Junto a los matamorenses, el gobernador, Eugenio Hernández Flores, encabezó desde la tarde del martes 22 los operativos que realizan en forma conjunta el gobierno estatal, el municipio, ejército, Marina y sociedad civil para enfrentar al huracán “Dolly”.
El mandatario ordenó un estado de alerta permanente en la zona afectada por el paso del meteoro, que arribó al filo del mediodía a esta localidad, donde el fenómeno podría provocar los mayores daños y en forma personal recorre los albergues habilitados para la población evacuada, así como el auxilio a los afectados en alimentación, atención médica, cobijas, agua y otros apoyos, además de visitar colonias con mayor riesgo de inundaciones.
Con la coordinación del Ejército Mexicano, la Armada de México y las diversas corporaciones policíacas, se empezó a aplicar el Plan DN-III para este tipo de emergencias, a fin de salvaguardar vidas y bienes de los residentes, que es el principal objetivo, resaltó el gobernador.
El mandatario, tras sostener a las 13:00 horas de este miércoles una nueva reunión “la tercera en apenas 16 horas” con el Consejo de Protección Civil en esta ciudad, señaló que permanecerá en esta localidad para atender en forma directa cualquier eventualidad, a fin de otorgar a la población las mayores garantías posibles para su integridad física y protección de su patrimonio
Informó que hasta el momento, se ha dado refugio a más de 13 mil personas en los diversos albergues habilitados para ese fin, con saldo blanco al no reportarse problemas mayores, pero la alerta continúa en su nivel máximo para responder de manera oportuna a cualquier circunstancia.
El huracán, de acuerdo al pronóstico del Servicio Meteorológico Nacional y de la Comisión Nacional del Agua, impactó con categoría dos a la costa tamaulipeca aproximadamente a las 12:30 horas de este miércoles 23, con vientos sostenidos de 110 kilómetros por hora y rachas de hasta 160 kilómetros por hora. Se calcula que las lluvias persistirían hasta la medianoche de este miércoles.
RECORRE AREAS AFECTADAS
Tras la primera evaluación de daños posterior al impacto del huracán “Dolly” en esta frontera, el gobernador, Eugenio Hernández Flores, dio a conocer que se mantiene el saldo blanco, recorrió nuevamente los refugios temporales y las colonias más afectadas por las lluvias e inició las gestiones para reponer de manera inmediata el servicio de energía eléctrica a cerca de 89 mil usuarios.
En la cuarta reunión del Consejo de Protección Civil municipal que encabeza el mandatario, señaló que la alerta máxima sigue vigente toda vez que el meteoro, a pesar de que se adentró en territorio texano y se espera que siga perdiendo fuerza, podría reingresar a suelo mexicano en las cercanías de Reynosa o Nuevo Laredo.
Para el restablecimiento de la energía eléctrica, cuya interrupción afectó a 67 colonias, el gobernador se comunicó directamente con el director de operación de la Comisión Federal de Electricidad, José Abel Valdez, obteniendo como respuesta la inmediata acción de más de mil trabajadores de la CFE en cuadrillas emergentes para volver a la normalidad el suministro del fluido.
Con esta medida, dijo el titular del Ejecutivo estatal, se podrá avanzar en el desagüe de diversas colonias, ya que el sistema de bombeo no operaba por la falta de energía.
En lo que se refiere a los refugios temporales, se habilitaron tres albergues más a fin de recibir a más residentes afectados que evacuaron sus viviendas en las últimas horas.
Hasta las 18:00 horas de este miércoles 23de julio, “Dolly” reducía la fuerza de sus vientos y se había degradado a tormenta tropical, con rachas máximas de 80 kilómetros por hora.
Por la tarde y noche de este miércoles, el gobernador, Eugenio Hernández Flores, llevaría a cabo un recorrido por diversas colonias con problemas de inundación y a las 21:00 horas encabezaría la que sería quinta reunión consecutiva del Consejo de Protección Civil de Matamoros, para rendir un reporte actualizado de los daños provocados por el fenómeno meteorológico y adoptar las medidas necesarias para auxiliar a la población y restablecer en lo posible la normalidad en la localidad.