
La Comisión de Orden del Consejo Estatal del Partido Acción Nacional (PAN) en Sonora determinó, por decisión mayoritaria, la expulsión del partido del ex dirigente panista Manuel Espino Barrientos.
El presidente de la comisión, Francisco Bueno Ayup, indicó que tras el análisis del expediente de Espino y los argumentos que presentó en su defensa, se decidió su expulsión por considerar que violó los estatutos del PAN.
El Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PAN, recordó, inició el proceso y turnó el expediente a la Comisión de Orden de Sonora porque así lo marcan los estatutos, y una vez que concluyó el análisis, se estableció que el acusado violó las normas.
Espino tiene la opción de presentar un recurso de reclamación para impugnar la sanción impuesta, el cual deberá interponer ante la Comisión de Orden del Consejo Nacional.
Ese recurso podrá promoverse dentro de un término de cinco días hábiles contados a partir del día siguiente a la notificación de la resolución, y se resolverá en un plazo no mayor a 40 días hábiles.
Al hablar sobre el tema, el presidente nacional del PAN, César Nava Vázquez, defendió la expulsión de Manuel Espino de las filas del partido.
Aseguró que la expulsión del ex dirigente nacional panista fue una decisión “autónoma” de la Comisión de Orden del estado de Sonora.
Comentó que Espino Barrientos está en todo su derecho de reclamar su salida ante la Comisión de Orden del Consejo Nacional.
En tanto, el consejero nacional del PAN y aspirante presidencial para el 2012, Santiago Creel, dijo que no está de acuerdo en esta decisión, porque es momento de que los panistas estén unidos, pero comentó que ya decidirán las autoridades, en todo caso los tribunales, sobre la determinación.
Por su parte el ex presidente del PAN advirtió que México se encuentra en una encrucijada histórica, por el riesgo de volver a prácticas autoritarias como la existencia de un partido oficial, subordinado al Poder Ejecutivo, que se asume como secretaría electoral.
En su página de Twitter, el ex dirigente nacional subrayó que hay prácticas autoritarias relacionadas con decisiones unipersonales con criterios políticos, como sucedió, según Espino, con la guerra contra el crimen organizado, que jamás fue acordada con los poderes de la Unión, los gobernadores o alcaldes y menos con la sociedad.
Precisó que por regresión autoritaria no entiende la vuelta del Partido Revolucionario Institucional (PRI) a Los Pinos, pero reconoció que a pesar de que aún no se ha concretado dicho escenario en 10 años de gobiernos panistas, “con sumo pesar debo reconocer que mi partido avanza en ruta de colisión contra su propia genética democrática”.
“Si los panistas no somos capaces de corregir el rumbo, de volver a empezar, haremos realidad aquella advertencia del presidente Calderón de ganar el gobierno y perder el partido”.
“Nuestra cultura cívica se encuentra en riesgo; para el PAN es indispensable reflexionar sobre esta década, reconocer los errores y corregir lo que haya que corregir, para recuperar el comportamiento político que lo llevó al poder y avanzar hacia un futuro democrático”, añadió en el texto Diez Años por México.
Aseveró que “quiere volver a tomar carta de naturalización el acallar voces y comprar conciencias, tanto de periodistas como de políticos al más puro estilo totalitario, similar a la desalmada táctica del narco, que ofrece plata o plomo”.
“Hay quienes desde el poder ofrecen miel o hiel; la miel consiste en una tajada del presupuesto, la hiel en la persecución, la cacería de brujas y la imposición del silencio”, destacó.
Espino mencionó que México se encuentra en una encrucijada, donde se puede ver que la democracia ha traído avances insuficientes, pero no por ello, menos significativos, en pobreza, salud, educación y economía.
“Podemos perder todo lo ganado no sólo en 10 años, sino en esas décadas durante las cuales trabajamos por alcanzar la alternancia, no como una meta, sino como un punto de partida”.