
En el enfrentamiento entre Nuevo León y Tamaulipas por el agua, Reynosa es una de las localidades que se verán más afectadas con la construcción del acueducto El Cuchillo II, pues al no respetar la Conagua los acuerdos de trasvase de 1996, el Distrito de riego 026 pasará a ser de temporal. Según los expertos, en dos años, ya que entre en funcionamiento dicha obra (que llevará el doble del agua actual a la zona metropolitana de Monterrey), el escenario podría empeorar drásticamente para los municipios de la frontera tamaulipeca.
Tamaulipas defenderá el agua. Son las palabras del gobernador, Américo Villarreal. Empero, la nueva administración estatal tiene detrás de la compuerta un problema que es mayor de lo que se pudiera pensar.
La prolongada sequía de los últimos años ha exacerbado una disputa que antes se quedaba en los escritorios y que ahora puede escalar a niveles nunca antes vistos.
Los gobiernos de Tamaulipas y de Nuevo León se han enfrascado en una pelea legal y mediática para asegurar el abastecimiento del vital líquido para sus pobladores, industrias y zonas de cultivo. A nivel municipal el agua es también un recurso que se vende y representa millonarios ingresos para los ayuntamientos, siendo a su vez una fuente de financiamiento de obras públicas y pago de emolumentos al sector burocrático.
No obstante, el pleito por la división y tenencia del agua es histórico. Se remonta a las primeras décadas del siglo XX, cuando comenzó la distribución de los distritos de riego y la construcción de embalses y represas para abastecer a vastos territorios de uso agrícola y urbanos.
Con los años las necesidades de las crecientes poblaciones fueron otras y la demanda de agua creció exponencialmente, hasta que los trabajos de ingeniería elaborados por anteriores administraciones se vieron rebasados.
La federación, especialmente en los sexenios de Felipe Calderón Hinojosa y Enrique Peña Nieto, desechó la construcción de infraestructura crucial para el noreste del país, ocasionando hoy una inusitada crisis por el agua.
Es ahora que varios fenómenos atmosféricos como El Niño y La Niña agravan las condiciones de humedad para esta franja de la República Mexicana, que los gobiernos de ambos estados se enfrentan en trámites y discursos. La retórica de hoy es no ceder ni una cubeta de almacenamiento.
Al no haber suficientes lluvias ni la captación ideal para poder hacer el uso de este importante recurso, las posturas se radicalizan.
Con el reloj en contra, Nuevo León y sus habitantes se han visto inmersos en una de las más difíciles épocas por la inaccesibilidad al agua potabilizada, pero las gestiones y decisiones que se están tomando para resolver temporalmente este problema comienzan a ser resentidas también por Tamaulipas.
COBIJO Y DESCOBIJO
De acuerdo con Sabás Campos Almodóvar, ex titular de la Comisión Estatal del Agua en Tamaulipas (CEAT), el futuro escenario para los municipios de la frontera en la entidad es muy adverso, ya que las políticas del gobierno federal para poder dar soporte hidráulico a la zona metropolitana de Monterrey, donde radican más de cinco millones de personas, podrían dejarlos sin el vital líquido.
“El acuerdo o el decreto que firmó últimamente el presidente de la República (con el gobernador de Nuevo León, Samuel García) afecta totalmente a Tamaulipas. Lo único que van a hacer es lograr que el Distrito de riego 026 del bajo río San Juan, que tiene aproximadamente 50 mil hectáreas en los municipios de Miguel Alemán, Camargo, Díaz Ordaz y Reynosa se vuelva un distrito de temporal sin agua, eso por el segundo acueducto de la presa El Cuchillo.
Este ingeniero civil y ex funcionario público advierte que ya lo había pronosticado, pero la federación, por medio de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y en su momento el anterior gobierno de Nuevo León, no aprobó las obras para evitar este desastre.
“En el acuerdo original, haciendo un poco de historia, la presa de El Cuchillo se autorizó y construyó en el periodo del presidente Carlos Salinas de Gortari. A raíz de eso, ya en la época del presidente, Ernesto Zedillo se formaron unos acuerdos de coordinación entre Tamaulipas y Nuevo León.
“Se estableció que Nuevo León, con la presa de El Cuchillo, tenía que soltar un mínimo de 300 millones de metros cúbicos hacia la presa Marte R. Gómez. A cambio de eso se tenía Monterrey que regresar por el río Pesquería una cantidad que era el sobrante de las aguas tratadas del área metropolitana, por medio de un conducto que iba a mandar las aguas negras hacia la presa Marte R. Gómez, vía río Pesquería.
“Ese acueducto nunca se construyó y Agua y Drenaje de Monterrey alegaba que de todos modos ellos estaban soltando el agua pero nunca llegaba la totalidad a la Marte R. Gómez. ¿Cuál es la causa?, lógico, es la cuestión de filtración y evaporación de los 150 kilómetros del río Pesquería hasta la presa Marte R. Gómez”, explica.
POSIBLE CORRUPCIÓN
Y por otro lado, el también ex gerente de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado de Reynosa (Comapa), agrega que en esas épocas el organismo de la Cuenca Río Bravo de la Comisión Nacional del Agua vendió parte de esas aguas a agricultores de lo que ahora es un distrito de bombeo en Pesquería y sus alrededores.
“Entonces, se creó un nuevo distrito de bombeo en donde ya no llegaba esa agua a Tamaulipas. Por acuerdos que hicimos desde el tiempo del gobernador Yarrington y después con Hernández Flores, por el agua que no llegaba la Conagua tenía que darle el dinero a los agricultores directamente de las Aguas No Retornadas (ANR), en donde por los metros cúbicos que faltaban y que no se habían podido sembrar o regar, muchas hectáreas del Distrito 026 se les complementaba con un pago de dinero en efectivo que les daban a cada uno de los agricultores de acuerdo a un padrón que se hizo en aquella época”.
No obstante, de acuerdo con Campos Almodóvar, al autorizarse la segunda etapa de El Cuchillo van a quitarle otros 5 metros cúbicos por segundo, lo mismo que lleva el primer acueducto a Monterrey y su área metropolitana. Eso quiere decir que ya no va a haber agua para riego en el Distrito 026”, alerta.
En el mismo tenor el entrevistado detalla que por el crecimiento de Reynosa originalmente la ciudad tomaba el 100 por ciento del agua para el consumo humano de la presa Anzaldúas a la potabilizadora. Con el desarrollo de los últimos años empezó a tomarla nuevamente del canal Rodhe, en donde ya se mezclaba una parte del acueducto del Anzaldúas y el faltante se toma del Rodhe.
“El canal Rodhe nace de la presa Marte R. Gómez, entonces al no haber agua, porque ahora sí van a estar a lo que llegue por lluvias o que haya alguna demasía que ingrese a este embalse, pues no va a haber una seguridad de líquido para consumo humano o agua potable para el 100 por ciento de la población de Reynosa”, advierte.
SERÁ UNA ASPIRINA
CONTRA EL CÁNCER
El ex titular de la CEAT pondera que ese problema (de Tamaulipas norte) no ha sido aún considerado a fondo y se tiene que pegar ahora mismo ‘el grito en el cielo’ para buscar soluciones reales y expeditas.
“Puede que este año que entra no va a estar listo El Cuchillo, que va a quedar en dos años, pero tan pronto echen a andar ese acueducto se acabó el agua para Tamaulipas norte.
“Yo estoy de acuerdo como cualquier ciudadano que hay que ayudar a Nuevo León, pero no a costa de Tamaulipas. Se deben de buscar otras opciones que ya existen y a las que no les están poniendo atención, que son las que en realidad le van a quitar el problema del agua a Nuevo León”, refiere.
Campos Almodóvar recalca que el Acueducto El Cullillo II resolverá el problema de falta de agua en Monterrey, pero esto solamente será por cinco o seis años.
“¿Y después?, En nuestra época, en las discusiones que teníamos por el agua yo les decía que hacer el segundo acueducto de El Cuchillo es como darle una aspirina a un enfermo de cáncer terminal. Nada más va a ser un paliativo, pero no le vas a arreglar el problema.
“Y es lo mismo que está haciendo ahorita la Conagua. Está siendo un paliativo para Monterrey, pero al rato van a tener que buscar de otro lado agua porque la ciudad sigue creciendo y nadie lo va a detener”.
El ex funcionario público recuerda que en su momento como jefe del máximo organismo estatal se buscaron soluciones, pero la federación no las respaldó.
“En nuestra época vimos lo del acueducto Falcón-Matamoros, que era para arreglar la situación del abastecimiento de agua potable de todas las poblaciones de la frontera norte, desde Nueva Ciudad Guerrero, hasta Matamoros, incluyendo Río Bravo y Valle Hermoso. Por algunas razones, de las que no tenemos conocimiento en este momento, la federación no quiso apoyar y no nos aceptó que se hiciera ese acueducto. Por otra parte, por ahí del 2008 y 2009, cuando todavía fungíamos en la dirección de la Comisión Estatal del Agua tuvimos una reunión en Monterrey con funcionarios de la Conagua que ya no querían pagarle a los agricultores de Tamaulipas norte las ANR y aparte querían que Tamaulipas les firmara la aceptación para el segundo acueducto de la presa El Cuchillo.
“En ese momento les presentamos la opción del Pánuco-Monterrey, y les dijimos, adelante. Nosotros como Tamaulipas les damos el agua que requieran del río Pánuco”, recuerda.
Para crecer 30 años Monterrey en esa época necesitaba alrededor de un millón de metros cúbicos anuales y el puro Pánuco tira al mar, porque no se usan, más de 14 mil millones de metros cúbicos.
“Les dijimos, tómenla del Pánuco y se quitan de todos los problemas, pero ya ven lo que pasó, con el gobernador anterior de Nuevo León (Jaime Rodríguez Calderón), que dijo que no”.
¿EL PÁNUCO LA SOLUCIÓN?
Sabás Campos Almodóvar reconoce que el caudaloso afluente que divide a los estados de Veracruz con Tamaulipas es una fuente inagotable de agua hasta este tiempo, pero también existen otras soluciones aplicables.
“A raíz de la creación de la energía renovable a través del viento y por medios fotovoltáicos ya se puede hacer, y es una de las propuestas que yo le comenté al que ahora es el director de la Comisión Estatal del Agua, el ingeniero Raúl Quiroga, que otra alternativa en estos momentos pudiera ser un acueducto de la Laguna Madre hacia la presa de El Cuchillo. Se está hablando de alrededor de 120 kilómetros en línea recta y de un desnivel de 50 metros.
“Y con la generación de energía eléctrica pueden poner una planta potabilizadora en la Laguna Madre o una planta que nada más le quite la sal y mandar el agua desalinizada a El Cuchillo y que con la infraestructura existente ya la puedan mandar a Monterrey y ahí ya pueden calcularla para 30, 40, 50 o 100 años, lo que necesite Monterrey y su área metropolitana.
“No hay agua más cara que la que no se tiene. Que van a tener que pagar el agua a mayor costo, pues bueno, a ver si así aprenden a cuidarla, pero yo pensando por nuestro estado, la federación se está olvidando de Tamaulipas por sacar adelante a Nuevo León”.
POSTURA DE TAMAULIPAS
El gobernador del Estado, por su parte, declaró en el Palacio de Gobierno de Ciudad Victoria que su administración se encargará de cuidar los recursos hidráulicos de los tamaulipecos.
Américo Villarreal Anaya se refirió al tema del trasvase de agua a las presas de Tamaulipas y reiteró que defenderá la postura de los productores agrícolas de los Distritos 025 y 026 para que se cumpla con lo establecido en la Ley de Aguas y en los acuerdos que existen a nivel federal sobre este tema.
“La postura es defender los derechos de agua que tienen los tamaulipecos de los distritos 025 y 026. Hay una Ley de Aguas de 1944, hay compromisos y acuerdos que se deben de dar. Siempre estaremos atentos para defender los derechos de los productores tamaulipecos”, indicó.
Estas declaraciones son vertidas luego de que su homólogo de Nuevo León, Samuel García, señaló que se pugnará para que no haya trasvase de agua con Tamaulipas.
A raíz de la fuerte sequía que ha impactado a la región noreste del país la guerra por el agua ha subido de tono entre los gobiernos de ambas entidades.
A las críticas del gobernador vecino se ha sumado el diputado local, Edgar Melhem Salinas, y dirigente del PRI en Tamaulipas, al argumentar que el estado no puede seguir esperando a que Nuevo León cumpla con el trasvase de agua.
LA GUERRA HÍDRICA
Por una violación al convenio existente de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) de 1996 este recurso para abastecer a los distritos fronterizos tendrá que demorarse tres semanas más, afectando seriamente a los agricultores de Tamaulipas.
Pero no solamente Nuevo León se opone a realizar este trasvase, también Chihuahua.
El 83 por ciento del volumen que sea movido de las presas La Boquilla y Francisco I. Madero hacia Tamaulipas podría perderse en su recorrido por el río Bravo.
Víctor Ríos García, asesor de la Asociación de Usuarios de Riego del Estado de Chihuahua (Aurech), impartió una ponencia durante el Primer informe de Avance en la asignación y contabilidad de las aguas propiedad mexicana, al cierre del segundo año del ciclo 36 del Tratado de Aguas Internacionales de 1944.
En presencia de alcaldes de cuatro municipios, representantes de siete distritos de riego del estado y agricultores, advierte que mover el agua desde Ojinaga, una vez que se desfoguen los embalses, hasta la presa Falcón en Tamaulipas, implica perder el 83 por ciento del líquido.
Considera que el Tratado de Aguas Internacionales no refiere a entidades federativas, por lo que no cuenta con fundamento la exigencia para que se trasvase agua desde Chihuahua.
Señala que las aguas del río Conchos no son internacionales y que la Comisión Internacional de Límites y Aguas (CILA), encargada de velar por el cumplimiento del tratado de 1944, sólo tiene jurisdicción en el río Bravo.
El conferencista denuncia que hace dos años el gobierno federal empoderó a la Comisión Nacional del Agua para trasvasar el recurso hídrico, cuando dicha dependencia no tiene atribuciones en asuntos internacionales.
AVA ABORDA EL TEMA
En tanto que el gobernador de Tamaulipas, Américo Villarreal Anaya, se refiere a las acciones que habrán de desarrollarse para garantizar el acceso a la población de la entidad.
“Ustedes saben que una de las preocupaciones más centrales de mi gobierno es garantizar el agua para los y las tamaulipecas. Por esta razón en un ejercicio de transparencia es importante dar a conocer a la ciudadanía las distintas acciones, gestiones y obras en las que estamos trabajando para cumplir este objetivo.
“Primero, para solventar el abasto de agua en nuestra capital, Ciudad Victoria, aunado a los beneficios que traerá consigo la segunda parte del Acueducto y considerando la información emitida por la Comisión Nacional del Agua (Conagua), donde indica que iniciará el trámite para suprimir la veda existente desde 1974 en la cuenca del río Soto la Marina, haremos la solicitud oportuna de un reservorio de agua de dos mil litros por segundo, lo cual garantizará disponer del agua para los próximos cien años”, declara el mandatario estatal.
Especifica que antes de concluir el mes de noviembre iniciará la primera perforación para buscar el agua profunda y ultraprofunda en la capital de la entidad, empleando tecnología de vanguardia vía satelital.
“Con respecto a la ciudadanía de la frontera les informo que estamos trabajando en un proyecto para llevar el agua de la cuenca del río Pánuco, mismo que consiste en aprovechar la presa Vicente Guerrero como un vaso regulador para surtir a los municipios que van desde Ciudad Mier hasta Matamoros, explorando la posibilidad de almacenar agua también en la presa Marte R. Gómez y auxiliar al Distrito de Riego 025 del bajo río Bravo”, destacó.
Entre tanto, Villarreal Anaya refiere que en Tampico, Ciudad Madero y Altamira se ha detectado que el mal estado en el que se encuentra el dique El Camalote por la desatención de anteriores administraciones, produjo que los tamaulipecos de la zona conurbada tuvieran el agua con altos niveles de sal.
“Actualmente estamos realizando trabajos para la reparación de este dique y al finalizarlos garantizaremos agua de buena calidad para sus habitantes”, apunta.
TRASVASES CON NL
El gobernador de Tamaulipas aborda también el tema relacionado con el acceso al agua con el estado vecino.
“Pero otro de los temas que ha llamado la atención en días recientes es el trasvase de la presa El Cuchillo. Desde el inicio de la construcción de la presa Marte R. Gómez en el año de 1936 siempre ha existido de parte de los tamaulipecos la disposición de apoyar a las soluciones y a las necesidades y demandas, tanto del vecino estado como de los agricultores del distrito de riego del bajo río Bravo.
“El 13 de noviembre de 1996 los gobiernos de Tamaulipas, Nuevo León; la Conagua, el Distrito 026 y los servicios de Agua y Drenaje de Monterrey firmaron un acuerdo para el trasvase del agua de la presa El Cuchillo a la Marte R. Gómez.
“En dicho acuerdo se especifica claramente que con base a los datos de almacenamiento de las presas al 31 de octubre de cada año los análisis de la Conagua para determinar la cantidad de millones de metros cúbicos que serán transferidos comenzará a partir del 1 de noviembre. Esto significa que esa fecha nunca ha sido la fecha de trasvase, sino cuando comienza el análisis de la autoridad federal competente. El cumplimiento de este acuerdo no depende de ninguna manera de la voluntad del gobierno de Nuevo León, sino de las comisiones hídricas de agua de ambas presas”, aclara.
Asimismo Villarreal Anaya indica que actualmente El Cuchillo cuenta con 760 millones de metros cúbicos y considerando que trae cada año la cantidad de 154 millones existe un volumen adicional considerable para asegurar el abasto de agua en acueducto a la ciudad de Monterrey.
“Nuestra presa Marte R. Gómez cuenta con 380 millones de metros cúbicos y en los últimos cinco años se ha extraído un promedio de 400 millones. Aquí es importante mencionar que en todas las presas existe un volumen muerto, lo que significa que no se puede sacar ese volumen. En el caso de la Marte R. Gómez es de 100 millones, por lo que nos deja en realidad 280 millones utilizables para el ciclo agrícola que en promedio es de 400 millones de metros cúbicos”, especifica.
El mandatario asegura que ha enviado un oficio al directo de la Conagua solicitando el trasvase de la cantidad necesaria para alcanzar los millones de metros cúbicos que requieren los productores.
“Una vez aclarado esto quiero enviar un mensaje muy claro: por más de 25 años este acuerdo se ha respetado sin excepción y hoy existen las condiciones legales hídricas para que se siga realizando. Así que los productores pueden tener la certeza de que contaremos con la suficiencia necesaria. En mi gobierno ya estamos realizando todas las gestiones para que esto suceda y estamos seguros que así será”.
Además Villarreal Anaya se refiere a su comunicación permanente con el director general de la Comisión del Agua, el ingeniero Raúl Quiroga, quien le ha informado que con la cantidad del recurso con la que se cuenta en estos momentos puede comenzarse con normalidad el plan de riego; sin embargo, insiste en que es urgente conocer la determinación por parte de la Conagua, del volumen que será trasvasado, para que con esta información los usuarios puedan planificar sus cultivos.
“Hago un respetuoso llamado a la autoridad federal para acelerar el proceso de análisis y determinación y con esto lograr tranquilidad a las miles de personas que se dedican a esta actividad en nuestro estado. Tengo la total certeza de que la cordura va a prevalecer. No es el momento de intentar politizar ni dividir con un acuerdo que durante décadas ha hermanado a dos estados vecinos con un objetivo común de bienestar de su gente.
“Aprovecho esta oportunidad para informarles también que desde el inicio de mi administración he tomado un compromiso y firmado con nuestras autoridades para el Distrito de riego 026. Se trata de la construcción de un emisor que vendrá desde Nuevo León hasta la presa Marte R. Gómez, que traerá 250 millones de metros cúbicos de agua tratada para el riego, lista para ser usada por nuestros productores y que sumada al agua de los escurrimientos por la cuenca propia solucionará el histórico problema del Distrito 026.
“Este tema ha avanzado muy bien, pues ya lo hemos comunicado al presidente Andrés Manuel López Obrador y el propio secretario de Gobernación, por lo que esperamos una respuesta favorable muy pronto”, señaló el gobernador de Tamaulipas.
OTRAS OPCIONES
El mandatario estatal ponderó el esfuerzo que se está realizando para que la Conagua también pueda bajar agua del estado de Chihuahua, particularmente de las presas La Boquilla y Luis León para llevarla al cauce del río Bravo que deposita sus aguas en la presa internacional La Amistad.
“Esto tiene dos objetivos fundamentales. Permitir a México como país abonar a la deuda hídrica a los Estados Unidos y a Tamaulipas tener una mayor disponibilidad de agua para el Distrito 025, el cual es el más grande del noreste de México.
“Productores y productoras de Tamaulipas, tengan la confianza y la tranquilidad de que cristalizaremos el trasvase como se ha hecho durante bastantes años. Lo haremos porque nos asisten la razón y los fundamentos jurídicos. No estamos pidiendo nada fuera de lo acordado. No hay razón para temer y por eso seguiremos haciendo todas las gestiones necesarias hasta lograr nuestro objetivo”, señaló.
Villarreal Anaya declara que en su gobierno no se descansará para cumplir con la demanda justa de contar con el vital líquido en todos los rincones del estado.
“Lo haremos porque además de un derecho humano es un compromiso que vamos a cumplir en todos los hogares. Las familias tamaulipecas merecen servicios públicos de calidad y el acceso al agua es uno de ellos.
“Construyamos una nueva cultura colaborativa para cuidar este preciado recurso. Estoy convencido de que contaremos con todo el apoyo y respaldo del gobierno federal porque la política de la Cuarta Transformación es de solidaridad, de respeto y sobre todo que procura el bienestar del pueblo. Soy testigo de la gran voluntad de nuestro presidente de apoyar a nuestro estado en todos los aspectos y ésta no será la excepción. No descansaremos en nuestro empeño de construir un mejor Tamaulipas con futuro para la niñez y la juventud; con acceso a los servicios de calidad y una vida digna en el que las familias puedan hacer realidad un sueño pendiente durante muchos años. Agua, bienestar para todas y todos”, argumentó el del Ejecutivo en Tamaulipas.
Por lo pronto, el mes de noviembre será crucial para el trasvase de recursos hidráulicos a Tamaulipas y se verá si la Conagua respeta los acuerdos del ‘94.
También será fundamental si las gestiones entre entidades y federación son las suficientes para construir el colector de aguas tratadas de Monterrey para el Distrito 026 que otras administraciones no quisieron hacer. La respuesta se dará con el transcurso del tiempo.
AGRICULTORES TAMAULIPECOS IRÁN POR AMPARO
El diputado, Edgar Melhem Salinas, presidente de la Comisión de Desarrollo Rural del Congreso del Estado, dice que no hay ninguna explicación que justifique el retraso de la Conagua para que se cumplan los compromisos de los tratados de agua, por lo que anunció la tramitación de un recurso legal por la violación del convenio de 1996.
El legislador indica que el gobierno de Nuevo León debe entregar el agua que le corresponde de la presa El Cuchillo.
Debido a la preocupación de que el gobernador de Nuevo León, Samuel García, tras la visita del secretario de Gobernación, Adán Augusto López, endureció su postura y se niega a entregar el agua, decenas de agricultores acudieron a las oficinas de la Conagua en Díaz Ordaz, para exigir el trasvase, pero los funcionarios se ausentaron.
Los productores advierten que harán todo lo necesario para defender su derecho, ya que El Cuchillo les garantiza el riego de las casi 70 mil hectáreas que se siembran en el Distrito 026.