Cada 30 de agosto se conmemora el Día Internacional de las Víctimas de Desapariciones Forzadas, y es una oportunidad para que aquellas familias víctimas indirectas recuerden a sus familiares, mientras que en ocasiones el hallazgo de osamenta humana, una extremidad o un diente alienta a seguir con la búsqueda de esa persona.
El hallazgo de una osamenta humana después de varios minutos de rastreo en una zona árida de Reynosa, provocó que integrantes del colectivo Amor por los Desaparecidos de Tamaulipas continuaran con la búsqueda de más restos óseos en el área.
Debido a diversos hallazgos, los integrantes del grupo social, autoridades estatales y federales reanudaron las diligencias de rastreo de restos de personas no localizadas en la ciudad de Reynosa.
Bajo una temperatura de 36 grados centígrados se realizaron los trabajos recientes en un sitio considerado de exterminio, que de acuerdo con los activistas, sería el tercero en Tamaulipas. Está ubicado cerca de la carretera a Nuevo Laredo, a un costado de la carretera Ribereña.
En el trabajo de investigación se coordinaron personal de la Fiscalía Especializada, Ministerio Público (MP) y Derechos Humanos, bajo el resguardo de efectivos de la Policía Estatal y Guardia Nacional.
“Tener un familiar desaparecido es tener un familiar que muere todos los días, desde que te levantas. Es un sufrimiento que realmente nunca termina hasta que tu familiar aparezca vivo o muerto; el sufrimiento nunca va a acabar porque es peor para una madre, hermana, una hija; es peor porque no sabes qué pasa con tu familiar, si vive o si ya murió”, expresó Edith González, representante de Amor por los Desaparecidos de Tamaulipas.
La tragedia carcome a los familiares de desaparecidos día a día por estar pensando dónde están sus seres queridos, y en muchos casos, al paso de los años, estás personas llegan incluso a morir sin saber del paradero de sus parientes.
“El hecho que hagamos esas búsquedas y encontremos esas osamentas calcinadas, para nosotros es algo que nos da una sensación gratificante porque esos huesitos van a ser procesados para determinar su ADN, entonces llamarán a la familia para que tenga la certeza de que su pariente ya no vive; dónde lo encontraron”, explicó.
ENCONTRARLOS, LA ESPERANZA
Karla Quintana Osuna, comisionada nacional de búsqueda, destacó que oficialmente se han reportado 104 mil personas desaparecidas en México, y Tamaulipas es de los primeros cinco estados con mayor índice de desaparecidos.
La comisionada menciona que lo más importante es encontrar a la persona todavcon vida.
Mientras que la activista de esta frontera manifestó que todos los restos humanos que están localizando son llevados a un laboratorio especial para analizar su ADN, “quieras o no, calmas un poco tu dolor, esa angustia, porque te llevas los huesitos a tu casa y tienes donde llorarle, yo no me quisiera ir de este mundo sin encontrar a mi hermano, como Dios me lo quiera mandar y si regresa, será una bendición bien grande”, comentó Edith representante del colectivo.
Los buscadores manifestaron lo triste que es darse cuenta que Reynosa está con muchas fosas clandestinas, personas tiradas en las brechas, calcinados, torturados que ahí están, donde los recuperan con la intención de dar una parte a los familiares.
“Para nosotros esos huesitos son bien valiosos e importantes, porque cada resto que se
levanta, es un familiar que le está llorando
a alguien. Con esto, los restos regresan a casa, no en las circunstancias que uno quiere, pero por lo menos sabrá qué pasó con él”, comenta la activista que busca incansablemente a su hermano desaparecido en esta frontera.
CON LA ESPERANZA A CUESTAS
La Red de Desaparecidos en Tamaulipas (Redetam) tiene un registro de 12 mil personas no localizadas en la entidad, de las que el 80% son hombres, y de estos, el 75% de los casos corresponde a padres de familia.
Sin embargo, también se ven involucrados los jóvenes, como el caso de la señora Yéssica López, quien ha vivido un calvario por la desaparición de su hijo Juan René Salinas López.
Juan René desapareció en el verano de 2019. El reloj marcaba las 7:30 horas del 19 de junio de aquel año, comenzaba un día común, y el joven entonces de 18 años se apresuraba para irse al trabajo como a diario lo hacía.
Esa mañana dirigió el último “te quiero” acompañado de un beso hacia su madre, montó la motocicleta y aceleró tomando carretera rumbo a la colonia Balcones de Alcalá, ahí pasaría por un compañeros de trabajo.
“Él acababa de cumplir 18 años y ya tiene 21 ahorita. Su sueño era terminar la prepa y seguir estudiando para ser un buen tornero, porque él trabajaba en un taller de tornos con su tío”, platica Yéssica, madre de Juan.
Como a muchos chicos de esa edad, a René Salinas le gustaba ejercitarse en el gimnasio que frecuentaba casi a diario o cuando tenía un tiempo libre, además jugaba futbol con sus amigos y tenía un gusto por las motocicletas.
Ese fue el día que vieron por última vez a Juan René, sin embargo, la denuncia por desaparición fue puesta el día 22 de junio de ese mismo año.
La Fiscalía correspondiente abrió la carpeta de investigación 202/2019 y hasta la fecha las autoridades no han dado una respuesta positiva en las averiguaciones acerca del paradero del joven reynosense.
De acuerdo con la declaración ministerial, el muchacho vestía una camisa color gris con logotipo de su trabajo, pantalón de mezclilla; portaba una mochila en la espalda y calzaba tenis negros.
Sus señas particulares son: tez blanca, ojos cafés claros, complexión delgada, cejas pobladas y de aproximadamente 1.72 de estatura; tiene un bate de beisbol tatuado en la muñeca derecha y en el dorso derecho unas alas de ángel.
URGE REFORZAR MEDIDAS
Los activistas que en días pasados reanudaron las cribas en los campos desérticos de Reynosa hacia el municipio de Miguel Alemán, argumentan que personal de la Comisión Estatal de Atención a Víctimas no les está brindando ningún tipo de apoyo.
Un integrante del colectivo ya mencionado dirigió un mensaje a ciudadanos en general, autoridades de los tres órdenes de gobierno a iniciativa privada para que los apoyen con donaciones de carpas, toldos y agua embotellada.
Aseguraron que los operativos de búsqueda se realizan con recursos de las víctimas indirectas al reunirse en esta localidad donde actualmente hacen una diligencia.
“Hola buenos días todos y mis amigos, conocidos y familiares de Reynosa, Tamaulipas, ocupo dos toldos, carpas y aguas. Es para una búsqueda y es para cuidarse de los rayos del sol, para el Colectivo Amor por los Desaparecidos en Tamaulipas, nos urge, por favor quien nos pueda ayudar con esto por favor. Quién dijo yo”, escribió Gustavo Azuara Díaz, en sus redes sociales.
Debido al intenso calor de los últimos días, los buscadores solicitan el apoyo de la población y las autoridades para poder comprar las carpas o toldos y protegerse del sol.
FALTA EFICACIA
Por otra parte Edith González, manifestó que hace falta mayor seguridad para poder hacer las diligencias de búsqueda , ya que esta semana solamente cuentan con una patrulla de la Policía Estatal y una de la Guardia Nacional que los resguardan durante el operativo.
Asimismo exigen a las autoridades más personal capacitado para que agilicen el análisis de los restos que han encontrado desde el mes de mayo, para que se pueda tener un resultado eficaz, y con rapidez un cotejo con la base de datos de manera oportuna.
“Necesitamos que aquí en Reynosa se haga una oficina auxiliar de búsqueda para solicitar hacer recorridos constantes en brechas, porque bajaría el índice de personas secuestradas y fallecidos no identificados”.
BÚSQUEDAS INTERMINABLES
Es en la ciudad de Reynosa donde a principios del mes de mayo comenzaron las diligencias de búsqueda logrando localizar un campo de exterminio donde aniquilaron a las víctimas, considerado como el tercer campo de tortura más grande en Tamaulipas, seguido por la Bartolina en Matamoros y la Carretera de la Muerte en Nuevo Laredo.
“Es un campo de exterminio, es un área hay muchísimo todavía que encontrar, hay demasiado y se tiene que regresar porque es un campo grande tipo La Bartolina.
“La esperanza de nosotros es encontrarlos a todos donde quiera que hayan aquedado sus restos, porque podrían ser uno de los nuestros y se siente bonito encontrarlos, porque se los va a comer la tierra, no van a estar perdidos y se hace una digna sepultura”.
Dos víctimas de La Bartolina eran migrantes mexicanos
De 225 restos positivos que fueron localizados en el predio de La Bartolina en ciudad Matamoros, se estableció que dos pertenecen a dos migrantes mexicanos que ya fueron identificados y entregados a sus respectivos familiares.
A los connacionales les arrebataron la vida en la ciudad de Matamoros después que fueron deportados de los Estados Unidos; sus restos quedaron al descubierto mediante las diligencias de búsqueda en La Bartolina, un campo de exterminio cerca de Texas.
La activista Delia Quiroga Flores, representante del Colectivo Nacional de Víctimas Diez de Marzo, confirmó que estas osamentas fueron entregadas a sus familiares después de una serie de estudios forenses. El primero fue entregado a principios de este año 2022 y el segundo el mes pasado.
Estos restos humanos fueron localizados en los operativos de búsqueda que realizaron autoridades federales en coordinación con el personal del Colectivo Nacional de Víctimas Diez de Marzo, el año pasado.
En el campo de La Bartolina pudieron haber muerto más de 2 mil personas, y en su mayoría habrían sido migrantes que venían del sur del continente o bien de los estados mexicanos con mayor índice de violencia.
Actualmente el colectivo no cuenta con una base de datos de inmigrantes desaparecidos; mientras tanto ocho de cada diez familias que tienen un pariente desaparecido no han denunciado por temor a represalias.
“Si bien es cierto han sido 225 víctimas confirmadas, 223 no han sido identificadas porque no hay un perfil genético para comparar, ya ahí estaban los cuerpos reducidos a nada, imagínese cuántas víctimas reales hay”, expreso Delia Quiroga Flores, representante del Colectivo Nacional de Víctimas Diez de Marzo.
PREPARAN COLECTA DE ADN
Aunque no se ha dado a conocer la fecha exacta, se estima que en el mes de septiembre haya una colecta de ADN en la ciudad de Matamoros, con la finalidad de identificar a los 223 perfiles desconocidos.
Estás muestras se estarán tomando sin denuncia, para poder identificar a las personas que se encuentran en calidad de desconocidos.
Martha Lidia Pérez Gumersindo, Titular de la Fiscalía Especializada en Desaparición Forzada, adscrito a la Fiscalía General de la República (FGR), será la encargada del proyecto para la campaña de colecta de ADN para poder identificar a 223 víctimas de La Bartolina, hasta el momento solamente dos han sido identificados y entregados a sus familiares.
Asimismo invitan a familias de centroamericanos desaparecidos para que se sumen a esta campaña. Para más información pueden consultar con el personal del consulado de cada país en México, en la oficina de Derechos Humanos.