El gobernador, Eugenio Hernández Flores, en tono enérgico condenó los lamentables hechos violentos cometidos por grupos criminales en el municipio de San Fernando en el que perdieron la vida 72 migrantes en su mayoría centroamericanos, por lo que demandó al gobierno de la república mayor reforzamiento de elementos del Ejército, la Marina y Policía Federal en la entidad.
En ese contexto, destacó la importancia de implementar una política de estado, especial para la frontera norte, porque la realidad que viven los estados y municipios de esta región, es muy diferente a la del resto del país.
Ante la inédita circunstancia que involucra al fenómeno migratorio, reiteró su propuesta presentada en la mesa de trabajo “Diálogos por la Seguridad”, convocada por el presidente, Felipe Calderón Hinojosa, a principio de este mes de agosto, para fortalecer la capacidad de atención para impedir que la delincuencia organizada aproveche la situación de vulnerabilidad de los repatriados y migrantes para extorsionarlos o secuestrarlos.
Insistió el mandatario Tamaulipeco en que es necesario sellar la frontera al tráfico de armas, por lo que requirió que el Ejército y la Marina sustituyan las funciones de la Policía Fiscal en todas las aduanas del país.
Expresó que en Tamaulipas se ha encarado este problema, que se ha agudizado recientemente por la situación geográfica cercana a los Estados Unidos que acrecentan los fenómenos migratorio, de repatriación y tráfico de armas, mezcla de variables, dijo, que han hecho de la inseguridad un patrón de vida inaceptable para los tamaulipecos y los mexicanos.
Instruyó a la Procuraduría de Justicia del Estado a coadyuvar de manera permanente con la Procuraduría General de la República con apoyo forense como ha ocurrido desde el hallazgo de los 72 cuerpos.