
Raúl García Vivián intenta frenar la especulación: “El distanciamiento (con Francisco García Cabeza de Vaca) es real; no se trata de una estrategia partidista. Yo no voy a fingir en un tema como éste…”.
Y agrega contundente:
“No me siento en deuda con él… ni le tengo miedo; no tengo por qué. Fui colaborador de su proyecto municipal, cumplí, y para mí es sólo un militante más… sólo un compañero de partido. En el PAN yo no soy emisario de Francisco…”
Tras varios meses de silencio, el ex dirigente municipal del Partido Acción Nacional –y uno de los hombres más identificados con el trienio ‘cabecista’– habla con amplitud con Hora Cero sobre su relación personal con el ex presidente municipal y actual diputado local, sobre los resultados de noviembre anterior y sobre el futuro político de ambos:
“Definitivo; ¡quiero ser presidente municipal!”.
“Creo que si hago un buen papel en la dirigencia del partido será más sencillo obtener la candidatura, sin embargo… eso no me quita el sueño”.
Y añade:
“Por lo que se refiere a Francisco creo que su proyecto (para la gubernatura) está averiado; la verdad creo que sería una hazaña para él conseguirlo porque se requiere de un gran trabajo de unidad.. pero a nadie se le debe declarar muerto antes de tiempo”.
Durante la conversación, García Vivián admite que la falta de experiencia pudo ser uno de los factores que llevó a Gerardo Peña a la derrota el 11 de noviembre del año pasado pues muchas personas no lo percibían como candidato a la alcaldía.
Rechaza haber inducido los resultados de la convención municipal donde se ungió a Gerardo Peña como candidato y admite que la renuncia de Alfonso De León causó estragos dentro de su partido, y fue uno de los varios factores que derivaron en la derrota.
Desconoce si alguna vez Cabeza de Vaca ofreció la candidatura a Alfonso De León.
Es Raúl García Vivián, uno de los hombres que vivieron más de cerca el desarrollo del gobierno panista entre 2005-2007.
“Francisco no
escucha opiniones”
> ¿Es amigo de Cabeza de Vaca?
Somos compañeros de Partido; trabajamos juntos en un proyecto y, hasta el momento, mantenemos una relación de respeto.
> ¿La relación es institucional, de respeto o de afecto?
Institucional… siempre ha sido así desde que trabajé con él; desde los tiempos en que fue diputado y también cuando fue alcalde.
Siempre tuve claro que mis amigos eran con los que convivía más en lo familiar… en una carne asada, en la cacería o ese tipo de cosas; esto alguna vez se lo comenté a él mismo.
> ¿Es verdad que –durante el trienio– tuvo varios desencuentros con Cabeza de Vaca?
Fueron varios; aunque también hubo acuerdos. En nuestra relación se tenía que dar así.
Nunca fui de los que, por quedar bien con el presidente, estuviera de acuerdo en todo.
> ¿Hubo algo en particular que no le agradó?
Francisco hizo una buena labor como alcalde, pero a mí, en lo personal, no me agradaba mucho su personalidad; en muchas ocasiones se le dificulta escuchar opiniones cuando son diferentes a las de él.
> ¿Fue decisión –personal– de Cabeza de Vaca que usted fuera candidato a la diputación federal?
No; todos saben que se produjo una competencia interna con Javier Garza de Coss y Rodolfo Santos Dávila. Ambos decidieron declinar, pero hasta el último día estuvimos en la competencia.
> ¿Hubiera sido (usted) candidato aún sin Cabeza de Vaca?
Yo creo que sí; mucho antes de mi candidatura he venido haciendo un trabajo profundo con mis compañeros, con toda la militancia y creo que, en algún momento, me habrían dado la oportunidad.
> ¿Fue, el dinero del municipio factor para su campaña y su triunfo constitucional?
No… no… siempre fuimos muy respetuosos del trabajo que tiene que desarrollar la presidencia municipal y de los recursos públicos.
> Prevalece la percepción de que, una vez investido como diputado, usted se dedicó a servir de manera específica a los intereses de Cabeza de Vaca…
De ninguna manera, simplemente fuimos coincidentes en varios temas porque somos compañeros de partido.
> Las cartas firmadas y los ‘spots’ en contra del gobernador Eugenio HernándezFlores ¿fueron realizados por iniciativa propia?
Sí; creo que la autonomía municipal debe ser reconocida y respetada porque así lo consigna la Constitución y ese era el espíritu de esas acciones.
> ¿Mantiene su actitud hostil con respeto al gobernador Hernández Flores?
Los tiempos y las circunstancias cambian y se adecuan. Yo no entiendo por qué hace un tiempo el gobernador no podía colaborar con el municipio, por ser de otro partido.
Ahora sí lo puede hacer; ésas son actitudes que yo, en verdad, no entiendo.
> ¿Cree usted que toda la responsabilidad, el trienio anterior, fue del gobernador?
No, definitivamente, no. Siempre es responsabilidad de las dos partes; siento yo que al principio de la administración el presidente municipal hizo su esfuerzo pero las cosas no resultaron y ahí están los resultados.
“Yo no induje la
candidatura de Gerardo”
> ¿Llegó a la dirigencia municipal del PAN por imposición de Cabeza de Vaca?
No; fue la militancia. Yo gané un proceso.
> Ya como dirigente, ¿tuvo usted la consigna de hacer candidato a Gerardo Peña?
No. Mi único compromiso era crear las condiciones para un proceso interno en el que la militancia resolviera a quién querían como candidato.
> ¿Nunca tuvo la percepción de que Alfonso De León era el candidato ‘natural’ y que por lo tanto era mayor garantía que Gerardo?
Muchos suponían eso, pero mi responsabilidad era lograr una candidatura en base a la opinión de los militantes y eso se consiguió.
> Pero, al margen de los números finales, ¿no le causó sorpresa el triunfo de Gerardo sobre Alfonso De León?
Todos nuestros militantes emitieron su voto de manera libre y secreta. Así lo pudieron apreciar todos los medios de comunicación.
> Sólo para precisar: ¿a usted no le sorprendió el resultado?
Yo no puedo emitir un juicio en ese sentido, sólo quería que las cosas salieran bien. En ese momento todo resulto bien; después Alfonso se fue del PAN, a nosotros no nos hubiera gustado. Pero ni modo.
> ¿Indujo usted –de alguna manera– el resultado de esa candidatura?
No, de ninguna manera. En ninguna de las quejas presentadas incluyen sospechas sobre el comportamiento del presidente del partido para inclinar la balanza a favor de alguien en particular.
> ¿Conoció usted la versión de que Gerardo Peña ofreció dinero a cambio de votos?
Se dijeron muchas cosas, pero nada está documentado. Nadie probó nada.
> ¿Tenía usted la consigna de sacar a Gerardo como candidato y marginar a Alfonso?
De ninguna manera; nadie puede decir que como presidente del PAN metí la mano a favor de alguno.
> ¿Por qué usted, como dirigente del PAN, no fue capaz de retener a Alfonso De León?
Bueno, esa fue una decisión que él tomó…
> ¿Hizo usted lo posible por retenerlo?
Yo platiqué con él previo a la asamblea y le expresé lo importante que era mantener la unidad sin importar quién ganará. Lo mismo hice con Gerardo.
Después del proceso interno intenté platicar nuevamente con él, pero ya no fue posible. No nos vimos ya.
> ¿En todo este tiempo no se han vuelto a ver?
Sólo una ocasión nos hemos saludado.
> ¿Nunca más hablaron del tema?
No.
> ¿Ni para bien, ni para mal?
No.
> ¿Fue factor la salida de Alfonso para la derrota?
En cierta manera sí. Lo mejor para el PAN hubiera sido que se quedara.
> ¿Es verdad que Cabeza de Vaca había ofrecido a Alfonso De León la candidatura y, al final, optó por no cumplir su compromiso?
No, en realidad no sé si alguna vez le ofreció ser candidato a la presidencia municipal… de Francisco se dicen muchas cosas. Unas son ciertas, otras no.
En este tema en particular te puedo asegurar que yo nunca le escuché ofrecer algo así… Es más, no sé si Francisco pueda ofrecer candidaturas.
> ¿Era Gerardo Peña el candidato del presidente?
No. No que yo sepa. En este tema fue la militancia la que decidió.
> ¿Por qué, usted, como dirigente del partido bajó tanto su perfil durante la campaña constitucional?
Lo que yo buscaba era darle mayor espacio al candidato; en ese momento lo más importante era vender la imagen del abanderado.
> ¿Era muy joven, y no me refiero a la edad, el señor Peña para ser candidato?
Creo que Gerardo fue buen candidato… pero sí, el puesto que había desempeñado no abonaba a su perfil político.
Percibo también eso, que faltó más madurez y más trabajo político. Mayor roce con la ciudadanía. La gente no lo percibía como un prospecto a la alcaldía.
“El proyecto de
Francisco esta averiado”
> Prevalece la idea de que la ‘sombra’ de Cabeza de Vaca fue lo que más pesó en la campaña de Gerardo Peña… pero eso no ocurrió cuando usted fue candidato…
La situación era diferente; cuando fui candidato era el mejor momento del gobierno ‘cabecista’; estábamos en la mitad de la administración.
Ahora las circunstancias variaron y el desgaste de la figura de Francisco pudo afectar el desarrollo del trabajo de Gerardo.
> ¿La derrota de Gerardo y, meses después, el relevo en la dirigencia estatal del PAN han dañado el proyecto gubernamental de Cabeza de Vaca?
Es evidente que sí le afecta; el proyecto de Francisco está averiado, pero en política nunca podemos decir que alguien está muerto.
Hay que considerar que es un hombre que tiene cierta presencia en el Estado.
> ¿Cree que con lo que tiene le alcanza (a Cabeza de Vaca) para aspirar a la gubernatura?
No sé si le alcance o no, pero ahora la situación ha variado y tendría que conseguir una auténtica hazaña. Dependería de varios aspectos y él tendría que conjuntar varias corrientes.
> Hay quienes creen que usted no sólo se debe distanciar de Cabeza de Vaca sino romper con él ¿comparte esa opinión?
Aquí no se trata de rompimiento. Lo que en todo caso buscamos es que el liderazgo que él tiene contribuya con el Partido y sea para bien de los militantes y de los ciudadanos.
> ¿Está consiente que si no ‘rompe’ con Cabeza de Vaca eso pudiera afectar su trayectoria partidista é incluso, podría disminuir su proyecto personal a futuro?
Yo no lo creo.
> Hay quienes aseguran que usted acata las órdenes de Cabeza de Vaca…
Estoy consiente que mucha gente sigue pensando que Francisco manipula el partido y me manipula a mí; en eso sí quiero ser muy claro, no hay tal manipulación.
El que dirige y manda en el PAN soy yo.
> Algunos analistas consideran que el ‘presunto’ distanciamiento es sólo una estrategia entre usted y Cabeza de Vaca.
Respeto mucho a los medios de comunicación, analistas y líderes de opinión que hablan sobre el tema y por eso mismo te digo. De ninguna manera voy a estar fingiendo posiciones y no sólo en este tema.
> Es decir, ¿el distanciamiento es real?
Claro; es real.
> ¿Es usted un emisario de Cabeza de Vaca?
¡De ninguna manera! Yo estoy ahí para atender y escuchar a la militancia y todos, como partido tenemos que escuchar a la ciudadanía.
> ¿No se siente en deuda con el señor Cabeza de Vaca?
No, simplemente en su momento nos hemos acompañado en algunos proyectos, pero nada más.
> ¿Están a mano?
Sí.
> ¿Usted considera que están a mano?
Totalmente.
> ¿Le tiene miedo, usted, al señor Cabeza de Vaca?
No tengo por qué.
> En su opinión ¿cuál debe ser la actitud de la dirigencia estatal panista con el señor Cabeza de Vaca?
Institucional, igual que nosotros.
> ¿Le parecería justo que fuera retirado de la coordinación del PAN en el Congreso?
No quisiera emitir una opinión porque ese es un tema de la dirigencia estatal. No quiero contaminar.
> ¿Cuál es su relación con Javier Garza de Coss?
Ya hablé con él y le expresé mi deseo de trabajar de la mano con la dirigencia estatal.
> ¿Está, él, en la misma posición?
Así es.
“SI; voy a buscar
la presidencia”
> ¿Qué es para usted Cabeza de Vaca: militante, compañero o amigo?
Es un militante del partido… es un compañero del partido.
> ¿Aspira usted a ser presidente municipal?
Claro que aspiro, como todo político, a la candidatura a la presidencia; pero también dejo claro que es algo que no me quita el sueño.
Lo que me mueve ahora es buscar la unidad y que el PAN mantenga la confianza ciudadana para seguir ganando elecciones.
> Pero sólo aspira, o sí la buscaría…
Aspiro; pero no me quita el sueño.
> ¿Pero sí sería capaz de intentar construir la candidatura?
Creo que construyendo un partido unido, un partido sólido, fuerte… tendría muchas más posibilidades, entonces, en ese trabajo estoy.