
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) el tabaquismo es la primera causa de invalidez y muerte prematura en el planeta. Esta práctica se relaciona con la aparición de 29 enfermedades, algunas de ellas cardiovasculares, respiratorias y otras cancerígenas.
En México se estima que mueren diariamente entre 123 y 165 personas por haber consumido tabaco, lo que convierte a esta adicción en un serio problema de salud pública.
Se han reconocido cerca de cinco mil compuestos químicos en distintas fases del humo del tabaco como insecticida, combustible para naves espaciales, propelentes de aerosoles; arsénico, butano y cianuro de hidrógeno, que era el fluido utilizado por los nazis en las cámaras de gas durante el exterminio de judíos en los campos de concentración.
Por ende, el humo del cigarro no solamente representa un peligro para quienes lo fuman, sino también para todos aquellos que lo respiran.
Aunque en México se han firmado leyes para tener espacios libres de tabaco, como la publicada el 30 de mayo de 2008 en el Diario Oficial de la Federación (DOF), en la práctica falta mucho por corregir, ya que el país apenas está transitando hacia una cultura de la prevención, al mismo tiempo que crece el número de fumadores jóvenes.
Se calcula que en toda la nación existen alrededor de entre 10 y 17 millones de personas que consumen tabaco, lo que se traduciría en un 10 por ciento de la población o más en el extremo de los casos.
Para las empresas tabacaleras y para la competencia desleal, México representa uno de los mercados más atractivos para la venta de cigarrillos, tan es así que recientemente, a finales del mes de julio, el secretario de Salud, Salomón Chertorivski, anunció que fueron asegurados 80 millones de cigarros “pirata” de procedencia ilegal.
El decomiso realizado en el puerto de Mazatlán, Sinaloa, no sólo es el más grande en su tipo hecho en el país, sino en todo el mundo.
Estos cigarrillos provenientes de China y la India se sumaron al millón y medio embargados previamente en el barrio capitalino de Tepito, con lo que de acuerdo con la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) en dos años suman 150 millones de unidades fabricadas en condiciones desconocidas y fuera de las disposiciones que establece la ley.
En ese sentido, José Armando Covarrubias Treviño, quien se encuentra al frente de la Comisión Estatal de Protección contra Riesgos Sanitarios en Reynosa, comenta que pese a estos espectaculares decomisos, aún no ha sido girada una alerta para rastrear o sacar cajetillas apócrifas del mercado en la entidad.
El funcionario dijo desconocer si en Tamaulipas circulan cigarros “pirata” y cuáles son sus implicaciones, pero menciona que mientras tanto, la Coepris está siguiendo el proceso de aplicación del programa de “Espacios 100 por ciento libres de humo de tabaco”, el cual se circunscribe a lugares públicos y privados, así como a restaurantes, edificios de gobierno y centros laborales.
“Nuestro trabajo es prevenir que haya fumadores pasivos y por lo tanto buscamos que se cumpla con la normatividad vigente para que no se fume dentro de estos sitios”, comenta.
Este médico general por la Universidad Valle de México (UVM) y con 10 años en el servicio público, agrega que la Coepris es una institución de medicina preventiva para enfermedades que pongan en riesgo la salud de la ciudadanía.
SIGUIENTE PASO
En el caso de la nocividad del tabaquismo, el entrevistado menciona que el programa se encuentra en su segunda etapa.
“La primera fue presentada el año pasado. Esta segunda incluye que los establecimientos tengan sus anuncios de no fumar, que no tengan los ceniceros en las mesas y que tengan sus zonas de fumadores aisladas y ahorita estamos verificando que se cumpla con eso.
“Cuando no se sigan tales requerimientos, primero no se le va a dar el certificado de ‘Espacio 100 por ciento libre de humo de tabaco’ y además se hará acreedor a sanciones, no tanto económicas, sino más de índole de retirarle ciertos permisos o avisos de
funcionamiento”, indica.
Covarrubias Treviño dice comprender que los usuarios, por ejemplo, de restaurantes, no dependen del dueño, por lo que resulta complicado controlar a los clientes que sacan sus cigarrillos; no obstante, abunda, se está trabajando para que los dueños tampoco creen las condiciones apropiadas que le permitan a la gente fumar dentro de sus negocios.
“Por este motivo les estamos pidiendo que tengan un cenicero en una área fuera de estos lugares de reunión pública”, señala.
En lo que va de este 2012 el titular de la Coepris reconoce que nadie ha sido sancionado por fumar dentro de un local, pero revela que se le está dando seguimiento a las alertas ciudadanas.
“Tenemos dos lugares que fueron denunciados. Los mismos clientes de los establecimientos han llamado a nuestras oficinas centrales y nos han ayudado para avisarnos de que se está fumando en ciertos lugares.
“Nosotros hemos acudido, hablado con los dueños y nos cuentan que sí ha habido casos de clientes que prenden su tabaco y no hacen caso a los mismos propietarios. Muy amablemente los dueños les solicitan que no estén fumando dentro”, describe.
Este funcionario, quien también colabora para el Issste de Reynosa, informa que a pesar de tener matriculados lugares a los que no se les ha otorgado el certificado de medio ambiente libre de humo de tabaco, este programa todavía no llega a su tercera etapa, que es la parte de las multas y castigos.
“Este proceso se hará en coordinación con las oficinas principales en Ciudad Victoria, donde se mandará la papelería para una verificación y allá mismo se girará una sanción indicada por parte de nuestro departamento jurídico”, detalla.
POLIVALENCIA SANITARIA
Por lo general, la Comisión Estatal de Protección contra Riesgos Sanitarios es asociada con el monitoreo del dengue y la salubridad en los alimentos; no obstante, su titular especifica que sus funciones van más allá, como la revisión de sustancias para el consumo humano como el caso del clembuterol en la carne; que la cloración del agua se mantenga en niveles apropiados; que los insumos de la salud no representen un riesgo para el consumidor y, precisamente, que la práctica del tabaquismo no perjudique a segundos y terceros.
“Nosotros también controlamos a los médicos, a los químicos, a los laboratorios y todo lo que pueda representar un peligro de salubridad. Para que un establecimiento de este tipo funcione, necesita estar regulado por la Coepris.
“Todo lo que sea del rubro de la salud, como un hospital, rayos x, laboratorios. De hecho verificamos que éstos cumplan con ciertas especificaciones como es evitar que se salga la radiación. Nosotros nos cercioramos de que las paredes no estén cubiertas de plomo y que un laboratorio de análisis clínicos
tenga su contrato con una empresa de residuos biológicos potencialmente infecciosos y ciertas normas que debemos estar revisando día con día”, ilustra.
Empero, Covarrubias Treviño aduce que las irregularidades más recurrentes con las que deben tratar tienen que ver con los “productos milagro” enfocados a adelgazar y a quitar las enfermedades crónico-degenerativas como son la diabetes y la presión; y a curar la caída del cabello o a mejorar la belleza estética.
“Nos han llegado indicaciones de cremas que se untan en la piel y que contienen mercurio, el cual es una sustancia altamente tóxica para el humano y que puede ocasionar mareos, nauseas, vómitos, pero también hipertensión arterial o inclusive, insuficiencia renal aguda crónica.
“Esto es una gran responsabilidad. Día con día nos tenemos que estar actualizando y estar al tanto de las alertas. Tenemos compañeros que son nuestros médicos centinela en las unidades de emergencia y para poder llevar a cabo nuestra función contamos con un promedio de 40 empleados, de los cuales 17 son promotores que andan en las calles verificando alimentos.
“De hecho, tenemos un programa para la prevención del cólera, que hace años no aparece un caso de este tipo en la ciudad, pero nosotros monitoreamos semana tras semana esta enfermedad”, expone.
El entrevistado, cuya dependencia para la que labora depende de la Secretaría de Salud del Estado y se coordina con la Jurisdicción Sanitaria Número IV, asevera que cuando se presentan brotes infecciosos que relacionan a dos o más personas, los “centinelas” nos avisan y entonces la Coepris acude a efectuar el muestreo.
“Ellos nos mandan cuando por ejemplo hay un caso de dengue en alguna colonia y nosotros hacemos la verificación de ese caso y de todos los giros que pudieran haber influido para que prolifere esta enfermedad”, explica.
MODUS OPERANDI
Para realizar sus tareas de inspección y evitar ser confundidos por farsantes, todos los empleados de la Comisión Estatal de Protección contra Riesgos Sanitarios se encuentran plenamente identificados.
> ¿Los inspectores llegan en algún momento dado a pasar desapercibidos, en secreto, para verificar un lugar?
“Entendemos que está difícil ahorita la situación y mantener un negocio a flote, pero nosotros tratamos de que sea lo más legal posible y llegar de sorpresa puede molestar la economía de ciertos lugares.
“Tratamos de que no se lesione tanto al usuario; tratamos de llegar con nuestro uniforme, nuestro gafete, porque cuando llega Salubridad a veces es incómodo, pero sabemos que somos un organismo de suma importancia, porque si no hay un control adecuado pueden presentarse problemas serios.
“Además recibimos en ocasiones denuncias de gente que ha trabajado en esto y que se hace pasar por verificadores, es por ello que nuestro comisionado estatal implementó un gafete que trae holograma y trae ciertos candados y normas para que la persona que no llegue con gafete no sea atendida como tal”, menciona.
Este profesionista comenta que uno de los fraudes más comunes a la salud son los de médicos que no son médicos o de médicos que están ejerciendo algo que no les compete o para lo que no están capacitados.
“Somos un organismo 100 por ciento preventivo y nosotros atendemos todas las quejas que nos llegan sin ser una dependencia policiaca. Lo que más se ha visto es que personas que recetan algún medicamento, por lo cual se hizo un programa a nivel nacional para poder dar los antibióticos únicamente con receta.
“Antes de eso, yo como médico te puedo decir que mucha gente lo hacía, pero ahora la mayor parte de las farmacias cuentan con sus doctores y ahora, si no se les llevas una receta no se les están surtiendo a las personas su medicamento”, compara.
Por otra parte, cuando son detectados “productos milagro” el procedimiento a seguir de la Coepris depende del tipo de alerta emitida por las autoridades federales y del Estado.
“A veces nos mandan la orden de retirar de la venta o de decomiso. Cuando se decomisan los artículos se traen a la oficina y se mandan a Ciudad Victoria y allá ya se encargan de su destrucción”, revela.
Asimismo, este funcionario enfatiza que la Coepris también inspecciona lugares donde hacen tatuajes o spas, que ahorita están muy de moda, así como el tipo de agua que está llegando a miles de hogares.
“A veces es monótono estar revisando estanques semana por semana, pero sabemos que así vamos a poder controlar un problema antes de que surja. Esta es la función de la Coepris, que no nada más somos, dengue, sino que somos prevención del clembuterol.
“Ya son años que no ha habido esta sustancia en el Estado y nosotros hemos estado haciendo muestreos semana tras semana en las carnes rojas. El clembuterol es un esteroide que se le puede dar al ganado y con esto aumentar su volumen, pero es tóxico para el ser humano.
“También tenemos un programa para medir el nivel de cloro en el agua. Tenemos alrededor de más de 300 puntos de verificación que estamos monitorerando. Cuando hemos notado que desciende este nivel hablamos con las autoridades de la Comisión Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (Comapa) y le decimos que hay un descenso de cloro, donde pueden proliferar bacterias en estas condiciones para que ellos intervengan”, añade.
Covarrubias Treviño pone a disposición de la ciudadanía el sitio de internet de la Coepris, para que resuelva sus dudas y sepa qué hacer en caso de detectar un problema de salud pública.
“Estamos en el gobierno del Estado en la dirección: www.tamaulipas.gob.mx, donde se encuentra la sección de la Comisión Estatal de Protección contra Riesgos Sanitarios y aparece nuestra información y teléfonos, para cualquier inquietud que tenga el público”, invita.
Por lo pronto, esta dependencia se ha mantenido ocupada debido a la alerta por la proliferación del mosquito Aedes Aegypti dentro de la IV Jurisdicción Sanitaria.
“Estamos trabajando al 100 por ciento. Esta temporada no hemos tenido vacaciones, ya que hubo una alerta de dengue y la mayor parte de los verificadores nos turnamos para estar haciendo una labor de prevención continua”, concluye.