
Mayte Pineda tiene 52 años y es originaria de Tampico, pero residente en Reynosa desde hace cuatro décadas. Ella ha convertido como en “un ángel”, una esperanza para los animales callejeros que, en la mayoría de los casos, fueron abandonados por sus amos.
Es química farmacéutica bióloga. Tiene además una maestría en farmacología química y un doctorado en ciencias; también es contador público auditor con una maestría en el Tecnológico de Monterrey en administración general, pero debido a su amor por estos seres es que dedica gran parte de su tiempo a salvarlos.
La defensora animal es presidenta y fundadora de la Fundación de Rescate y Adopción de Mascotas (Fryam), la cual está constituida de manera oficial desde hace seis años.
“Comencé a rescatar perros y gatos hace muchos años de manera informal; llegaban perritos a mi casa y hubo una época en la que tuve 20 mascotas, sin importar de qué raza eran y posteriormente les buscaba un hogar con mis amistades. Desde muy pequeña mis padres me inculcaron el amor y el respeto por los animales, y en mi casa siempre tuvimos perros, gatos, tortugas, ratones y hasta arañas”, dijo.
Mencionó que al principio asistía al centro antirrábico de la ciudad tres veces a la semana, junto a un par de personas, para ayudar con la limpieza de las celdas y buscar un hogar a los cachorros que tenían, pero conforme pasó el tiempo no toleró la manera tan cruel como los sacrificaban.
“Era muy frustrante no poder rescatar a todos, y lo peor es que no les dan las atenciones necesarias: ni los bañan, vacunan, desparasitan o esterilizan. Y como no le dan promoción a la adopción terminan sacrificándolos de forma despiadada, pues no los duermen, los hacen sufrir electrocutándolos”, comentó.
Después de esa experiencia Pineda decidió iniciar con esta obra, pero por su cuenta, y de tener en un principio 15 canes, actualmente tiene 285 y 25 gatos.
“Me identifico mucho con los perros, ellos son leales y también son agradecidos, cosa que no hace el humano. En mi vida pasada trabajé en Pemex y tenía muchas “amistades”, pero cuando dejé de trabajar desaparecieron, en cambio el perro es el único que te recibe cuando llegas a la casa emocionado moviendo la cola; a él no le importa nada material, nos quieren por encima de todo.
“Ahora atravieso por una etapa donde las cosas materiales pasan a último grado, porque tuve pérdidas importantes en mi vida: mi madre, mi esposo y mi hijo, quienes con todo lo que yo pueda tener, no logró regresarlos. No podemos comprar la salud o la vida de un hijo”, expresó.
Un esfuerzo constante
“Trabajamos desde las diez de la mañana y hasta las cuatro de la madrugada. Durante el día atendemos a los perritos que vienen a consulta y los que tenemos aquí; ya por la noche creamos tratamientos, curaciones y administramos los medicamentos, porque rescatamos en su mayoría perros enfermos. Las puertas a la gente están abiertas a partir de las doce mediodía”, señaló.
Para que Fryam entregue en adopción un perro o un gato se deben de cumplir algunos requisitos: copia de credencial de votar, para saber cuál será la dirección de la mascota; fotos de cómo es tu casa por fuera, porque se debe de contar con reja, barda y techo, ya que no se permite que los tengan expuestos a la intemperie, y una donación de comida para la asociación.
“No me gusta que los perros estén amarrados, pues antes de ser perros son seres vivos que se enferman, que sufren como nosotros y saben querer como nosotros y más que uno mismo. Así le demos la comida más corriente se conforma con tan poquito.
“Veo tanta necesidad en ellos porque tienen sarna, están desnutridos, con hambre, con sed y maltratados. No tienen seguro popular, no tienen Cruz Roja cuando los atropellan, no tienen Fovissste; no tienen nada, sólo nos tienen a los seres humanos y somos tan crueles; tampoco les brindamos lo que merecen que son cuidados, porque al tener una mascota estoy adquiriendo una obligación como tener un hijo. Las mascotas son un integrante más de la familia”, expresó.
Pineda dijo que en Reynosa hace falta cultura para respetar y amar a las mascotas, por eso ella, la agrupación y sus colaboradores realizan actividades con el fin de promover la adopción y sensibilizar a la ciudadanía, con acciones como campañas y conferencias donde dan información de atenciones especiales para los animales.
“Por las mascotas” es un evento que se realiza anualmente en el Auditorio Municipal, en donde la gente lleva canes y felinos para ser adoptados y reciben a otras mascotas para ser vacunadas gratuitamente; también dan conferencias y cursos dinámicos de cómo darles primeros auxilios en caso de una emergencia.
Desde hace años ella busca que se implemente el uso del reglamento de Protección Animal en Reynosa que está vigente en el Estado pero sin aplicación a nivel local.
“Queremos que se haga válido y se multe a aquella persona que tenga un perro en la intemperie. Maltrato es todo lo que perjudica el bienestar de una mascota: no darle agua, estar en el sol o lluvia, tener garrapatas, estar enfermo y no atenderlo.
“Propusimos que las multas pasen a municipio y así generar un ingreso para ellos, y para nosotros el beneficio es un perrito menos maltratado; deseamos quien trate mal una mascota, se la deben de quitar, pero que no lo lleven al antirrábico porque allí lo sacrifican. Mejor que lo traigan aquí o a cualquier fundación”, afirmó.
Fryam es la primer fundación que no cobra por hacer su trabajo, ni siquiera una cuota de recuperación. Sólo piden alimento, pues al no tener el apoyo del gobierno municipal o estatal, subsisten con recursos personales.
“Sobrevivimos con mis ingresos y de las ventas como shampoo, cremas para la sarna y ropa para mascotas. No vivo de los perros, voy en contra de la comercialización; amo a los animales más que a los humanos porque ellos sí son agradecidos y leales. La sobrepoblación de perros en la ciudad nos afecta a todos, por ello los invito a que apoyen esta noble causa y adopten”, indicó Pineda.