La insólita comunidad sureña brasileña de Noiva do Cordeiro, en la cual viven más de 600 mujeres, muchas de las cuales son solteras entre 20 y 35 años, y en la que apenas hay hombres, experimenta una severa escasez de candidatos a novio para sus integrantes.
Las mujeres son la única autoridad en la comunidad y se encargan tanto de las tareas agrícolas como de la gobernación, pasando por la religión, entre otras.
“Hay muchas cosas que las mujeres hacen mejor que los hombres”, explica una de ellas, Rosale Fernandes, citada por el diario Mirror.
“Nuestra comunidad es más hermosa, más organizada y más armoniosa que si los hombres estuviesen en cargo”, destaca.
Sin embargo, añoran la presencia de un “verdadero” hombre: “Queremos conocer a caballeros, que dejen sus propias vidas y vengan para formar parte de las nuestras”, explica la vecina Nelma Fernandes.
La comunidad tiene una única e interesante historia. Fue fundada hace 120 años por Maria Senhorinha de Lima, una mujer expulsada de su comunidad y excomulgada de la Iglesia católica por “adulterio”, después de que abandonara al marido con quien la habían obligado casarse.
Poco a poco otras mujeres se unieron para vivir con ella. No obstante, en 1940 un pastor evangélico, Anísio Pereira, se casó con una joven de ahí y llegó a ser la máxima autoridad, imponiendo reglas estrictas, como la prohibición de cortarse el cabello o tomar alcohol.
(Agencia El Universal)