechó la ocasión para elogiar la plaza más norteña con la que cuenta el futbol mexicano.
“La gente de Ciudad Juárez, toda la afición y la directiva, es un club que merece permanecer durante muchos años en Primera División, por lo que significa para la ciudad. Eso queda en nosotros y hay que trabajar para regalarles a ellos ese anhelo de mantenernos en el máximo circuito”, afirmó.
No obstante, en en el torneo Apertura 2009 el cuadro que comanda José Treviño, un técnico que había estado en los Tigres, resintió la ausencia por lesión de Daniel “El Maleno” Frías, uno de sus artilleros y de los hombres más desequilibrantes de Ciudad Juárez.
“De hecho yo me llevo muy bien con él, nada más que ahorita sufrió una lesión en el tobillo y no se ha podido recuperar, pero regresando a su nivel seguro que va a ayudarnos mucho al equipo”, comentó.
EL ADIOS A UN GRANDE
Sobre el fallecimiento del futbolista Antonio De Nigris, quien sufrió un infarto el pasado 16 de noviembre en Grecia, tanto Edgar Hernández, como Arturo Echavarría se notaron visiblemente consternados.
“Es triste, porque resulta difícil que un deportista muy sano y un gran jugador quien llegó a portar la camisa de la Selección Mexicana, muera de esa manera.
“Es un suceso muy desafortunado para el medio futbolístico, para su esposa y su hija. Creo que este es un ejemplo de que aunque uno se cuide algo así nos puede ocurrir a cualquiera”, consideró el jugador de Jaguares.
Memoró que contra el “Tano” no alcanzó a jugar, pues este último hizo la mayor parte de su carrera fuera de México, pero con Aldo, su hermano, le tocó vivir más de dos años desde las fuerzas básicas de los Tigres de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL).
Entretanto, Arturo, quien fue cedido por Chivas de préstamo al Once Caldas colombiano, equipo donde militó De Nigris, hizo manifiesta su tristeza por su repentina partida.
“No me tocó coincidir con Antonio que en paz descanse, porque yo llegué una temporada después, pero la gente allá lo recuerda muy bien, pues hizo muy buen trabajo por Colombia.
“Para todos yo creo que su muerte fue muy sorprendente. Te quedas impactado y como no queriendo te mete un miedo. Yo creo que los médicos deben estar más atentos de eso, poner más atención, porque ya van varios decesos que se presentan así.
“A cualquiera nos puede pasar, esperemos en Dios que no, pero es un caso al que hay que ponerle más atención” insistió el mediocampista.
UNA EXPERIENCIA UNICA
Edgar Hernández mencionó que se siente satisfecho por sus logros personales y por la confianza recibida a lo largo de su carrera, pero agregó que desea seguir mejorando.
“Mi máxima satisfacción siempre fue jugar en Primera División. Yo creo que todos tenemos sueños de niños y el sueño de llegar hasta ese nivel y gracias a Dios se han cumplido muchos de los que he tenido.
“Creo que el estar y permanecer más de seis años. El haber ascendido con un equipo (el San Luis Potosí), lograr un campeonato, es lo más bello que te da este deporte, además de conocer partes de todo mundo, compañeros y muchas cosas que la verdad uno no se imaginaba”, manifestó el cancerbero felino.
Acerca del nivel de competencia del futbol mexicano, Hernández mencionó que éste ha crecido notablemente.
“Pienso que no le pide nada al sudamericano ni al europeo, porque tenemos grandes jugadores y lo hemos demostrado. A veces pasamos por malas rachas, pero creo que contamos con un excelente futbol”, consideró.
El portero de Reynosa reveló que sus sueños actuales son seguirse consolidando y como todo futbolista llegar a portar la camisa de la Selección.
Agregó que por ahora se concentrará con su equipo en hacer una buena pretemporada, un buen torneo Interliga a principios de enero y mejorar en calidad de locales.
Subrayó que el ambiente en el estadio de los Jaguares es ejemplar, pues su afición “ha sido muy noble, respetuosa y cariñosa”.
Dijo sentirse verdaderamente alegre de estar en estos momentos con sus papás.
“Obviamente es fabuloso ver a la familia, traer a los hijos para que convivan con sus abuelos y estar con los amigos, jugar un rato. Convivir con todos ellos es muy padre”, abundó.
Sobre la pregunta de qué otra posición que no sea la de portero desempeñaría en el terreno de juego, Edgar sonrió como respuesta y añadió:
“Pues no me lo imagino, porque respeto a mis compañeros y cada quien tiene su posición… (risas), pero si me dijeran que no hay otra opción elegiría de central o de centro delantero, porque me gustan los recorridos largos”, sugirió.
Y bajo los tres postes el de Reynosa reveló tener una pesadilla que afortunadamente parece disiparse, tras haber colgado los botines uno de sus goleadores adversarios.
“¿Que quién es mi terror?, tengo uno que siempre me tocó que me metía gol, Bruno Marioni, que para fortuna mía se acaba de retirar, pero siempre que me topaba contra él me metía gol”, relató.
UN FUTURO POR DELANTE
Mientras tanto Arturo Echavarría mencionó estar cómodo en los Indios, donde espera reivindicarse como titular, un puesto que ha venido desempeñando en los últimos partidos.
“Gracias a Dios ya estamos ahí, la meta es mantenerse y seguir trabajando para lograrlo poco a poco. Espero el siguiente torneo seguir sumando minutos y que las cosas salgan mejor”, deseó.
El volante del cuadro fronterizo consideró que probablemente seguirán con José Treviño como timonel a quien le agradece la oportunidad, pero tampoco se olvida del estratega que lo debutó en la Primera División Mexicana, Héctor Hugo Eugui.
“El fue quien me dio el chance de saltar a esta categoría. Estoy muy agradecido con el profe, a él se lo debo todo, porque confió en mí y a la directiva también.
“Le deseo lo mejor, lamentablemente no se nos dieron las cosas y tuvo que salir del equipo, pero siempre le guardaré una admiración muy especial”, externó el deportista de 21 años.
Por último, ambos jugadores orgullo de la frontera de Tamaulipas enviaron un caluroso saludo a la afición de Reynosa, a la que le prometieron mucha entrega y trabajo con sus respectivos equipos.
“Estamos muy agradecidos con todos los amigos que nos han recibido. Pasan los años y seguimos aquí reuniéndonos y eso nos motiva más, porque sabemos que hay personas que siguen nuestro trabajo y nos reciben con los brazos abiertos.
“Les agradecemos también a ustedes, que siempre están al pendiente y esperemos que pronto salgan más jugadores de Reynosa al profesionalismo”, concluyeron.