
Así es como comienza el día de clases en la escuela de nueva creación del fraccionamiento Caracoles de Reynosa.
A pesar de las condiciones en que se encuentra, con aulas sin ventanas, sin electricidad, un patio de tierra y baños sin agua, los tres maestros de esta pequeña escuela que atienden a 250 alumnos, toman la decisión de dar clases en salones de apenas tres por cinco metros.
Aquí todo falta, hasta mentores, pues cada profesor tiene que atender a dos grupos al mismo tiempo.
La situación de esta escuela que se encuentra en a las afueras de Reynosa es alarmante.
Los maestros comentan que es antipedagógico dar clases de esta manera, con una evidente falta de espacio en las aulas, que carecen de ventilación en donde la temperatura puede ascender a los 36 grados centígrados.
Hace poco menos de un año el Gobierno del Estado ha mandado construir tres aulas de concreto que en la actualidad se encuentran en obra negra.
Este es el único apoyo que les ha llegado. Por ello, los alumnos de la institución siguen esperando un lugar digno en dónde estudiar.