
La Junta de Aguas y Drenaje, trabaja día y noche con el fin de desaguar la ciudad lo más pronto posible, por lo que en horas de la medianoche se instaló una bomba en la calle Primera y Morelos para que con apoyo de 120 metros de manguera cruzar el agua por encima del bordo de contención y vaciarla hacia el cauce del río Bravo.
Además, se reforzó el cárcamo de la avenida Tamaulipas e Ignacio Ramírez donde se encontraban funcionando cuatro bombas, instalándose otra bomba más pero está de mayor capacidad y sumergible, para desalojar el agua de la colonia Jardín y de la zona centro.
Jesús de la Garza Díaz del Guante, gerente general de la JAD, informó que en el resto de los puntos críticos se encuentran funcionando a toda su capacidad 36 bombas de diferentes tamaños.
“Reforzamos la zona centro y las colonias aledañas al río ya que el agua se encuentra estancada desde el domingo en la madrugada, debido a que no tiene salida, pues las compuertas del sistema del drenaje pluvial, las sellamos por la creciente”, dijo.
Jesús de la Garza, aseguró, “Ya habíamos avanzado con el desagüe hasta en un 80 por ciento en la ciudad y lo que habíamos sacado de la calle primera, se nos revirtió al caer dos pulgadas más de agua, ayer por la mañana”.
Y agregó, “El proceso es lento pero no hay otra manera de desalojar el agua, solo que baje el nivel del río Bravo, por ello ya se hablo con la Comisión Internacional de Limites de Agua (CILA) para que reduzcan los índices del desfogue y poder abrir nuestras compuertas del drenaje pluvial, donde los tubos miden hasta 1.80 metros de diámetro”, dijo el funcionario.
Aclaró que la bomba en la calle Primera y Morelos, sólo trabajará de las cero a las 6:00 horas para no interrumpir el tráfico en la importante avenida.
“Creemos que bajara un buen nivel pero de acuerdo al pronóstico meteorológico, se esperan más lluvias” finalizó el funcionario.
PIDEN DETENER DESCARGAS
Las autoridades estatales y municipales están solicitando a las autoridades de la Comisión Internacional de Limites de Agua (Cila) que detenga los trasvases de agua de las presas hacia el río Bravo, para lograr desaguar la ciudad en un lapso menor de tiempo.
Jesús de la Garza Díaz del Guante, gerente general de la Junta de Aguas y Drenaje (JAD) de Matamoros, dijo que el gobernador, Eugenio Hernández Flores, y el alcalde de Matamoros, Erick Silva Santos, son los que encabezan las negociaciones.
“Se está haciendo una negociación de parte del gobernador y del presidente municipal con las autoridades de la Cila para que ellos bajen el nivel del río Bravo, de tal manera que nos permita abrir las compuertas y poder desaguar más aprisa la ciudad”, dijo.
Resaltó la importancia de que la Cila suspenda los desfogues de las presas, ya que el nivel del río Bravo aumentado drásticamente. Dijo que en algunas zonas, como la colonia Jardín, la diferencia entre el nivel del río y de las calles es menor.
“El rio ha subido a un nivel tal, que la diferencia entre el volumen del rio y nuestras calles es mínima, de cinco centímetros”, dijo el funcionario.
Añadió que de cumplirse con la petición, permitirá a la paramunicipal eliminar las inundaciones en las zonas aledañas al río Bravo y evitar inundaciones originadas por la creciente del mismo.
Por otra parte, el gerente de la JAD y el director de la Comisión Estatal del Agua, Sabás Campos Almodóvar realizaron un recorrido por los drenes de la ciudad para revisar su funcionamiento.
El funcionario aseguró que fueron más de 100 colonias donde se presentaron anegaciones desde los 20 centímetros y hasta poco más del medio metro.
En cuanto a los drenes, los funcionarios aseguraron que éstos estaban fluyendo satisfactoriamente.
Inclusive personal de Parques y Jardines apoyan con sacar la basura de los drenes para facilitar el desagüe, finalizó Jesús de la Garza.