
La alcaldesa Carmen Lilia Canturosas, entregó una planta tratadora Oradel, para sanear el agua contaminada y a su vez generar un impacto positivo ambiental y social.
Para que la ciudadanía ya no viva entre malos olores de aguas negras provocadas por el drenaje a cielo abierto, la presidenta municipal Carmen Lilia Canturosas Villarreal, entregó la obra de rehabilitación de la planta de tratamiento Oradel.
Dicha maquinaria procesadora representa una mejora ecológica al reducir la contaminación del agua que fluye al Arroyo El Coyote y al Laguito, en el municipio de Nuevo Laredo en el noreste de Tamaulipas.
La alcaldesa destacó que esta obra de infraestructura hidráulica es única en Tamaulipas, ya que el proceso químico con el que sanea el agua es utilizado en países como Estados Unidos, India, Arabia e Italia, así como en otras ciudades de México.
La obra fue ejecutada por el gobierno municipal a través de la Secretaría de Obras Públicas, por lo que ahí mismo se firmó el documento para otorgar la operación de esta planta a la Comisión Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (Comapa), para su operación.
“Esta es una obra que tiene un gran sentido social y con la que refrendamos nuestro compromiso con el medio ambiente y el bienestar de las familias, rescatamos una obra que estuvo abandonada e inservible por muchos años, para continuar con nuestra labor de sanear el agua que regresa al río Bravo, pero sobre todo, que los ciudadanos tengan una mejor calidad de vida con un sistema de drenaje digno”, afirmó la presidenta municipal mediante la gira de trabajo.
QUINCE AÑOS DESPUÉS NO
HABRÁ MÁS AGUAS NEGRAS
Esta planta se rehabilitó debido a que la tubería existente estaba completamente deteriorada y sin funcionamiento desde hace 15 años.
Como resultado, todas las aguas residuales de Oradel ahora son canalizadas hacia la planta de tratamiento, donde el agua será procesada antes de ser liberada al Arroyo El Coyote en condiciones limpias.
Antes de la rehabilitación de esta planta, las aguas residuales eran vertidas directamente en el arroyo y en el Laguito, lo que generaba un impacto ambiental negativo.
La obra tuvo una inversión de 44 millones 599 mil 650 pesos e incluye trazo y nivelación, suministro y colocación de material para terraplén, planta tratadora de aguas residuales, bodega, bombas, sistema de dosificación, sistema eléctrico, descarga de ríos, sistema de filtración, tuberías cédula 80, suministro e instalación de bombas, suministro y colocación de barandal y pasillo y tanque de acero inoxidable.