
Conocida como uno de los principales centros financieros al sur de la Unión Americana, la ciudad de McAllen no sólo alberga prestigiados colegios, exclusivas zonas residenciales, modernos hospitales y tiendas departamentales que han roto récords nacionales en ventas, sino que también cuenta con una heterogénea oferta culinaria de primerísimo nivel, sin que esto signifique que sea inaccesible a todos los bolsillos.
De acuerdo con Luis Cantú, vicepresidente de Negocios Internacionales de la Cámara de Comercio, además de los restaurantes de Estados Unidos, son 18 los países que están representados en la localidad: Argentina, Brasil, Jamaica, China, Cuba, España, Filipinas, Francia, Alemania, Grecia, India, Italia, Japón, Corea del Sur, México, Tailandia, Vietnam y Mongolia.
“Existen diferentes tipos de cocinas, obviamente unas con mayor presencia que otras, tanto por el gusto particular de la gente, así como por la clase de franquicias, ya que no todos los restaurantes crecen de la misma manera.
“Si me preguntan, lo que más predomina es la comida mexicana, después de la americana. Posteriormente sigue la comida italiana, como las tres más tradicionales y luego vienen todas las demás”, menciona.
Cuenta que la boyante variedad de platillos de otras nacionalidades de los que se dispone hoy en día obedece en gran parte a la migración multifactorial que se ha suscitado en los últimos siete años hacia esta región del país.
“Es un fenómeno, porque nos ha llegado gente tanto de México, como de otras partes de la Unión Americana y del extranjero, que vienen aquí debido a la industria maquiladora local y de Reynosa. Del mismo modo los hospitales atraen a muchas personas de otros lugares y que obviamente van generando nuevas oportunidades que se traducen después en la apertura de restaurantes”, señala.
El entrevistado destaca que a pesar de ser McAllen una ciudad con apenas 130 mil habitantes, su zona metropolitana suma 800 mil personas, teniendo importantes grupos culturales originarios de otras regiones del mundo.
“Participan y son parte de esta comunidad. Los vemos en el día a día, nos los encontramos en las tiendas, en las escuelas y en todas partes, por lo que podemos decir que la nuestra es una ciudad cosmopolita y multicultural, la cual va a seguir creciendo en este ámbito debido a la diversidad de economías que aquí están representadas”, considera Luis Cantú.
LA REPARTICIoN EN CIFRAS
Detalla que tan sólo en el distrito de McAllen se tienen mil establecimientos de comida prestando servicio, de los cuales un 40 por ciento se enfocan en escuelas e instituciones como escuelas y el resto están abiertos a toda clase de público.
“Yo diría que de 600 restaurantes que tenemos en la ciudad un 30 por ciento son mexicanos, otro 30 corresponde a la comida americana y el 40 es de origen extranjero”, manifiesta.
De esta industria, refiere el representante de la Cámara de Comercio, unos 20 mil trabajadores dependen de un empleo formal, mientras que otras 50 mil personas participan en esta cadena productiva de forma indirecta.
Añade que la derrama económica que arrojan los negocios culinarios en la ciudad no está dividida por categorías, pues también contempla la hotelería, pero los cálculos son de unos 100 millones de dólares anuales (alrededor de mil 300 millones de pesos).
Además, el hecho de ser McAllen un sitio importante en el tránsito de personas y turismo, le da una posición estratégica y privilegiada.
“Como saben, tenemos la visita de la gente de México que viene cada fin de semana, generando el 35 por ciento de los ingresos económicos. Hay también muchos que vienen por trabajo del norte de Estados Unidos, que llegan a los hospitales o lo demás, como las convenciones y el avistamiento de aves.
“También tenemos un mercado general de 800 millones de dólares en los turistas de invierno, los Winter Texans. Estamos hablando de una gran variedad de motivos”, explica.
Algo a considerar es que ni el poco o mucho dinero que se encuentre en los bolsillos de un cliente ni tampoco el apetito hacia ciertas cocinas pueden ser un problema, ya que a decir de Luis Cantú en esta localidad hay restaurantes para todas las economías y paladares.
“Se tienen desde alimentos muy sencillos, con el puesto que vende platillos tradicionales, hasta aquellos que preparan comidas muy sofisticadas”, afirma.
Cabe decir también que en McAllen este tipo de establecimientos están afiliados a la Cámara de Comercio y algunos de ellos pertenecen a la Asociación de Restaurantes de Texas y tienen sus reuniones periódicas.
MOSAICO CULTURAL
De Sudamérica a Norteamérica y desde el oeste de Europa al oriente de Asia, en la frontera de Texas hay chefs y cocinas que no sólo han llegado para aportar buenos conceptos alimenticios, sino que además permiten conocer sus tradiciones.
Uno de los casos que llaman la atención es el de Taste of India, un lugar muy pintoresco, decorado muy al estilo del país asiático. Los canales de televisión están en el idioma indo y reflejan una atmósfera que hace sentir al público una experiencia única.
“Nuestro organismo está muy involucrado en eso, tenemos eventos cada año en los que seleccionamos a 40 restaurantes, con diferentes representaciones, para promoverlos y que la ciudadanía y nuestros visitantes prueben sus platillos y sazón.
“De hecho, estamos preparando para el próximo mes de enero el Festival Internacional de la Comida, Un Tour Alrededor del Mundo. Sabemos la importancia del área restaurantera, porque cuando la gente viene de visita va a comer y es crucial tener una buena variedad de comida para los diferentes gustos”, indica.
Gracias a su logística y posicionamiento McAllen sigue atrayendo inversionistas de este sector. De hecho, se brindan asesorías e información para quienes desean incursionar en este terreno, considerando que la gran competencia también demanda conceptos muy originales.
Detalla que han llegado capitales para hacer crecer sus negocios y expandir franquicias, aunque también existen negocios culinarios que han nacido aquí.
“Es la combinación de ambos lo que hace atractivo lo que se tiene y esa es una de las características de esta ciudad, que posee cocinas que muchas veces no las encuentras en otras partes.
“Una que está muy pintoresca es El Callejón de los Milagros. El Terco es otra de las que ha tenido mucho éxito. House Wine también tiene un concepto muy interesante, que maneja los vinos de calidad con comida excelente preparada ahí, pero en realidad es muy difícil elegir una, porque hay muchos restaurantes muy buenos y sería injusto no mencionarlos”, comenta el vicepresidente de Negocios Internacionales de la Cámara.
De esta manera, lejos de las pizzas, los hot dogs o las hamburguesas, vale la pena decir que existen suficientes opciones para comer en McAllen y disfrutar la ciudad desde otra perspectiva.