
Es casi mediodía en Ciudad Mier. En la Plaza Principal un grupo de hombres barren las banquetas, pintan los muros del palacio municipal e instalan un templete adornado con una enorme bandera tricolor. Una canción norteña que sale de un equipo de sonido alegra su jornada, que no se detiene sino por el paso de un profesor.
Es Alberto Peña González, el alcalde de este pequeño poblado enclavado en las riberas del Río Bravo, a quien los jornaleros, apenas lo ven acercarse, sueltan sus brochas, escobas y desarmadores para saludarlo.
“El profe” –como todos los conocen–, luce contento; después de todo este 15 de septiembre es una fecha especial para esta comunidad que hace cuatro años se convirtió en el primer “Pueblo Mágico” de la franja fronteriza de México con Estados Unidos, y hace apenas unos meses vivió el infierno de convertirse en el campo de batalla de los grupos armados que operan en la región.
Durante semanas, las apacibles calles de Mier fueron testigos de los enfrentamientos de estas bandas que arrasaron con la vida de esta comunidad que tiene en el turismo, comercio y ganadería sus principales vías de subsistencia.
Medios de comunicación nacionales y extranjeros dieron cuenta del éxodo de miles de mierenses que escaparon a Estados Unidos o a ciudades tamaulipecas vecinas, buscando evadir las balas y granadas que alcanzaron –literalmente– a cada casa, negocio y edificio público de este poblado.
Hoy la paz ha regresado, los enfrentamientos han cesado y, poco a poco, los asustados habitantes de este “Pueblo Mágico” han vuelto para ocupar lo que quedó de sus casas.
Sin embargo el proceso no ha sido sencillo, pues como lo explica el alcalde Peña González, “Ciudad Mier es como un enfermo que cayó en coma y apenas acaba de despertar”.
En entrevista, aseguró que poco a poco, con el trabajo de autoridades y ciudadanos, este ciudad fronteriza volverá a tener el esplendor que sólo puede dar una historia de más de 250 años.
RECONSTRUIR EL TEJIDO SOCIAL
Aunque ha sido entrevistado por canales de televisión y periódicos de todo el mundo, hablar con este supervisor de escuelas primarias metido a la política es relativamente sencillo, aún cuando la agenda para este día esté bastante ocupada pues en unas horas más se llevará a cabo la ceremonia del Grito de Independencia.
De hecho, aseguró el alcalde, el evento será algo muy especial para el poblado.
“Va a ser una ceremonia muy especial, la estamos haciendo normalmente, a la misma hora que se marca para dar el Grito. Va a haber una verbena popular muy bonita, la coronación de la Señorita de la Independencia, un concurso de trajes típicos, antojitos mexicanos y música, incluso vienen unos artistas de Ciudad Victoria”, relató.
Peña González indicó que llegar a este punto no hubiera sido posible sin el apoyo del Gobierno del Estado que ha aplicado varios programas para resanar las paredes, reemplazar los vidrios rotos y, principalmente, sanar el dañado tejido social de esta comunidad.
“Con las situaciones que se dieron la familia se dispersó. No se dio al 100 por ciento pero sí afectó al comercio, la industria, el turismo, en fin, la actividad propia de una ciudad. Entonces el gobernador Egidio Torre Cantú implementó una estrategia que se llama ‘Comunidades Justas para Todos’ y afortunadamente se nos dio la oportunidad de reparar todas las casas y los negocios que fueron afectados.
“Después se implementó una estrategia que se llama ‘Protege’, que es de empleo temporal que le dio a Mier alrededor de 200 empleos”, explicó.
Los apoyos del gobierno del Estado también alcanzaron al sector educativo, ayudando a los niños y jóvenes a que regresaran a las escuelas.
“Se les entregó a los jóvenes estudiantes becas, incluso el pago de la colegiatura y todo lo que implica estar estudiando en una escuela de educación media; se nos donó un transporte escolar para los jóvenes”, señaló.
El alcalde de Mier precisó que las autoridades locales también han recibido la maquinaria que necesitan para realizar con mayor rapidez los trabajos de reconstrucción del municipio.
“Se nos da maquinaria como una motoconformadora, una retroexcavadora y camiones pipa para que le demos un cambio a la imagen urbana y a la sociedad, limpiando calles, emparejándolas.
“Con este programa de empleo temporal nos dimos a la tarea de limpiar arroyos, de pintar cordones, de construir banquetas, en fin todo esto que nos ha traído el gobernador a través de este proyecto”, apuntó.
El edil aseguró que los primeros resultados de este esfuerzo han comenzado a sentirse, pues de los 500 habitantes con los que se había quedado Ciudad Mier durante los momentos difíciles, hoy la población ha crecido a 4 mil 700.
“Eso es precisamente la reconstrucción del tejido social, la reactivación de la familia en las actividades tanto sociales como comerciales y turísticas. Se ha dado no sólo la seguridad de nuestro pueblo -que ya la tenemos-, sino también la seguridad de la región y del Estado. ¿Por qué?, porque la gente puede transitar libremente por nuestras carreteras, seguros.
“Ese es precisamente el esfuerzo que hace el gobernador para convertir en realidad este proyecto tan bonito. Eso hay que decirlo y hay que decirlo bien claro ¿por qué?, porque es un esfuerzo de todos los niveles de gobierno, un esfuerzo que se refleja en nuestro pueblo”, apuntó.
EL REGRESO DE LA ALEGRIA
Para el alcalde de Ciudad Mier, más allá de los beneficios que representa la reparación de fachadas y edificios, el mejor premio que ha tenido el esfuerzo gubernamental para regresar al poblado a la normalidad es que la gente puede volver a su vida cotidiana e, incluso, celebrar fechas especiales.
“Ya festejamos un aniversario más de nuestro pueblo, fueron 10 días de magníficas fiestas en donde coronamos a nuestra reinita, se asaron 258 pollos que fueron muy famosos en el Estado, en donde toda esa comida se les dio a las familias y todos compartimos estas fiestas en una armonía y una tranquilidad tremenda.
“Ahora nos estamos preparando para dar un Grito de Independencia igual como cualquier otra ciudad, normal, con una tranquilidad y una seguridad que ya la tenemos, que es una realidad”, manifestó.
Sin poder ocultar su satisfacción, Peña González aseguró que ver las calles de su pueblo con tráfico otra vez ha sido una de las cosas que lo ha vuelto más feliz.
“Lo que más extrañaba era el transitar de la gente, el movimiento de tantos carros, camionetas, el movimiento en nuestras carreteras. Si transitas de Reynosa a aquí te vas a dar cuenta que no es el mismo movimiento que había en el 2009 y eso es lo que extrañamos, esa fluidez, esa congregación de gente, el transitar. El que se conviva con mayor libertad, que se transite de un extremo a otro a cualquier hora.
“Afortunadamente ya se nos está dando, ahorita hay eventos en la plaza principal todos los días; aquí se practica el voleibol y están los muchachos, los jóvenes, los adultos y los niños hasta las 11:30, 12:00 de la noche. Eso nos da una clara idea de que en realidad estamos bien”, expresó.
El edil indicó que contrario a lo que se ha dicho, Mier nunca ha perdido su categoría de “Pueblo Mágico”, por lo que sigue recibiendo el apoyo del Gobierno Federal.
LA NOCHE ES MAS NEGRA ANTES DE AMANECER
El presidente municipal reconoció que los meses en los que la violencia se apoderó de las calles de Mier fueron complicados. Medio en broma, pero muy en serio, recordó que hubo momentos en que la prensa de Ciudad Victoria llegó a preguntarle si no sentía miedo de ser alcalde, a lo que siempre contestó: “un chingo… pero no puedes salir a la calle pensando que te van a matar, tienes que seguir trabajando”.
Añadió que reconstruir las casas dañadas y recuperar los espacios públicos no ha sido tan sencillo como lograr reactivar la economía del poblado.
“Cuando tenemos miedo existe la inseguridad, la inseguridad propia del individuo y entonces las cosas no se dan al cien por ciento. Fue un proceso muy lento pero poco a poco fuimos venciendo ese miedo.
“Se fue dando poco a poco la seguridad de nuestro pueblo, la gente fue adquiriendo esa tranquilidad de poder vivir con seguridad en nuestra ciudad. Lógico, fue un proceso lento, y muy laborioso para que esto se esté dando pero ya vamos muy avanzados”, sentenció.
Para Peña González, lo que sigue es convencer a los comerciantes, empresarios y ganaderos que abandonaron Ciudad Mier, que es momento de que regresen y reactiven la economía local.
“Muchas gentes (sic) pueden venir a traer sus capitales para renovar, restaurar, o simplemente reiniciar sus operaciones comerciales o industriales en éste caso muchos talleres. Eso se está logrando porque ya hay un poquito más de movimiento comercial; ya hay un poquito más de movimiento en cuanto a ventas de lo que ellos fabrican y ofrecen. De tal manera que bueno, yo considero que vamos avanzando muy rápido y muy bien.
“Ha sido muy complicado, primeramente porque tenemos no sólo que convocarlos, sino demostrarles que hay tranquilidad, eso es lo complicado. A veces la gente no lo entiende, a veces la gente todavía titubea, duda de que existen las condiciones para que regresen, pero estamos logrando eso; hemos visto algunas gentes interesadas en venir a reactivar sus comercios, estamos hablando de comerciantes, de restauranteros, de talleres”, indicó.
Este “picar piedra” ya ha dado frutos, pues poco la poco la actividad comercial en Mier se ha ido reactivando, lo que le está devolviendo la vida a las calles de este poblado que hace apenas unas semanas lucían desoladas.
“Aunque la gente lo piensa quizá dos o tres veces ya está regresando. Por ejemplo, las casas de cambio que tienen una cierta cantidad de dinero para estar haciendo sus transacciones diarias, estaban cerradas. Ahorita ya tenemos dos personas que están haciendo ese tipo de comercio, entonces eso refuerza la convocatoria que estamos haciéndole a todas éstas personas quienes desean venir a invertir a nuestro pueblo porque se están dando las condiciones”, dijo.
De hecho, otra de las actividades comerciales que regresará a Mier es la de la explotación de gas natural.
“Pemex regresa a nuestra comunidad, viene precisamente a generar una fuente de trabajo y una actividad comercial fuertísima no nada más para Mier, sino para el Estado y para el país. Esa tranquilidad es una condicionante para que Pemex ya esté pensando regresar con todo al cien por ciento, para renovar y reactivar su actividad”, indicó.
El edil reconoció que este regreso a la normalidad también se ha dado gracias al apoyo de los medios de comunicación, que se han dedicado a relatar cómo la paz ha regresado a Ciudad Mier.
“Se está dando la información de cómo se ha estado reconstruyendo el tejido social en Mier y en la región, los medios de comunicación a nivel nacional se dieron cita en esta ciudad y se ha estado publicando cómo es que se ha recuperado Ciudad Mier, y para nosotros es muy importante de que ustedes los medios de comunicación, estén aquí.
“Con la presencia de ustedes aquí es una muestra clara de que se puede transitar con toda tranquilidad, que no hay temor, que se disipe esa duda, que se disipe ese sentimiento; queremos que la gente vuelva a creer de que en realidad si se ha recuperado totalmente la ciudad”, expresó.
UN PUEBLO CON CORAZON
Peña González aseguró que otra de las cosas que permitió que el poblado pudiera regresar a la normalidad es el espíritu de sus pobladores, quienes han aprendido a salir adelante de todas las adversidades.
Un ejemplo son los colegas del alcalde: los maestros; en específico 30 de ellos, quienes se rehusaron a abandonar el poblado aún en los momentos más complicados.
Recordó que este grupo de profesores, la mayoría originarios de Ciudad Mier, no quisieron abandonar a los pocos alumnos que había en los salones de clases, quienes acudían a la escuela cada vez que las circunstancias lo permitían.
Para el presidente municipal estos mentores son ejemplo de la voluntad de los mierenses por salir adelante.
“Mier tiene corazón para vencer las adversidades y ha tenido muchas. Ha sido un pueblo muy golpeado a través de la historia y más sin embargo se levanta y vuelve otra vez a surgir y esta no es una excepción.
“Ahora que estamos festejando las fiestas de la Independencia vemos que también aquí en Mier existen Hidalgos y Josefas Ortiz de Domínguez, porque en realidad no han abandonado su pueblo, lo quieren mucho y lo están demostrando. Esto es una recuperación de la libertad que se refleja”, sentenció.
Para Peña González, el símbolo de la resurrección de Ciudad Mier se encuentra a unos pasos de donde diariamente despacha los asuntos de la ciudad, en el edificio donde anteriormente se encontraba la delegación de Policía.
Este edificio, que fue completamente destruido, guarda una historia impresionante que se descubrió cuando estaban reconstruyéndolo.
“Si hablamos de cómo es que estamos recuperando los espacios turísticos, culturales e históricos, podemos decir que tenemos, por ejemplo, una casa con una gran historia que recuperamos en la reconstrucción de las fachadas y que descubrimos que ese espacio era la casa en donde en 1790 existían los poderes municipales.
“Le pedimos al Instituto Nacional de Antropología e Historia que nos diera la autorización de conservar ese edificio con su infraestructura física original, y ahora ahí van a ser las oficinas del DIF. Entonces tenemos turismo, no a la escala que teníamos antes, lógico, pero estamos recuperando eso. Estamos reconstruyendo nuestro ‘Pueblo Mágico’”, apuntó.
Para el alcalde, las imágenes de este inmueble completamente quemado son el recuerdo de un pasado que ya nadie necesita recordar, pues han dado paso a un nuevo futuro mucho más brillante.
“Esa imagen ya no quiero que se publique porque eso ya quedó en el pasado, yo lo que quiero que se publique es lo que ahorita es. Esto fue algo que recorrió el mundo pero ahora da una clara idea de cómo es que estamos saliendo adelante”, apuntó.
Mientras recorre lo que serán las nuevas oficinas del DIF, el profesor se encuentra con unas viejas tablas de lotería, las mismas con las que los habitantes del poblado han jugado desde que tiene memoria.
Estas tablas, elaboradas a mano y con un enmarcado que fue hecho hace más de 60 años, no sólo contienen casillas como “el martillo” y “el aguador”, sino también representan la larga historia que tiene Ciudad Mier.
Por eso la noche del Grito de la Independencia, cuando la mayor parte del pueblo volvió a jugar lotería como lo han hecho desde hace décadas, el sentimiento de que todo va a estar bien ha regresado entre los pobladores, quienes esperan devolverle a su comunidad el brillo que hace cuatro años lo llevó a convertirse en un “Pueblo Mágico”.