Con eso de que empezó december, ósea diciembre pa’ mis amigos del Face, pos acá en la border como que todo empieza olor a pino y canelita.
Pa’ que me entiendan es como si estuvieran en el Bath and Body Works de la Plaza Mall y todo tiene aroma deli, muy rico, y hasta te sientes como que más humano y feliz.
Les escribo desde Sanborns Reynosa, con música de fondo de villancicos, después de probar un caldito tlalpeño con un cafecito, mientras la Rosa María contesta sus mensajes de Face y pone anuncios de Tik-Tok quesque se va hacer rica promocionando sus productos ecológicos.
Si quieren no me hagan mucho caso, pero yo la veo cada vez más guapa, como que cuando entra diciembre a las mujeres les cambia ese look o será que me pongo nostálgico: ya llevamos más de 12 años juntos y lo que nos falta, primero Dios.
Pos en este december les pido que no se aguiten: todo está más caro, ya se los había dicho dendenantes. Queríamos viajar de Reynosa a CdMx el día 26 de diciembre y regresar el 1 de enero del 2023. ¡Cuarenta mil pesos!
Y ¿por qué? El chavo de VivaAerobus dijo que era por la oferta y demanda. Se pasan. Mejor llevamos en burro, pero preguntamos por autobús y el precio bajó increíblemente en menos de 4 mil pesos, claro que pedimos el descuento de “abuelitos” del Inapam y asunto resuelto.
Ya me estoy preparando mentalmente para viajar chorro de horas de Reynosa a la bella Toluca y sí, recuerdo hace más de 20 años cuando viajábamos a Oaxaca en camioncito, pero eran otros tiempos y otras fuerzas.
Vuelvo con lo “mesmo” en estas fiestas no se agüiten, todo está más caro, y poco a poco con más inflación, pos como que los billetes de los ajolotes, tan bonitos ellos, ya no alcanzan pa’ los regalos.
Una amiga de la familia nos decía que no cree en la Navidad, porque es una época puramente comercial. Es cierto, el Santa que recordamos anuncia Coca Cola, pero fuera de eso, el momento de ver a la familia, a los padres (si los tienen valórenlos), a los hermanos, hijos, primos, como a los amigos, valen mucho.
No se pongan como Grinch, que no se quieren reunir en esta época: hagan hasta lo imposible por verse: aunque no alcancen pa’ cenar pavo y brindar con champagne, estos días son irrepetibles.
Sé que aún no es Navidad, pero sientan el ambiente en las calles y en las tiendas: el espíritu se respira diferente, aprendamos un poco de hacer el bien, sin mirar a quien. Sean felices.