
“Esto ha sido lo que llaman un evento histórico, pero para que realmente sea histórico tenemos que hacer un gran trabajo y les prometo que no los voy a decepcionar, vamos a hacer un gran trabajo”, dijo Donald Trump en su discurso al final de la jornada electoral.
“Estoy muy emocionado por ser su próximo presidente y realmente espero que en dos o tres años o tal vez ocho años, ustedes dirán que eso fue algo… que se sintieron orgullosos de hacerlo.
“Quiero decirles que si bien la campaña ya terminó y en este momento nuestro trabajo apenas comienza, vamos a trabajar inmediatamente para el pueblo estadounidense y ustedes se van a sentir tan orgullosos de su presidente. Yo amo este país, gracias muchas gracias”, expresó en un tono muy mesurado, bastante alejado de su actitud beligerante utilizado en su campaña….
El candidato republicano Donald Trump consiguió la madrugada del miércoles 9 de noviembre una victoria histórica en las elecciones presidenciales estadounidenses, lo que de inmediato tuvo un efecto negativo en el Peso y en las bolsas y mercados internacionales.
En su discurso, Trump se mostró conciliador. Llamó a la unidad y dijo que será el presidente “de todos los estadounidenses”, reconoció la dura batalla que dio su rival demócrata, Hillary Clinton, y prometió grandes cosas para todos los ciudadanos. Incluso adelantó que podría buscar la reelección en cuatro años.
A contracorriente de las encuestas que veían a Clinton como la más probable ganadora de la contienda, Trump se impuso en estados clave como Ohio, Dakota del Norte, Pennsylvania y Florida.
Al final, se quedó también con Wisconsin, superando los 270 votos electorales necesarios para llegar a la Casa Blanca a partir de enero, cuando sustituirá a Barack Obama.
Pasada la una de la mañana del miércoles, John Podesta, jefe de la campaña de Clinton, confirmó que la aspirante presidencial no hablaría.
Desde el centro de convenciones Javits Center, pidió “esperar un poco” hasta que terminaran de conocerse los resultados de los comicios. Sin embargo, Trump dijo que Hillary lo llamó para admitir su derrota y felicitarlo.
El magnate se convirtió en el primer candidato que no viene del mundo de la política, sino del empresarial, en llegar a la Oficina Oval.
Para apuntalar esta victoria, los resultados en el Congreso revelaron que los republicanos mantendrán la mayoría en ambas cámaras, lo que permitiría al magnate avanzar una agenda que, según sus promesas, pasa por revisar los tratados comerciales, incluyendo el TLCAN, construir un muro en la frontera con México y revisar los avances en la relación con Cuba.