El reynosense Jonathan Roberto Yáñez Ávalos es el único mexicano presente en el Campeonato Mundial de Tenis para Ciegos, donde busca poner en alto el nombre de esta nación y escalar en el ranking internacional.
Asus 16 años, ocupa el puesto número seis a nivel mundial, y su perseverancia, dedicación y esfuerzo lo han llevado este 2024 hasta Italia, buscando que esta nación azteca se sienta orgullosa, pues Jonathan Roberto Yáñez Ávalos no solamente representa a Reynosa, sino también a México en el Campeonato Mundial de Tenis para Ciegos.
Aunque el año pasado asistió a dos competencias internacionales, los Juegos Mundiales IBSA 2023 en Birmingham, y el Campeonato Mundial IBTA 2023 en Polonia, sus deseos de superación no tienen límite.
“Desde que me enteré de este tipo de competencias siempre soñé con participar, hoy es un gran orgullo llevar los colores de la bandera de mi país, representarlo en otras tierras y demostrar de qué estamos hechos los mexicanos”, expresó con gran emoción.
Fue a los siete años de edad cuando Jonathan se inició en este deporte y cuando conoció al entrenador Víctor Hugo Cázares Rangel, quien de inmediato detectó su talento y habilidades, y desde entonces se ha estado preparando.
El entrenador Víctor Hugo Cázares, explicó que el Blind Tenis, o también conocido como tenis para ciegos y baja visión, surgió en Japón hace aproximadamente 50 años y su finalidad es que pudiera ser practicado por personas que cuentan con esta discapacidad.
“Se adaptó para que las personas con discapacidad visual pudieran practicarlo; tiene su reglamento, se utiliza una pelota más suave y menos rígida, y se le fueron agregando algunos botes de más para que ellos pudieran intentar hacer un tenis parecido al convencional”, explicó.
Jonathan participa actualmente en el Campeonato Mundial de Tenis para Ciegos en la categoría B1, la cual alberga a personas que son completamente invidentes.
Sin embargo, existen otras categorías tales como la B2, B3 y B4; y todos deben usar unos parches y un antifaz.
PARTE IMPORTANTE EN SU VIDA
Jonathan estudia la especialidad de Logística en el Centro de Estudios Tecnológicos, Industrial y de Servicios (Cetis), número 71 en esta ciudad, en donde dijo sentirse muy bien, y recordó que cuando ingresó el recibimiento fue muy bueno, tanto por maestros como por alumnos, entre los que ha encontrado buenos amigos.
Además, considera a esta escuela como un buen lugar para prepararse académicamente, pues le dará las bases para en un futuro estudiar la carrera de Sistemas.
“Me motiva a ser alguien en la vida, a ser algo grande, ser algo de lo que algún día, no solo yo, sino también mis seres queridos, se puedan sentir orgullosos”, platicó.
El entrevistado mencionó que ha logrado conjugar sus estudios con sus entrenamientos gracias a su disciplina, así como al apoyo de su madre, Mayela Ávalos y de su entrenador.
“Salgo de la escuela y me vengo a entrenar al Polideportivo; además de perfeccionar mi juego me ayuda a relajarme y a distraerme un poco, pero también a procesar toda la información que recibo a lo largo del día”, expresó.
El Blind Tenis es un elemento importante en la vida de Jonathan, pues le ha otorgado muchos otros beneficios, entre los que se encuentran el transformarlo en alguien más independiente, más disciplinado y enfocado en el logro de sus objetivos.
“Me ha ayudado mucho también a ser más responsable”, expresó Yáñez Ávalos.
TRAS EL SUEÑO
El joven atleta tiene claro que para conseguir lo que se quiere se debe trabajar hasta lograrlo.
“Nada es fácil, y pues la verdad es un camino que se debe recorrer aunque haya obstáculos, pero lo importante es sobrepasarlos”, destacó.
Jonathan Roberto Yáñez Ávalos está rankeado como el número 6 del mundo, y reconoció que desde que supo de la existencia de estas competencias siempre soñó con poder colocarse en las listas junto a los mejores a nivel internacional.
“En este momento es algo así como ‘¡wow, impresionante!’ y para lograrlo fue fundamental enfocarme en mí, pues todos vamos con el objetivo de poner en alto los colores de nuestra bandera”, afirmó.
Haber asistido el año pasado a Inglaterra y a Polonia a competencias internacionales fue algo increíble para él, pero también una gran experiencia para su formación y trayectoria como deportista que le ayudaron a desarrollar estrategias en la cancha.
“Me concentro en mí, en mi juego, pero también analizo a mi contrincante para saber qué tengo que hacer para dar un buen juego y ganar”, aseveró.
Cázares Rangel externó que tras esta experiencia, se armó un plan para mejorar y hacer “un cambio en la situación técnica y en la emocional”, el cual fue trabajado por temporadas.
Tanto él como Jonathan sueñan con volver a México con el triunfo, y aunque se han esforzado por conseguirlo, saben que la competencia está muy reñida.
“Nosotros tenemos la ilusión de ganar el torneo, él va con esa mentalidad, pero sabemos que en el deporte se gana o se pierde y nos hemos preparado para las dos situaciones. No está fácil el torneo porque hay alrededor de ocho jugadores que están bastante fuertes”, comentó.
SU FAMILIA, SU GRAN APOYO
Era muy pequeño cuando Jonathan tuvo sus primeros acercamientos con el Blind Tenis y desde entonces, su familia ha sido un apoyo fundamental en este camino, en el que, aunque ha habido triunfos, también ha estado lleno de todo tipo de emociones y sentimientos.
“Mi familia ha estado conmigo desde el día cero, son y siempre serán uno de los pilares de mi vida, nunca me han dado la espalda y en esta competencia han estado aquí conmigo para darme su apoyo moral, para que yo pueda estar al 100 por ciento en la competencia”, platicó el joven.
Y sin duda alguna ha sido su madre, Mayela Ávalos, una de las principales fuentes de ese apoyo, el cual no solamente ha consistido en darle la motivación necesaria para generarle confianza en sí mismo, sino también el llevarlo diariamente a sus entrenamientos y otorgarle lo necesario para ello.
“Llevamos aproximadamente ocho años con sus prácticas
y siento que ya es parte de nuestra vida; el salir de la escuela y de ahí al instituto, y luego del instituto a la casa, ya es algo a lo que estamos acostumbrados”, platicó.
Sin embargo, no deja de ser un gran esfuerzo, pero tanto ella como sus hijas entienden la dinámica y le externan su apoyo.
Recordó que fue durante un campamento, que parecía ser un día de campo normal cuando Jonathan conoció el Blind Tenis.
“Me dijo ‘mamá, ¡yo quiero entrenar!’, así que nos acercamos con el profe y así fue; y aunque no ha sido del todo fácil y si un poco complicado, ha ido avanzando y ahora aquí están los frutos”, externó.
El deporte fue muy bueno para su hijo, incluso funcionó como una terapia y destacó que le ha ayudado a ser más independiente, a tener mayor confianza en él y mejorar su desplazamiento.
Sin embargo, durante la pandemia y la indicación emitida por las autoridades de mantenerse en casa, Jonathan limitó sus salidas, teniendo consecuencias negativas para su desenvolvimiento, lo cual quedó de manifiesto cuando retomó sus entrenamientos.
“Después de la pandemia regresó muy desorientado, pero gracias al trabajo del entrenador Cázares pudo recuperarse y también mejorar su desempeño, y ahora se mueve con mayor seguridad; él (entrenador Cázares) le ha enseñado muchísimo, le ha transmitido y apoyado con todo el conocimiento que él tiene”, apuntó.
Además de disciplinado, Mayela describe a su hijo como sensible, afectuoso y muy protector, tanto con ella, como con sus hermanas.
Como madre, dijo que desde que vio el gran interés y empeño de su hijo, supo que el Blind Tenis sería algo muy importante para él, pero se sincera al decirse sorprendida por todo lo que el joven ha logrado.
“Nunca esperé que mi hijo llegara hasta este nivel, pero ahora que ya lo está sé que tiene todo para seguir luchando; me siento muy orgullosa y tenemos la seguridad de que hará un buen papel; también estoy muy nerviosa, así que son sentimientos encontrados, pero estoy segura de que él puede lograr todo lo que se proponga”, afirmó.
A DARLO TODO
A pesar de que tuvieron algunos obstáculos para llegar a su destino, finalmente arribaron a Italia, donde ambos están listos para darlo todo.
Tanto el joven como su entrenador sueñan con volver a México con el triunfo, y aunque se han esforzado por conseguirlo, saben que el resto de los competidores tienen el mismo objetivo.
El joven deportista se ha ganado el cariño y admiración de quienes lo ven como un digno representante, no solo de Reynosa, sino también de México y por ello, acompañado por su coach, dará lo mejor de sí para que esta nación se sienta orgullosa, como una forma de agradecer todo su apoyo.
“Quiero agradecer el apoyo tanto económico como moral que me han estado dando y pues aquí estaremos dándole, es un orgullo llevar los colores de mi bandera, de mi país y representarlos ante otras tierras; además demostrar de qué estamos hechos los mexicanos para este tipo de competencias”, manifestó el joven.