
La Comapa opera siete equipos de bombeo en los libramientos María J. González y Luis Echeverría, proporcionados por la Comisión Nacional del Agua, en alerta por el desfogue de las presas El Cuchillo, en Nuevo León y Falcón, en Tamaulipas, cuyas aguas aumentan el nivel del río Bravo.
Con una bomba de agua de seis pulgadas, personal operativo de la Comapa revierte la filtración en el libramiento María J. González casi esquina con calle Bravo, pero dispone también en el mismo lugar de un equipo de bombeo de 12 pulgadas, que entraría en operación en caso de una mayor llegada de agua a través del bordo de contención del río Bravo, donde los operadores Mario Angel Medrano González y Francisco Lira García atienden dichos equipos.
Al igual que en la ubicación anterior, el organismo ha mantenido otros cinco equipos de bombeo que se utilizarían en caso de una eventual lluvia, ya que el Servicio Meteorológico Nacional ha emitido pronósticos de precipitación pluvial para la región.
Dos bombas de agua de seis y de ocho pulgadas de diámetro están ubicadas junto al depósito de chapapote en el libramiento Luis Echeverría; mientras que en la calle Abelardo Rodríguez se colocó una de seis pulgadas de diámetro y en las calles Pedro J. Méndez con río Bravo se ubican una bomba de agua de seis pulgadas de diámetro y una de ocho pulgadas de diámetro.
Mediante acciones anticipadas la Comapa logró revertir durante la pasada contingencia por el huracán “Alex” y la avenida de agua del río Bravo, la filtración que sufrió la parte baja de la zona centro y sectores vecinos y está preparada para enfrentar una eventual contingencia de menores proporciones.
Alma Alicia de la Cruz, residente de la calle Barra de Navidad, número 138, del fraccionamiento Puerta Sur, reconoció el trabajo que realiza Esiquio Reséndez, gerente general de la Comapa, ya que con su gestión el conjunto habitacional tiene un buen servicio de agua potable, lo que ha beneficiado a los cientos de familias que ahí residen.
Al acudir a la audiencia pública del municipio para realizar gestiones en distintas áreas de atención, Alma Alicia comentó que el organismo operador atendió las peticiones que en otra audiencia externó ante Esiquio Reséndez, y dijo que “ya tenemos agua, porque fue gente de la Comapa e hicieron algo con las válvulas y ya nos llega bien el agua potable y estas son las buenas noticias que tenemos de ellos, que también se sepan cosas positivas.”
Su opinión fue secundada por las señoras Luz María Díaz Martínez, quien vive en el 129 de la calle Barra de Cocos y por Lupita Aguilar Martínez, residente del 115 en la calle Punta Buena Vista del mismo fraccionamiento, quienes externaron su satisfacción por el trabajo que la Comapa realiza para que todos tengan agua potable, además de que consideran el valor del vital líquido y aseguran que todos los ciudadanos deben cuidarlo. El niño Rafael Estrada Aguilar, alumno de la escuela primaria del fraccionamiento Puerta Sur y residente de la calle Punta Buena Vista 115, dijo que en su escuela hay agua potable y él como la mayoría de los niños la cuidan, evitando que se desperdicie..