Empresa ligada a Jerónimo Gerard, (cuñado de Carlos Salinas) y al director de Pemex José Antonio González Anaya, ‘hallan’ un yacimiento petrolífero frente a las costas de Tabasco
CIUDAD DE MÉXICO
Cuando en 2014, gracias a la Reforma Energética se abrieron las puertas a inversionistas privados para explotar potenciales zonas petrolíferas en México, se fundó una compañía llamada Sierra Oil & Gas.
Esta empresa, junto con la estadounidense Talos Energy y la inglesa Premier Oil hallaron en el Golfo de México, frente a las costas de Tabasco, un importante yacimiento de petróleo que podría tener una producción de por lo menos 2 mil millones de barriles de crudo.
El quinto más grande del mundo en los últimos años.
Sierra Oil es propiedad de Jerónimo Gerard, cuñado de Carlos de Salinas de Gortari y de José Antonio González Anaya, el actual director de Pemex…
Este pozo se encuentra en aguas poco profundas, lo cual quiere decir que es un pozo que pudo haber sido explotado fácilmente por Pemex y su tecnología actual.
Este es un caso similar al de una compañía italiana que también encontró un yacimiento de petróleo en aguas poco profundas del Golfo de México, un pozo que tiene reservas envidiables a nivel mundial y que son comparables a las del casi extinto Cantarell.
El pozo Zama-1, perforado a 60 kilómetros de la costa de Dos Bocas, Tabasco, cuyos recursos iniciales fueron estimados por Talos en un rango de entre mil 400 y dos mil millones de barriles de crudo equivalente.
La compañía mexicana Sierra Oil and Gas ha sido una de las más favorecidas por las diferentes rondas y contratos de la Reforma Energética.
El hallazgo es uno de los primeros descubrimientos privados de petróleo anunciados en México y es el mayor descubrimiento en aguas del Golfo de México desde el año 2000.
Cantarell fue descubierto por accidente en 1971 frente a la costa de Campeche por un pescador y comenzó su producción ocho años después, llegando a producir hasta 2.2 millones de barriles al año, ahora solo son 200 mil barriles anualmente.
Alrededor de 50 millones de dólares se han invertido en el proyecto desde que Talos Energy, Sierra Oil and Gas y Premier Oil, ganaron el bloque.
La empresa Talos Energy LLC, ha sido vigilada en Estados Unidos por el Buró de Seguridad y Cumplimiento Ambiental (BSEE) luego de un derrame que ocurrió en aguas poco profundas de Louisiana en 2013.
El accidente ocurrió en julio de 2013 cuando 252 galones de una forma líquida de gas natural en bruto fueron derramados en el Golfo de México. La guardia costera de EU señaló que el vertido se dio en una propiedad de la empresa Recursos de Tecnología Energética, que Talos compró un año antes.
Para ganar, el consorcio formado por Talos, Sierra y Premier, ofreció al gobierno mexicano un 69 por ciento de la utilidad operativa de cada barril producido, por lo que el consorcio conservará el 31 por ciento restante de la misma, ya descontados los costos.
Con información de: Forbes, Sin embargo, agencias.