Asesinan a dos personas en hechos distintos en esta ciudad.
En el primero de los homicidios de acuerdo a la Procuraduría de Justicia, Julio Villarreal Dávila de entre 28 y 30 años fue encontrado muerto a golpes y amarrado con mecates y un cinto en el interior de un rancho en el municipio metropolitano de Apodaca, durante la madrugada de este lunes.
Los hechos ocurrieron en el interior de un lugar conocido como Rancho el Papalote, ubicado en la brecha al autódromo, para llegar al lugar, los agentes tuvieron que recorrer siete kilómetros de terracería y debido a lo inhóspito del sector se cree que no hubo testigos.
El ahora occiso era originario de El Carmen Nuevo León y quien aparentemente se encontraba con su presunto homicida ingiriendo bebidas alcohólicas desde el pasado Sábado por la noche.
La Agencia Estatal, investiga a un hombre de nombre Mario, quien sería una pieza clave ya que las pesquisas apuntan hacia él como la última persona como que lo vio con vida.
El cuerpo fue encontrado colgado de un árbol en un surco que se utiliza para la siembra, no tenía huellas de tortura y se descartó que tuviera relación con algún hecho de la delincuencia organizada.
En el segundo caso, horas antes del anterior incidente, un hombre mato de un balazo en la cabeza a su suegra e hirió a su hijastro de 12 años.
De acuerdo al grupo de homicidios del Ministerio Publico los hechos se dieron en la Colonia Tierra y Libertad, al norte de Monterrey, cuando Ramiro Verulo llegó y asesino a Agustina Cervantes Sánchez, de 60 años.
En su huida también le disparo a su hijastro Giovani Elroy de 12 años, quien de acuerdo al dictamen médico, recibió un impacto de bala en el hombro izquierdo y otro más en el cuello, por lo que se encuentra internado en el Hospital Universitario, donde su estado de salud es reportado como grave.
El presunto homicida aún se encuentra prófugo de la justicia.