
Apenas un camión de acarreados panistas de Matamoros se pudo llenar para el largo viaje a Tampico donde el corrupto senador y ex alcalde de Reynosa, Francisco García Cabeza de Vaca, rindió su primer informe, extrañamente en una ciudad tan lejana a esta frontera y donde poco conocen de sus pillerías.
Porque tenía cosas más importantes en su agenda ese viernes 10 de enero, brilló por su ausencia Leticia Salazar Vázquez, la alcaldesa de Matamoros y aspirante a ser candidata del PAN al gobierno de Tamaulipas.
A la larga lista que desairaron el acto se sumaron los diputados federales Carlos García González y Ramón Antonio Sampayo, por un viaje de trabajo a la Madre Patria, como se le conoce a España, sin embargo, estuvieron muy al pendiente, no del contenido del informe de Cabeza, sino de las gambetas de Cristiano Ronaldo en el Estadio Santiago Bernabeu.
Resulta que ambos legisladores tamaulipecos, con otros de diferentes ciudades del país, asistieron por esas fechas a un curso que tuvo lugar en Madrid, donde aprovecharon para asistir a un partido de la Copa del Rey en la casa del equipo merengue.
Con la notable y notoria ausencia de Gustavo Madero Muñoz, dirigente nacional del PAN, además de innumerables albiazules del Estado, el evento reunió sobre todo a cómplices de sus pillerías cuando estuvo al frente del ayuntamiento reynosense, en el episodio más oscuro de las administraciones municipales.
Uno de ellos es el senador Roberto Gil Zuarth, aliado y socio de Cabeza, quien junto a otro ilustre del panismo nacional, Jorge Manzanera Quintana, saquearon las arcas de la frontera entre 2004 y 2007 y buscan repetir la misma dosis, de ganar ese partido la gubernatura en tres años.
Otros que también tuvieron cosas más relevantes ese viernes, fueron los legisladores locales blanquizales Belen Rosales, Juan Martín Reyna, Patricia Guillermina Rivera y Javier Garza de Coss.
El reynosense Garza de Coss prefirió acudir a la inauguración de la oficina de gestoría de su compañero de curul, Salvador Rosas Quintanilla, que tuvo lugar ese mismo viernes en Nuevo Laredo, y no quiso arriesgar el pellejo manejando por las carreteras tamaulipecas.
Y para no variar, cuando se aproximan los tiempos para la elección del nuevo presidente del PAN, en Tamaulipas otra vez los grupos están divididos, sobre todo por el factor Cabeza.
El legislador García González, de Matamoros, se perfila para ser el coordinador de la campaña con miras a la posible reelección de Madero Muñoz, mientras que Ernesto Cordero tendrá el respaldo del senador y sus compinches.
Por cierto, el empresario aduanal regresó de las tierras del flamenco, las tapas y la paella, con un pie lesionado al resbalar de una escalera. Ya en Matamoros fue enyesado para acelerar su curación.
Otro ilustre que también tuvo mejores cosas qué hacer ese día que ir a Tampico fue el alcalde de Nuevo Laredo, Carlos Canturosas, quien abanderando a Acción Nacional ganó la ciudad con mayor presupuesto en la frontera de Tamaulipas, que a la vez será su trinchera para hacerle contención a las ambiciones de Cabeza.
Y como ni Salazar Vázquez ni Canturosas fueron al mencionado acto proselitista, mejor mensaje no pudieron mandar al que se cree todavía archiduque de Tamaulipas. Los dos alcaldes, obviamente, no se quedarán con los brazos cruzados cuando, llegado el momento, se elija al próximo candidato a gobernador.
El que cambió diametralmente el despacho privado fue el alcalde de Reynosa, José Elías Leal, para que no quedaran vestigios de sus antecesores priiistas, Everardo Villarreal Salinas y Oscar Luebbert Gutiérrez.
A Pepe Elías le gustan las paredes blancas y espacios amplios, así que mandó a un baúl de los recuerdos todos los cuadros, diplomas y estatuillas que decoraban las oficinas principales del edil en turno.
Desde que empezó la administración todas las oficinas de secretarios, entre ellos el de Finanzas Francisco Almanza Villarreal, fueron pintadas de color claro, quizá para evitar las malas vibras, la mala leche y los malos augurios.
Aunque pareciera que en Tamaulipas suceden puras cosas malas relacionadas con la inseguridad en las carreteras, va una buena: a partir del 4 de marzo próximo entrará en operaciones una nueva ruta aérea que conectará a Tampico con Monterrey.
Se trata de la aerolínea Trasportes Aéreos Regionales (TAR) que cuenta con aviones Embraer ERJ-145 con capacidad de 50 pasajeros. Hay que recordar que solamente una línea de bajo costo daba este servicio.
Días atrás fue de pura fiesta. Por un lado el gobernador, Egidio Torre Cantú, encabezó los festejos de los 190 años de la fundación de Tamaulipas, mientras que en Matamoros se celebraron los 188 años de la ciudad.
Y aunque no fue una descabellada idea, el haber cambiado el nombre de la Playa Bagdad de Matamoros por Costa Azul obviamente generó polémica porque consideran que la propuesta aprobada por el Cabildo, de mayoría albiazul, lleva intenciones políticas.
Ni modo que las pasadas administraciones tricolores pusieran a esa parte del litoral mexicano Playa Verde o Playa Roja. Pos como que no queda, así que habrá que esperar menos de tres años para que, en caso de recuperar el PRI la alcaldía, regrese a su nombre original.
Aunque se quiere tapar el sol con un dedo, cierto es que saltarán chispas entre la delegación del Instituto Mexicano Mexicano del Seguro Social en Tamaulipas y el sindicato.
Sucede que la manzana de la discordia son mil 500 nuevas plazas que el IMSS deberá otorgar. Y mientras los líderes sindicales afirman que ellos deben elegir a los nuevos burócratas, el delegado José Manuel Assad Montelongo dice todo lo contrario.
Será un buen juego a las vencidas para ver de qué está hecho Assad Montelongo quien, para los que no recuerdan, perdió por boquete la senaduría durante el sexenio de Eugenio Hernández Flores.
En el gabinete de Torre Cantú ya fue designado el relevo del ex alcalde de Matamoros, Erick Silva Santos, quien durante año y medio estuvo en la nómina de la Secretaría General de Gobierno. ¿Será que el PRI lo quiere enjabonar para cuando sea el tiempo de elegir candidato a diputado federal en 2015?
Una vez lanzadas las convocatoria para renovar las dirigencias municipales, al menos en Matamoros el arroz ya se coció a favor del médico Víctor García, dejando en el camino a otros tiradores como Rubén Hiram González, ex secretario de Seguridad Pública en la gestión de Silva Santos y del establo de Raúl César González García, ex secretario del Trabajo y ex candidato a diputado local.
Al galeno García se le relaciona con el también perdedor Salvador Treviño, que soñó con ser alcalde de esa frontera.
Mientras en Reynosa el camino está libre para que sea ungido el abogado laboral Heberardo González Garza, ex presidente de la Fundación Colosio y ex funcionario en la pasada administración.
Los intentos de bloquearlo por parte del actual líder, Benito Sáenz Barella, quedaron en eso, porque al final su supuesto “gallo”, el regidor Gustavo Rico de Saro, se disciplinó y apoya la unidad de los consejeros a favor de González Garza.