
Aunque existe la creencia de que el alto consumo de carne roja origina enfermedades como el cáncer, Alzheimer, úlceras y patologías cardiacas, es una realidad que entre la mayoría de la población este producto se ha vuelto casi indispensable.
Tan sólo en Reynosa se venden casi 80 toneladas de carne y 100 toneladas de pollo al día, cifras que no contemplan lo que se comercializa gracias a la operación de mataderos clandestinos que aprovechan que en la ciudad no está operando el rastro de primer nivel que existe.
Hace años ganaderos, industriales de productos cárnicos y la Asociación Ganadera Local se unieron para construir un rastro Tipo Inspección Federal (TIF), que hasta la fecha no se ha puesto en marcha debido a lo costoso que representa su funcionamiento.
Este lugar, que se encargaría de matar ganado bovino, porcino y caprino, sigue esperando que a alguien le interese obtener la concesión que le permita abrir sus puertas y ofertar a la población un producto trabajado bajo las normas de sanidad establecidas por el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica).
ES INCOSTEABLE
El presidente de la Asociación Ganadera Local, Gildardo López Hinojosa, aseguró que el rastro TIF es un proyecto ambicioso pero caro en su operatividad, debido a la invasión de tiendas de autoservicio que ofrecen a los consumidores carne y el pollo que no fue procesada en esta ciudad.
“El rastro no está funcionando en este momento por incosteable, es bien sabido que en Reynosa nos invadieron las tiendas de autoservicio y ellos no sacrifican el ganado en esta ciudad, sino en Torreón, Monterrey y se traen la carne en cortes y en cajas”, dijo.
Aunque el funcionamiento del rastro fue anunciado en diversas ocasiones, al no haber personas interesadas en sacrificar sus animales en sus instalaciones ha impedido que el lugar pueda comenzar a operar, lo que genera pérdidas económicas.
“Toda la carne que se consume en Reynosa no se sacrifica aquí, este rastro no ha operado por la falta de matanza de ganado”, aseguró López Hinojosa.
Para que este inmueble sea costeable, se requiere matar 200 cabezas de ganado al día.
“No lo podemos operar porque se sacrifican de 20 o 25 animales al día y este rastro necesita matar de 160 a 200 animales diario, llámese puerco, reses o cabritos, la operatividad de la gente de prender los compresores, las carruchas, las sierras, la refrigeración del inmueble es muy costoso, si no sacrificamos la cantidad que se necesita, el rastro no es operable”, advirtió.
BUSCAN CONCESIONARLO AL MUNICIPIO
López Hinojosa aseguró que al ser manejado por el Ayuntamiento, este inmueble representaría una derrama económica considerable, por ello ya se han sostenido platicas con el alcalde, Everardo Villarreal Salinas, a quien se le han expuesto las ventajas que se tendrían si Reynosa cuenta con lugar de este tipo.
“Estamos en pláticas, queremos llegar a una buena negociación para que este sea un negocio para el municipio y para nosotros los empresarios”, dijo el dirigente ganadero.
Y agregó: “Nosotros se lo queremos concesionar al municipio para que ellos tengan la autoridad y la fuerza de poder cobrar el resello de la entrada de carne a la ciudad de Reynosa, si ellos no tienen un rastro TIF, no lo pueden hacer como municipio”, subrayó.
Aparte de las ganancias económicas que se obtendrían, también se ofertarían fuentes de empleo para la gente de Reynosa.
“Este rastro genera de 40 a 50 empleos directos, 200 indirectos, habría gente engordando ganado en Reynosa, fabricando pastura, comerciantes de alimentos, personas transportando el ganado y otras más empacando la carne”, sentenció.
TODOS PODRAN SACRIFICAR EN EL RASTRO
López Hinojosa indicó que en caso de que sea operado por el Ayuntamiento, todos los productores de la región podrán utilizar este rastro Tipo Inspección Federal y comercializar su producto en otras ciudades, ya que el empacado y el proceso de la carne es de primera calidad y con un estatus sanitario de primer nivel.
“La invitación es que los municipios de Río Bravo, Valle Hermoso, Camargo, Díaz Ordaz que no tienen un rastro de esta calidad, sacrifiquen en este lugar y vendan su producto a los clientes que ellos quieran”, finalizó.
MUNICIPIO INTERESADO
Por su parte, el presidente municipal de Reynosa, Everardo Villarreal Salinas, dijo estar interesado en apoyar un rastro de este tipo, sin embargo, está analizando cual es la mejor opción para esta ciudad fronteriza.
“Creo que estamos obligados a prestar este servicio, la Asociación Ganadera se ha acercado con nosotros para hacer un convenio de colaboración, pero también hay otro rastro de empresarios locales que nos ha invitado a participar, por eso estamos viendo que es lo que más conviene en este momento”, asevero el edil.
Asimismo, dijo estar convencido que ante el crecimiento que ha tenido la ciudad en los últimos años se requiere de una infraestructura de primer nivel.
“Queremos una ciudad organizada, que vaya progresando, que siga siendo mejor y una opción es tener un rastro con todas las normas de sanidad que se requiere para acabar con la matanza clandestina que sabemos se sigue presentando en la ciudad”.
Villarreal Salinas refirió que está interesado en apoyar el arranque del rastro TIF, toda vez que cumpla con los requerimientos establecido por las autoridades de sanidad.
“Yo creo que como municipio es un servicio que tenemos que dar; entonces los dueños o los propietarios de estos rastros también les interesaría mucho estar trabajando en colaboración con nosotros como me lo han expresado”, concluyó.