Después de los estragos causados a la ciudad de Reynosa por la pasada administración del PAN, donde la mayoría de los secretarios, subsecretarios, directores, regidores y síndicos “no brincaban sin huarache”, haciendo del Ayuntamiento y la Comapa su negocio personal, parece que la misma historia quieren repetirla tres regidores ¡del PRI! Por mas increíble que esto parezca.
Sucede que el pasado miércoles 12, durante la sesión de Cabildo, los regidores priistas Moisés Balderas, Hilario Barrera y Jesús Juárez Duque, se quisieron poner a las patadas con Sansón, al ir en contra de la propuesta del alcalde, Oscar Luebbert Gutiérrez, y de su gobierno.
Como los mosqueteros, los tres regidores se fueron por la libre y se abstuvieron en una votación sobre el cambio de uso de suelo de un fraccionamiento que había sido aprobado –de forma sospechosa y en la agonía de la pasada la gestión panista–, por el Cabildo anterior. Pero al hacer las cuentas finales, los priistas sacaron adelante la propuesta pero por mayoría, cuando tenía que haber sido por clara y contudente unanimidad. Y a como están las cosas en Reynosa abstenerse significa: “oponerse” e “ir en contra”.
Al parecer los regidores Balderas, Barrera y Juárez Duque creen que pertenecen al Cabildo encabezado por Francisco García Cabeza de Vaca, donde el voto a favor de alguna propuesta costaba contratos para ser proveedor del Ayuntamiento; pesos, centavos, centenarios de oro y euros.
Los tres calificaron como “ligeros” los análisis que, según ellos, se hicieron para reconsiderar el uso de suelo de algunos fraccionamientos aprobados por los panistas, específicamente uno ubicado en los límites de Reynosa y Río Bravo, del cual se cree que los tres hermanos García Cabeza de Vaca tengan hartos intereses. Por eso su autorización al vapor.
De que algo huele feo de eso no hay duda, porque nadie cree en el Cabildo que los regidores Balderas, Barrera y Juárez Duque actuaron solitos y sin pedir nada a cambio.
Por otra parte, pero en el mismo tema, se sabe que antes de la mencionada sesión de Cabildo se le vio al regidor panista Roberto Rodríguez –conocido en el ambiente como el yerno del difunto dirigente estatal del PAN en Tamaulipas, Alejandro Sáenz Garza–, sentado en un restaurante con uno de los símbolos de la corrupción del pasado Ayuntamiento.
Roberto Rodríguez estaba departiendo y revisando algunos planos con el antes pobre y ex secretario de Obras Públicas y Ecología, José del Carmen Prieto Valenzuela, ese mismo que de la noche a la mañana resultó ser un millonario seductor. Y uno de los que tarde que temprano deberán enfrentar a la justicia de Tamaulipas, siempre y cuando haya voluntad para proceder en su contra… y en contra de otros más.
Por lo pronto sería lamentable –porque tampoco se descarta– que a Balderas, Barrera y Juárez Duque les hayan llegado al precio para ser los opositores de Oscar Luebbert Gutiérrez, cuando se supone que una vez ganadas las pasadas elecciones, deberían formar un bloque sólido como amplia mayoría.
Pero las tentaciones a agarrar dinero por parte de los tres regidores del PRI –en caso de ser ciertos algunos rumores–, fortalecería a la débil oposición dentro del Cabildo de Reynosa que busca coquetear con los priistas para llevar agua a su molino. Por lo pronto hay que subirse a las gradas y ver cuáles van a ser los siguientes capítulos.
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EL SEGUNDO INFORME DEL RECTOR REYNOSENSE
En un acto que reunió no sólo a la clase política de Tamaulipas, encabezada por el gobernador, Eugenio Hernández Flores, alcaldes y legisladores, además de los principales funcionarios y miembros del patronato de la Universidad Autónoma de Tamaulipas, el reynosense José María Leal Gutiérrez rindió su segundo informe de labores al frente de la institución académica.
Hernández Flores reconoció el trabajo que ha realizado el rector, puntualizando que la UAT se ha sumado al esfuerzo de su gobierno para que Tamaulipas sea la quinta economía del país.
Para devolverle sus cumplidos, Leal Gutiérrez agradeció al Ejecutivo estatal el impulso que en estos tres años de su gobierno le ha dado a la educación superior. Y agregó que de la UAT seguirán egresando profesionales que van a responder a las exigencias de Tamaulipas.
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mouriÑo, el protector de vaca, EN EL ESCANDALO
Quién no recuerda los días cuando Francisco García Cabeza de Vaca presumía fotos que se tomaba junto al entonces jefe de la Oficina de la Presidencia, Juan Camilo Mouriño, en estos días tambaleándose como secretario de Gobernación por la podredumbre que está brotando acusado de traficar con influencias para obtener contratos de Pemex para una empresa familiar.
Mouriño y Cabeza de Vaca fueron diputados federales electos en 2000, confirmando de que el Congreso de la Unión fue una buena escuela para que ambos aprendieran las artes de la corrupción del Partido Acción Nacional.
Y desde que dejó la corrupta alcaldía de Reynosa Cabeza de Vaca vendió la idea de que sus días como legislador en el Congreso local serían breves, pues sería invitado por Mouriño a un cargo de relevancia en el gabinete calderonista. Mientras son peras o manzanas:¡Qué bonita familia!
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LA CONVOCATORIA DE HORA CERO
Durante la fiesta del décimo aniversario de Hora Cero hubo reencuentros más que desencuentros, uno de ellos fue la presencia del ex alcalde de Reynosa, Serapio Cantú Barragán, quien estuvo duro y tupido en la plática con otros priistas quienes se suponía no eran santos de su devoción.
Cantú Barragán y su esposa estuvieron en amena charla con Oscar Luebbert Gutiérrrez y su esposa; con el tesorero, Raúl Jiménez; el secretario del Ayuntamiento, Miguel Angel Ahedo, y con otros funcionarios municipales
y estatales.
Además de la senadora Amira Gómez Tueme, estuvieron, entre otras personalidades del mundo político de Tamaulipas, el secretario de Desarrollo Social, Manuel Muñoz Cano; el procurador de Justicia, José Guadalupe Herrera Bustamante; el diputado federal Enrique Cárdenas del Avellano; los diputados locales Angel Tito Rodríguez, José Elías Leal, Alfonso Sánchez y, claro, el líder del Congreso y dirigente estatal del PRI, Ricardo Gamundi Rosas.
El alcalde de Río Bravo, Roberto Benet Ramos y su esposa; el mayor de Brownsville, Pat Ahumada; y el rector de la UAT, José María Leal Gutiérrez, fueron algunos de “los verdaderos amigos presentes”, como los llamó en su discurso Heriberto Deándar Robinson, director general de Hora Cero.
Y quien se paseó como en su casa, porque es de Reynosa, fue Abel Guerra Garza, actual cordinador de Proyectos Estratégicos y Urbanísticos de Nuevo León y ex acalde de Escobedo, además de ser uno de los precandidatos más fuertes a la candidatura del PRI al gobierno del vecino Estado para las ya cercanas elecciones de 2009.
Cerca de 400 personas acudieron al evento, entre ellos anunciantes, amigos, proveedores, sociedad de Reynosa y familiares de los dueños del periódico. A todos ellos el agradecimiento de esta empresa. ¡Salud!