Súbitamente apareció por el cielo tamaulipeco la “Jaiba Señal” anunciando que un grupo de tamaulipecos avecindados en la Ciudad de México -quienes anualmente otorgan reconocimientos a los paisanos distinguidos-, habían acordado conceder esta distinción al tampiqueño
Rodolfo González Valderrama, quien se desempeña como Director de Radio, Televisión y Cinematografía (RTC) del
gobierno federal.
Lo que causó inquietud por estas tierras no fue propiamente la “Jaiba de Oro” -así se denomina el reconocimiento-, sino el antecedente de que esa agrupación distinguió a Américo Villarreal Guerra y Manuel Cavazos Lerma cuando ambos fueron senadores y, posteriormente, esta mancuerna hizo el 1-2 en la gubernatura.
Por lo anterior es lógico y natural suponer que los paisanos avecindados en la CDMX, encabezados por Silvia García y Ricardo Munguete, algo olfatearon independientemente de los méritos académicos y profesionales de González Valderrama, ya que por estar en permanente contacto con la grilla y, por añadidura, a la caza de las señales que apuntan las preferencias de los que mandan y deciden en la política, es de tomarse en consideración el reconocimiento que le hicieron al Director de RTC.
Al examinar los antecedentes de Rodolfo González Valderrama es posible darse cuenta que en su etapa de estudiante en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, conoció a Andrés Manuel López Obrador y a Ricardo Monreal Avila, con quienes se reencontró en la vida profesional. En política estas circunstancias vaya que ayudan a impulsar una carrera dentro del servicio público.
Pero que nadie se acelere, en este tema hay que hacer algunas consideraciones:
Será en el verano del 2022 cuando los partidos políticos nominarán a sus candidatos a la gubernatura, la fecha cronológicamente se ve distante pero no así política, porque construir una candidatura para un proyecto de esa envergadura lleva años.
Quién sabe con qué intención los “chilangotamaulipecos” lanzaron al cielo la “Jaiba Señal”, pero vaya que inquietaron la gallera y, de paso, posicionaron a González Valderrama en la competencia para ser el candidato a gobernador de Tamaulipas por el MORENA.
¿Y VA EN SOLITARIO?
No. Quien anda con la misma intención es Héctor Garza González, Oficial Mayor de la Secretaría de Educación Pública, quien tuvo participación en un evento magisterial en el Zócalo de la CDMX y cada vez que se justifica viene a Tamaulipas a organizar reuniones y presidir actos relativos a los estudiantes y profesores.
Sin duda es un prospecto para la candidatura a gobernador, al igual que José Ramón Gómez Leal, quien ya se ve consolidado en la súper delegación del gobierno federal de Tamaulipas, mientras que los alcaldes Adrián Oseguera Kernion de Ciudad Madero y Mario López Hernández de Matamoros, están anotados para el handicap tamaulipeco.
Tampoco se puede dejar fuera al senador Américo Villarreal Anaya, aunque en su caso como que se apagó por no entrarle con todo el corazón a la petición de desaparición de poderes en Tamaulipas.
En suma, la “Jaiba Señal” con todo y no provenir de una institución oficial, puede interpretarse como el inicio de que las hostilidades por la gubernatura de Tamaulipas que ya empezaron y no habrá quien las pare.
Y quien lo dude sólo tiene que voltear para el lado del PAN, donde el senador Ismael García Cabeza de Vaca realizó un informe de sus actividades legislativas en el Parque Cultural Reynosa, mientras que Maki Ortiz le dio un sólido golpe al gong de la Cámara de Diputados, proponiendo que los comerciantes informales, como los vendedores de tacos y elotes paguen impuestos. La noticia voló la noticia por todo México y hasta CNN la divulgó en el extranjero.
GERARDO VS MAKI
Es público y notorio que Gerardo Peña Flores y Maki Ortiz son dos de los principales prospectos azules para la candidatura a gobernador, de momento entre ambos no se advierte rivalidad, pero conforme se acerque el verano del 2021 si no logran conciliar intereses, el presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso del Estado tendrá en sus manos una arma letal para anular a la alcaldesa de Reynosa, como son las cuentas públicas del municipio, que podrían generar un juicio político contra la edil.
En su Artículo 151 la Constitución Política del Estado describe quiénes podrán ser sujetos de Juicio Político y entre ellos están desde el gobernador del Estado hasta los integrantes de los ayuntamientos, quienes pueden ser sujetos a este procedimiento cuando incurran en actos u omisiones en perjuicio de los intereses públicos fundamentales o su buen despacho. Sin embargo, no son los diputados locales quienes juzgarán, sino solamente acusarán y serán las dos terceras partes del pleno del Supremo Tribunal de Justicia quienes determinen la sanción correspondiente.
Si bien los diputados tienen la facultad de acusar a los que forman parte del servicio público del Gobierno de Tamaulipas, tanto a nivel estatal como municipal, son los magistrados los que tienen la última palabra, y aquí surge la duda sobre si
Gerardo Peña Flores caerá en la tentación de auspiciar un Juicio Político para eliminar una adversaria del calibre de Maki Ortiz, porque donde le falle el tiro él será eliminado en automático y ya no podrán frenar a la alcaldesa.
Aparte de la legalidad obrará una circunstancia muy poderosa, de que todavía falta que el comité ejecutivo nacional del PAN permita que pasen a cuchillo a una figura política como Maki Ortiz que en Reynosa es la que tiene más peso, incluso más que el Comandante Azul. De ahí la especulación de que sí sobrevive al 2021, en el verano del 2022 será una prospecto con muchas posibilidades de obtener la candidatura a gobernador.
¿Y EL PRI?
Por ahora los tricolores se encuentran inmersos en la renovación de su comité directivo estatal, pero andan enmuinados porque están viendo que Egidio Torre Cantú sigue metiendo su cuchara al empujar al sanfernandense Tomás Gloria Requena, que dicen está muy enterado de los asuntos de los campesinos, lo que es insuficiente para levantar al PRI y hacerlo un partido que, por lo menos, participe en las próximas elecciones con dignidad.
Se supone que al PAN es a quien más conviene levante el pico el gallo tricolor, de no hacerlo tendrá frente a frente al MORENA, que si bien en las elecciones de junio pasado salió por debajo de la mesa perdiendo ante el PAN en 21 de los 22 distritos, la renovación de su comité ejecutivo nacional cambiaría notablemente los equilibrios y por añadidura las decisiones serían sin influencias ni trucos al momento de resolver quienes serán los 9 candidatos a diputado federal, los 22 a
diputado local y los 43 a presidente municipal.
Pero regresando con el PRI, Edgar Melhem Salinas y Enrique Cárdenas del Avellano son quienes se oponen a la injerencia de Egidio, pero en el CEN del tricolor no parece interesar la suerte de sus huestes en Tamaulipas, así que jóvenes como Daniel Santos y Carlos Vásquez tendrán que echar el resto para lograr que el PRI participe con candidatos dignos y con aspiraciones de ganar.
Y hasta la próxima.