Con el objetivo fundamental de evitar más pérdidas humanas y proteger el patrimonio de los tamaulipecos, el gobernador, Eugenio Hernández Flores, instruyó a los integrantes del Consejo Estatal de Protección Civil para mantener la alerta en el Estado e intensificar las acciones de atención y rescate derivadas de la emergencia climatológica desatada por las lluvias registradas en los últimos seis días.
El mandatario también convocó al Grupo de Alertamiento que involucra a instancias federales para ejecutar las medidas necesarias y definir la posibilidad de un llamado al gobierno federal para aplicar el Plan DN-III en las regiones críticas, recibir apoyo en esas labores a través de efectivos del ejército y la Marina.
Además, Hernández Flores puso en marcha el programa Post Lluvia en el cual la Secretaría de Salud del Estado realiza un diagnóstico de las situaciones sanitarias tanto en albergues como en zonas afectadas, para prevenir cualquier brote epidemiológico y actuar de manera inmediata para que se normalice la situación.
Asimismo, instruyó a la Secretaría de Obras Públicas valorar el estado de carreteras y caminos para actuar de inmediato y estar en condiciones de solucionar cualquier contingencia que bloquee la comunicación terrestre entre comunidades.
De la misma manera anunció un primer paquete de 122 millones de pesos ya licitados para la ejecución de obras hidráulicas en diferentes municipios de la entidad y un segundo paquete de inversión que se está integrando con la Comisión Nacional del Agua, que estará listo para ejecutarse en un par de semanas. Con esto se cumple la primera fase del acuerdo de inversión bipartita de 600 millones de pesos entre el Gobierno del Estado y la CNA.
En la reunión con secretarios y directores de las dependencias involucradas en el tema de Protección Civil convocada por el Ejecutivo estatal, el director general del Organismo de Cuenca Golfo Norte de la Comisión Nacional del Agua, Roberto Schuldes Dávila, reportó lluvias probables hasta el jueves próximo.
Ante este pronóstico, el gobernador instruyó para mantener la alerta por las crecientes de los ríos y sistema lagunario que pueden afectar la zona conurbada Tampico-Madero-Altamira.
De acuerdo a los reportes de daños hay actualmente 87 colonias del sur afectadas, 14 comunidades y 14 ejidos que tienen afectación. La zona potencialmente afectable es de más de 40 mil habitantes y aunque ha habido evacuaciones solamente se tienen 485 personas albergadas.
A las zonas afectadas con más severidad se les apoya con un helicóptero para el traslado de sus residentes a los albergues, así como el suministro de cobijas, agua potable y despensas, además de la atención médica que requieran.