Por designación directa o por convención interna, los panistas de Tamaulipas deberían apoyar a Francisco García Cabeza de Vaca como su candidato a gobernador, para que sean los electores quienes lo hagan pedazos, como buitres devorando carroña.
El plan A del alcalde más corrupto en la historia de Reynosa es abanderar al PAN buscando la gubernatura, mientas que su plan B es que sea designado de nuevo candidato a la presidencia municipal de la frontera, misma que saqueó de 2005 a 2007.
En el plan A con Cabeza de Vaca como candidato albiazul, el Partido Acción Nacional (ya desde ahorita) la crónica de derrota anunciada, por todo el desprestigio que arrastra el diputado local protegido por quién sabe quién dentro del Gobierno del Estado.
Sin embargo, para el presidente estatal del PAN, Javier Garza De Coss, la decisión no es fácil, porque su permanencia en el puesto dependerá en mucho de los resultados en las elecciones de 2010.
En el México contemporáneo, Acción Nacional es lo más parecido al guión de una telenovela donde sus miembros pasan fácilmente de los amores a los desamores; de las alianzas a las traiciones, y donde los amigos llegan a convertirse en los peores enemigos.
Pero si se trata de deshacerse de una vez por todas de una lacra, sacrificando una remota victoria, los panistas no deberían boicotear a Cabeza de Vaca en sus aspiraciones, al contrario, hay que alentarlo para que continúe con su plan de ser candidato a gobernador, separar asientos de primera fila y verlo caer.
Porque ni en la mente de los militantes más fanáticos se puede ver un escenario triunfalista, con un Tamaulipas en manos del PAN. Para ello tendrán que pasar unas cuantas décadas, sobre todo cuando existe el riesgo inminente que el PRI regresará a Los Pinos en 2012.
El ex alcalde de Reynosa tiene todo bien planeado en una película que no incluye novedades: juntó gente acarreada en su cumpleaños, ha filtrado la versión que si su partido no lo considera sería candidato del Partido del Trabajo, y –todavía peor– sus intereses personales van mas allá de los de su partido.
En su afán por vender la idea que sus aspiraciones políticas cuentan con el total apoyo de Felipe Calderón Hinojosa, subió a Internet un video donde aparece con él, pero se le olvidó un detalle: el presidente luce abundante cabellera. Es de otra época.
Sin embargo, Cabeza de Vaca miente, porque Calderón Hinojosa fue quien lo vetó para que no fuera candidato a diputado federal en las pasadas elecciones del 5 de julio, pues el mandatario sabe que apoyó a Santiago Creel Miranda, nunca a él.
Pero volviendo a los planes A y B, el segundo escenario sería como un premio de consolación, compitiendo por la alcaldía de Reynosa en una interna donde sus antes amigos y cómplices ya son sus enemigos.
Cabeza de Vaca, en el supuesto de ser descartado al gobierno, podría evitar una convención interna y recibir, como consuelo, la candidatura a la presidencia municipal.
De ser así, dentro del PAN habría muchos que jugarán en su contra, entre ellos, los Gómez Leal y Gómez Reséndez (su familia política); un grupo de empresarios traicionados; Raúl García Vivián, Héctor Pérez Ibarra, Horacio Ortiz Renán, y otros panistas que ya pintaron su raya.
Cabeza de Vaca no entiende que la imagen del espejo donde se mira solamente la ve él. Nadie más.
LA ENCUESTA VIRTUAL DE HC
En días pasados la página www.horacero.com.mx hizo un ejercicio virtual, al subir una encuesta donde los usuarios pudieron votar entre los precandidatos –del PRI y del PAN– que aspiran a la gubernatura de Tamaulipas.
Más de 20 mil votos recibimos en total en este novedoso ejercicio que fue muy bien vigilado por el departamento Web de Hora Cero, porque pudimos detectar a los “mapaches virtuales” que quisieron pasarse de listos al intentar embarazar la urna con votos que salían de una misma computadora.
Al final los resultados fueron lógicos. En el PRI, el diputado federal Rodolfo Torre Cantú (26.4%), y el alcalde de Reynosa Oscar Luebbert Gutiérrez (25%), hicieron el 1-2, mientras que en tercero y cuarto lugar finalizaron los ediles de Nuevo Laredo, Ramón Garza Barrios (15.3%), y de Matamoros, Erick Silva Santos (12.5%), respectivamente.
Hubo otros tricolores que tuvieron menos de diez por ciento como Baltazar Hinojosa Ochoa, Enrique Cárdenas del Avellano, Javier Gil Ortiz y la senadora Amira Gómez Tueme.
En la trinchera del PAN el senador José Julián Sacramento (24.2%) fue primero; en segundo el funcionario federal, Angel Sierra Ramírez (19.5%); tercero el dirigente estatal albiazul, Javier Garza De Coss (18.9%), y en cuarto Cabeza de Vaca (14.8%).
Que los primeros hayan ocupado esas posiciones no es ninguna novedad, pues después de 2007 cuando Cabeza de Vaca cayó en desgracia, Sacramento, Sierra y De Coss han demostrado quiénes mandan en el panismo de Tamaulipas: los tres mosqueteros.
Cuando se acerquen las fechas definitorias, antes de que los partidos designen a sus candidatos que competirán en las urnas el 4 de julio de 2010, Hora Cero saldrá a las calles a realizar los tan esperados sondeos.
Y p’al baile vamos.
