
Aunque era de esperarse que Francisco García Cabeza de Vaca recurriera hasta la brujería con tal de no irse antes de concluir su periodo como gobernador de Tamaulipas, lo que sorprendió a propios y extraños fue la resolución del ministro Jorge Luis González Alcántara, que ocasionó todo un acertijo jurídico, en virtud de que, por un lado el Congreso del Estado promovió una controversia en contra de la Fiscalía General de la República (FGR) y el Juez que libró la orden der aprehensión en contra del mandatario tamaulipeco, y por el otro, el propio Cabeza de Vaca presentó una demanda de amparo para impedir su captura que de entrada en el juzgado octavo de distrito con sede en Reynosa, le concedieron la suspensión.
Así a grandes rasgos es como va la pelea jurídica, cuyas sentencias se dictarán hasta después de las elecciones, lo que hace inferir que para julio o agosto próximo habrá una de convulsiones por Tamaulipas, porque aún con fallos adversos el Congreso del Estado no va a querer designar gobernador sustituto y por añadidura, el Comandante Azul se refugiará en la Casa Tamaulipas de la que tendrán que desahuciarlo como rentero moroso.
¿Y DÓNDE ESTÁ LA MANADA AZUL?
Pues dispersa, los lobos azules como que dejaron solo al que le hizo de macho alfa en el ataque al águila presidencial, seguro alguien les habrá dicho que a partir de marzo del presente año el Código Penal Federal tipificó como Traición a la Patria, y sin derecho a fianza, el contribuir al desmembramiento de la Federación, y mejor se retiraron hacia sus respectivos territorios en donde también tienen problemas con las elecciones y por la inseguridad.
Por lo tanto, el Comandante Azul ahora está peleando por medio de los recursos legales al ver que con aullidos o porras no va a desactivar las acusaciones que pesan en su contra, pero que de entrada ya lo lincharon ante la opinión pública y eso le va a afectar en sus proyectos políticos presentes y futuros, pues lo que por hoy defiende en Tribunales es que todavía tiene fuero, no su inocencia en los delitos que le imputan.
De tal forma que si por la controversia que promovió el Congreso del Estado, o por el amparo que él interpuso, decretan que para enjuiciarlo tendrán que esperar hasta el día primero de octubre del 2022, a partir de esa fecha le esperan días tan tormentosos como los actuales aunque si demuestra su inocencia, entonces sí, a pensar hasta en la candidatura presidencial.
¿ELECCIÓN JUDICIALIZADA?
Por los incidentes que se han venido registrando en el curso de las elecciones en Reynosa, se puede anticipar que el candidato perdedor va a recurrir a la judicialización porque de los dos lados hay para argumentar, y esto sin tomar en cuenta la movilización electoral que habrá el día de la jornada comicial.
Y es que los observadores y sobre todo los operadores políticos bien saben, que en la noche previa a la elección, los partidos que tienen “conqueso” para las enchiladas despliegan activistas que lo mismo contratan operadores que compra de votos, el hecho de que ahora sea delito grave andar haciendo esas cosas no a todos va a desanimar pues hay fajos de billetes de por medio.
De ahí el vaticinio de que la elección para presidente municipal de Reynosa va terminar en los Tribunales, una deducción basada en el incontrastable hecho de que tanto el MORENA como el PAN cuentan con estructura electoral y, además con recur$o$ para accionarla y ganar al estilo de Felipe del Sagrado Corazón de Jesús: “haiga sido como haiga sido”.
Por lo anterior, Carlos Peña Ortiz y Jesús María Moreno Ibarra, están muy despegados del resto de los candidatos que por más empeño que le ponen Juan Carlos Zertuche y Benito Sáenz, no pueden meterse a la pelea y ya está por concluir el período de campaña, sin embargo, el esfuerzo del priísta y del naranjista no será estéril, obtendrán para su respectivo partido una posición en el próximo cabildo y estarán sembrando para las siguientes elecciones.
EL JUZGADO DE LAS ESTRELLAS
El Juzgado Octavo de Distrito en Tamaulipas está convertido en el Tribunal de las estrellas de la política. Ahí se están tramitando los amparos de Francisco García Cabeza de Vaca y Carlos Peña Ortiz, el del primero bajo el número 669/2021 y el del segundo con el 661/2021, de ahí que el juez Faustino Gutiérrez está siendo objeto de atención mediática, algo a lo que no están acostumbrados en esos lugares en donde las cosas son con discreción y sigilo.
Pero aún así alguien tendrá que informar si a García Cabeza de Vaca con todo y que tenga fuero le dispensaron presentarse ante el juez que ordenó su captura, ya que para éste juzgador es evidente que no lo tiene y eso va a ser otra polémica, mientras que a ver si a Carlos Peña Ortiz, también le concedieron la suspensión sin tener que presentarse ante el juez penal de San Fernando, pues sin ser abogado se puede decir que sería tanto como enviarlo con el coyote que se lo quiere merendar.
De ahí que surge el interés por saber si el Juez Faustino tiene dos varas o dos medidas, y por lo anterior sus fallos van a trascender de la esfera jurídica.
También se estará al pendiente de lo que sentenciarán los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), con respecto a la controversia constitucional que promovió el Congreso del Estado en contra de la F.G.R., y del juez que supuestamente libró la orden de capturar a Francisco García Cabeza de Vaca, pues según los diputados locales le agravia a Tamaulipas –¿nos agravia?-, que lo anden persiguiendo aún teniendo fuero, pero si los ministros consideran que no hay tal invasión de atribuciones equivaldrá a sentenciar que si para el juez que ordenó su detención ya no tiene fuero: ¡va bola!.
Por si fuera poco, el ministro González Alcántara que fue el causante del acertijo jurídico que provocó la polémica por el desafuero de García Cabeza de Vaca, tiene en sus manos la decisión del recurso de reclamación que interpuso la FGR en contra del mencionado acertijo, solo que, ahora tendrá que someter a votación de los otros 9 ministros su sentencia, la que tendrá rebotes por ésta entidad.
Pero todas estas resoluciones judiciales se darán después de las elecciones. Así que, candidatos y candidatas a talonear los votos, que por cierto, Magaly Deándar, la candidata del MORENA a diputada local por el Distrito 5, con entusiasmo y sinceridad se ha venido posicionando entre el electorado, en virtud de que la franqueza en el hablar la tiene convertida en una revelación política y por ende camina hacia un escaño en el Congreso del Estado, sabe el compromiso que está asumiendo y por ende no va a defraudar, y por una razón simple: no es su forma de vida ni el engaño o la simulación.
DESAPARICIÓN DE PODERES
Las crónicas consignan que la última vez que hubo una desaparición de poderes en Tamaulipas fue en el año de 1947, siendo gobernador el neolaredense Hugo Pedro González, quien fiel a su mentor político el ex presidente de México Emilio Portes Gil, desobedecía al presidente Miguel Alemán Valdez.
Pero una noche, el jefe de policía en Tamaulipas andaba pasado de copas en el bar del Hotel Sierra Gorda de Cd. Victoria, que al avistar a Vicente Villasana, editor de El Mundo de Tampico, y un persistente crítico del gobernador Hugo Pedro, le increpó de mala manera y al encontrar respuesta desenfundó su 45 y arteramente asesinó a Villasana.
El hecho fue escandaloso y en Palacio Nacional aprovecharon la oportunidad desapareciendo los poderes, porque no obstante que al gobernador le dieron la oportunidad de una licencia la desechó, y se vino la Federación a darle posesión al general Raúl Gárate Legleu con apoyo militar.
Hoy revolotea por Tamaulipas el fantasma de una desaparición de poderes, que para eso es cuerda muy ancha el senador Ricardo Monreal, porque según juristas, los diputados locales le pusieron a pedir de boca esa oportunidad por no haber designado un gobernador sustituto ante el desafuero y separación del cargo de García Cabeza de Vaca, por parte de la Cámara de Diputados.
Así que habrá que empezar a leer lo que dispone el artículo 76 fracción V de la Constitución Política de México, que refiere a la atribución del Senado para decretar desaparición de poderes en una entidad federativa, como también hay que examinar los tres supuestos por los que se debe designar un gobernador sustituto, los cuales describe el artículo 84 de la Constitución Política de Tamaulipas, que por no leerlos los diputados locales, ahora están en riesgo hasta de bailar ellos.
Y hasta la próxima.