El domingo 13 de diciembre Javier Garza de Coss, presidente del Partido Acción Nacional en Tamaulipas, salió bien vitaminado, como pavorreal o guajolote navideño, cuando salió humo blanco de la asamblea estatal de su organismo político.
Durante varias horas de encerrona en el Gimnasio Multidisciplinario de la UAT en Ciudad Victoria, se eligieron 80 consejeros estatales –el principal órgano de gobierno del PAN–, donde el gran derrotado fue el corruptísimo ex alcalde de Reynosa, Francisco García Cabeza de Vaca.
Los varios grupos opositores al ahora diputado local sacaron adelante sus propuestas de consejeros, dejándole las puras migajas al otro.
En la asamblea Garza de Coss no solamente salió victorioso, sino también otros grupos de panistas de Altamira, Matamoros, Ciudad Victoria y Tampico, así como el de Raúl García Vivián, aspirante a la alcaldía de Reynosa.
Fue otro clavo en el ataúd político del ex alcalde de Reynosa, exhibido bastante horrible las últimos días a nivel nacional por El Norte, Reforma, la revista Proceso y por columnistas de la talla de Raymundo Riva Palacios.
Con artículos, notas y reportajes donde enlistas sus malas compañías, amigos ligados al crimen y sus ligas con la corrupción en su gestión de alcalde, en tiempos cuando el PAN y el presidente Felipe Calderón Hinojosa tratan de evitar se infiltre la delincuencia en sus filas.
Sus adoradores deben saber que no solamente Hora Cero ha sacado su nada envidiable expediente lleno de mugre, antes lo hizo El Universal. Y seguramente va a seguir con el mismo discurso: que es una víctima del gobierno estatal.
Para su gran preocupación, todo indica que es víctima, pero del fuego amigo. El mismo va enterrarlo políticamente. Ya verán.
A otra cosa mariposa. Si bien el trabajo de opinión pública realizado por Hora Cero y presentado en la pasada edición vino a reflejar las preferencias de un segmento de los electores de Tamaulipas, hay una gran verdad: los resultados pueden influir en la toma de decisiones cuando hay dudas, pero los sondeos no definen candidaturas.
Cuando está por servirse la cena de Navidad y a destapar las botellas por la llegada de 2010, el gobernador Eugenio Hernández Flores ya hizo su carta a Santa Clós y la envió al Polo Norte, esperando que a mediados o fines de enero –o comienzos de febrero– tenga la lista de los contendientes.
Pero más que Hernández Flores, los que esperan la llegada de Santa son los nueve precandidatos del Revolucionario Institucional que todavía creen que existe un hombre de pronunciado abdomen, de traje rojo, botas y cinturón negro; con cabello, barba y mostacho blanco.
El mítico personaje que entrará por la chimenea con un gran costal y dentro el principal regalo: la candidatura del PRI al Gobierno de Tamaulipas.
Un Santa Clós que tendrá cara de Eugenio Hernández Flores, quien a bordo de su trineo arrastrado por reos tricolores se andará paseando por los cielos de Ciudad Victoria, Nuevo Laredo, Altamira, Reynosa y Matamoros, buscando al niño que mejor se portó durante su sexenio.
Sobre los resultados del ejercicio realizado por el equipo de investigación y opinión pública de Hora Cero, de inmediato hubo un caudal de reacciones, entre ellas de los dirigentes estatales del PRI y del PAN, Ricardo Gamundi Rosas y Javier Garza de Coss, respectivamente.
Ambos fueron entrevistados en vivo en el noticiero La Voz de Hora Cero que se transmite por el 1390 AM La Papaya (se vale el comercial).
Garza de Coss admitió la desventaja que tiene su partido, según el sondeo, sobre la preferencia de los electores que en un 27.1 por ciento dijeron que votarían por el PAN en las elecciones a gobernador del próximo año, por 57 por ciento que eligió al PRI.
“Esta es una encuesta que respetamos. Nos sirve de herramienta para ver qué tenemos que hacer y cómo tenemos que mejorar, pero sobre todo para acercarnos a la ciudadanía”, comentó.
Sobre el empate técnico que existe en el primer lugar de las preferencias de los panistas sobre quién debería ser su candidato a la gubernatura, entre el senador de la República, José Julián Sacramento Garza, y el diputado local, Francisco Javier García Cabeza de Vaca, el dirigente panista agregó:
“Ellos tienen un liderazgo o presencia estatal. Cualquiera de los candidatos que ahorita están contendiendo (de manera interna) los conocen en los municipios y ambos tienen que esforzarse más para lograr una mejor posición y credibilidad”.
El presidente del Comité Directivo Estatal del albiazul confió en que esa preferencia del electorado hacia su partido aumente cuando se elijan a los candidatos a la gubernatura, alcaldes y diputados locales para los comicios del 4 de julio de 2010.
Garza de Coss avaló los resultados el trabajo en el cual fueron encuestados 3 mil 79 potenciales electores de 12 municipios de Tamaulipas, al señalar que el porcentaje de preferencia por partido es parecido al obtenido en los últimos años.
“En Tamaulipas tuvimos alrededor de 31 por ciento en la elección pasada. Ahora aparecemos con un 27 por ciento, lo cual marca que tenemos un promedio muy cercano, e inclusive, estamos por encima de la media”, dijo en la entrevista.
Garza de Coss se refirió que muchas de las veces los encuestados prefieren no decir la verdad, argumentando que reciben beneficios de programas del gobierno estatal o federal y temen ser perjudicados.
Por otra parte Ricardo Gamundi Rosas salió con la puntada que el PAN será “pan comido” en las próximas elecciones. Aunque sus pronósticos no están alejados de la realidad si hoy fuera la cita a las urnas, es una buena chascarrillo de fin de año.
En un menaje duro y a la cabeza de los que aspiran a la grande, Gamundi Rosas dijo que el PRI puede tener un buen candidato, pero sin estructura y operación de su partido no ganaría nunca.
¿Un saco a la medida de Oscar Luebbert Gutiérrez, Ramón Garza Barrios o Rodolfo Torre Cantú, los primeros en el sondeo de Hora Cero? Sólo Eugenio Hernández Flores sabe la respuesta.
Por lo pronto Feliz Navidad. Si Dios quiere nos vemos hasta 2010.