Diciembre está encima y con ello los mitotes y posadas, algo que en el pasado era motivo para la parálisis política, más todo indica que con Andrés Manuel López Obrador van a variar esos modos y formas, porque trae planes que no dan pie para el descanso y en Tamaulipas lo saben, desde el primero de diciembre la talacha será incesante porque el objetivo es tomar el palacio legislativo en junio del próximo año.
Los panistas por su parte también están conscientes que muy bien tendrán que portarse sus 31 alcaldes tamaulipecos y desde luego los funcionarios del gobierno del Estado, deberán evitar -como lo sugería Nicolás Maquiavelo- la rapacidad, ya que es lo que más molesta al pueblo y finalmente se convertirán en odiosos.
Entonces si el clásico de la política recomienda no andar con tranzas y menos de desvergonzados, el único camino que tienen para retener el palacio legislativo es portarse correctamente, y lo mismo va para quienes serán funcionarios públicos del gobierno federal aunque éstos en mayor medida, por la simple y sencilla razón de que el jefe de jefes pregona como forma de gobierno la austeridad y la honestidad.
Habrá muchos ojos y hasta lupas por todo Tamaulipas para balconear al que pesquen en la maroma, AMLO no se las perdonará y supongo que el comandante azul también ya les leyó la cartilla, circunstancias que le meten mucha presión a unas elecciones que tradicionalmente pasan desapercibidas para el electorado.
Pero en junio del 2019 es mucho lo que va de por medio, no solamente el control del poder legislativo que sería como un blindaje para la tropa estatal, pues en donde los candidatos morenistas salgan avantes en la mayoría de los 22 distritos tendrán prácticamente en la bolsa las alcaldías de las principales ciudades en el 2021 y la gubernatura en el 2022 la tendrán a tiro de escopeta.
Lo anterior, hay que decirlo, es una percepción generalizada de la llamada comentocracia de Tamaulipas y no exclusiva de Neptuno y, por lo pronto, ya se deslizan cartas, por el PAN Carlos Peña Ortiz, Hugo Ramírez Treviño y quieren reelegirse Luis “El Cachorro” Cantú y Juanita Sánchez, mientras que por el MORENA Juan Triana Márquez, Zorayda Lara Cruz, diputada federal suplente; Alfonso Gerardo de León, Raquel Rodríguez -la joven que debatió dignamente con Carlos Peña Ortiz-, y Omar Kú.
Por su parte el PRI, como en Tamaulipas todavía permanece en cuidados intensivos van a batallar para encontrar candidatos, algo que Yahleel Abdala lo sabe, aunque el problema que tiene enfrente es el de conseguir recursos porque ni para los “chescos” alcanza lo que le mandan de la sede nacional tricolor.
UN ALCALDE ATÍPICO
EL DE MATAMOROS
Mario López Hernández es un alcalde atípico porque tan pronto se enteró que las multas por infracciones al reglamento de tránsito que aplicó durante dos años la administración del Chuchín habían sido ilegales, sometió a la aprobación del cabildo matamorense el regresar el dinero a los ciudadanos multados, pues el departamento de tránsito estuvo operando en la ilegalidad al no estar conformado legítimamente.
La nota como es natural voló por los municipios tamaulipecos, pues no existe un antecedente en donde un ayuntamiento devuelva las entradas y con esas acciones y otras más, Mario va labrando el camino rumbo al 2022 al irse convirtiendo en uno de los principales activos del morenismo por Tamaulipas.
Como también lo está siendo Adrián Oseguera Kernión, que en la alcaldía de Ciudad Madero está poniendo en práctica sus habilidades para la administración y por ende su naturalidad para ser ejecutivo.
TORMENTA EN VASO DE AGUA
LA LICENCIA DEL 1er SÍNDICO
Posterior a “El Día de Muertos” trascendió que el primer síndico del ayuntamiento de Reynosa, Alfonso Gómez Monroy, había solicitado una licencia por tiempo indefinido, pero después dijeron que no, que era sólo un rumor el que dicho sea de paso no se difumina porque Poncho no se aparece por el palacio municipal.
Más sin embargo, las cosas por palacio no se detienen y Maki Ortiz, tras superar la pena que le causó la pérdida de su consaguíneo ya está en la chamba, y me cuentan que su estado de salud es tan óptimo como la fuerza de un caballo o yegua, ante la desilusión de algunos que por las redes sociales ya celebraban una inminente separación del cargo por motivos de salud.
Sin embargo, la alcaldesa debe reflexionar en el caso de los nombramientos de colaboradores, recurrir a externos ocasiona celos y posteriores divisiones, ese ambiente denso ya se respira con la presencia de Lázara Nelly González que está aferrada en ser diputada local por Reynosa, como también incomodó la designación de Yehude López Reyna como director del departamento del impuesto predial por ser otro foráneo.
Ahora que si tanto Lázara como Yehude fueran unas pirinolas sin par se comprendería, pero la primera cuando fue alcaldesa de Mainero no fue diferente a sus antecesores, y el segundo, cuando la hizo de diputado local por Río Bravo pues tampoco, a lo mejor éste también quiere ser diputado por Reynosa, pero entretanto, Lázara anda como chivata en cristalería por las oficinas municipales.
Pero no todo es desorden por palacio, Eduardo López Arias el titular de la Secretaría de Obras Públicas y Medio Ambiente del municipio se ha significado como un eficiente servidor público, lo prueba su celo en el desarrollo de las pavimentaciones por colonias periféricas que fueron el granero de votos de Maki. En términos beisboleros, es Eduardo un bateador que saca la bola del cuadro y por ello no hizo quedar mal al grupo empresarial del que proviene -Rolando y Javier Cantú Barragán- y respondió a la confianza de la alcaldesa, por ello lo ratificó en el cargo. Creo que López Arias va a crecer dentro del servicio público.
ALCALDES AZULES PANIQUEADOS
Cuentan que Adrián Oseguera Kernión el alcalde de Ciudad Madero, en su afán de planchar las relaciones entre los alcaldes de la zona metropolitana del sur de Tamaulipas con el súper delegado del gobierno federal, José Ramón Gómez Leal, ha procurado que tengan acercamientos.
Pero qué creen?. Pues que voces que identifican como la de Víctor Sáenz y de “El Truco” Verástegui los alertan advirtiendo que aguas con dormir con el enemigo, que por lo que respecta al Morena no hay tal sentimiento, nomás que los celos en la política son peor que las de una mujer herida del corazón, y esas animadversiones impiden acercamientos que serían benéficos para los tamaulipecos.
QUÉ PASA CON LA UAT?
La otrora máxima casa de estudios de Tamaulipas que tuvo uno de sus mejores momentos cuando fue rector el abogado Enrique Luengas Piñeyro, y tiempo atrás el también jurisiconsulto Francisco Villarreal, ambos nativos de Tampico, como que entró esa institución en un trance catatónico bajo el rectorado de José Andrés Suárez Fernández y la neta que sorprendentemente.
Pues resulta que José Andrés partió de Reynosa bajo los mejores augurios, su paso por la dirección de la facultad de Agroindustrias avalaban sus aspiraciones, pero como que no le sienta bien la torre de la calle 8 allá en Ciudad Victoria.
Están renovando sino es que ya lo hicieron las direcciones de diversas facultades y hay quejas de que no fueron democráticamente, pero eso a como están las cosas es lo de menos porque no se siente su batuta en lo administrativo tan es así que tiene que pedir permiso hasta para ir al baño, ya se imaginaran si se le ofrece “el king air” que lo trae un “subalterno” reynosense también pariente de los Cabeza de Vaca, dicen que uno finge ser rector y el otro funge, como les quedo el ojo, la verdad qué “chulada”.
Y así, entre facultades cuyos directores no le sienten respetillo, lo académico comienza a estancarse y en la UAT esa situación no debe prevalecer, porque al paso que van hasta las universidades “cua cua” que hay por Tamaulipas los van a rebasar.
Hasta la próxima y ya con posadas en puerta, váyase sumereando con el brujo de su confianza pues después del 20 de noviembre ya no son mitotes sino fiestas navideñas.