
Estaba un día El Apuntador repartiendo los recuerditos que nos trajimos de nuestras más recientes vacaciones por los más paradisiacos puntos de alrededor del mundo, cuando nos encontramos con la sorpresa que en Reynosa las cosas se han puesto bastante agitadas.
Ahí tienen, queridos lectores, que a diferencia de ciertos reporteros, los chismes no descansan, y los sucesos estuvieron desarrollándose durante las últimas semanas de diciembre y las primeras de enero del nuevo año.
Ahí está por ejemplo el fiasco en el que se convirtió una entrega de premios a la trayectoria periodística, organizada por el Ayuntamiento de Reynosa, y no por la Unión de Periodistas Democráticos, mejor conocida por la asociación de las tres mentiras (no esperen que a estas alturas del partido les expliquemos el chiste).
Como lo escuchan, queridos lectores, esta entrega de reconocimientos que se realizó a mediados del pasado mes de diciembre, no fue organizada por el grupo que en Reynosa encabeza Miguel Turriza, sino por las autoridades municipales quienes nomás pidieron prestadas las siglas de la UPD.
Cuentan los que saben, que el fiasco de esta entrega de premios, sumado a otros detalles que les vamos a contar más adelante, terminaron de poner el último clavo del ataúd (y conste que lo decimos en sentido figurado) de Karla de la Garza, aún titular de Comunicación Social del Ayuntamiento de Reynosa.
Hay maloras que aseguran que en estos momentos la titular de Prensa en el municipio calero está como el coro de la canción de “El Chivo en Bicicleta”, con eso de que dicen “que se cae… que se cae…”.
Nos platican nuestros chismosos, que el alcalde del municipio calero no estaba nada contento con una serie de yerros cometidos por su titular de Prensa y Comunicación Social y mucho menos que esos errores le habían ganado llamados de atención de parte del mismísimo gobernador.
El primer strike (como ya les contamos) fue la entrega de los reconocimientos de la UPD, y el segundo fue el desastre en el que se convirtió un desayuno entre el gobernador del Estado y un “selecto” grupo de comunicadores con motivo del arranque de 2014.
Ahí tienen que aprovechando su primer gira por Reynosa, el mandatario estatal invitó a desayunar a un pequeño grupo de comunicadores de Matamoros y Ciudad Victoria. La encargada de organizar todo el relajo y contener a la raza de los medios locales fue precisamente Karla.
Hasta ese momento las cosas iban bastante bien. La titular de Comunicación Social reynosense separó un salón en un conocido hotel de Reynosa y se encargó de ordenar poco más de 30 platillos, suficientes para cubrir al mandatario estatal, sus invitados y uno que otro colado.
Sin embargo, con lo que no contaban, es que entre los medios de Reynosa hay bastante “gorrones” y apenas se enteraron que iba a haber un desayuno gratis con el mandatario estatal, que se lanzan al lugar donde, se supone, el acceso iba a ser limitado.
Al final, en el salón donde se esperaba que apenas hubiera poco más de 30 personas ¡había más de 100! Por lo que ya se pueden imaginar el relajo en que se convirtió todo el asunto.
Obviamente quien fue señalada como responsable del hundimiento de este Titanic fue Karla de la Garza, quien se supone debió a haber tenido cierto control entre la raza, para evitar que los que no estaban invitados se aparecieran en el desayuno privado.
Días después la titular de Comunicación Social tuvo otra oportunidad de hacer las cosas bien… y casi lo logra.
El festejo del Día del Periodista (que por cierto se llevó a cabo tres días después de la fecha, pues han de pensar que los reporteros pueden esperar para desayunar un huevo con jamón), era la oportunidad perfecta para que Karla se reivindicara ante sus jefes.
Todo iba perfecto, había más de 100 (buenos) regalos para la raza de los medios, el salón estaba lleno y asistieron los más representativos integrantes de la prensa local, hecho suficiente para tener al alcalde Pepe Elías Leal contento con la labor de su vocera.
Sin embargo, que aparece el higadito en el arroz (¿así se dice?) y todo lo bueno que hasta ese entonces había hecho Karla se fue para el traste.
Resulta que el evento fue también la presentación en sociedad del nuevo asesor del equipo de Comunicación Social en Reynosa: Jorge Pérez.
Por si no lo recuerdan, queridos compañeros, Pérez fue literalmente corrido de la titularidad de Prensa del Comité Directivo Estatal del Partido Revolucionario Institucional.
Es harto conocido que el mismísimo gobernador ordenó que sacaran a Jorge de la vocería del tricolor, molesto por la forma en la que había actuado durante el pasado proceso electoral y su falta de eficiencia en el manejo de la información.
Por lo tanto, el hecho de que Pérez aparezca como asesor de Karla en el Ayuntamiento de Reynosa no puede tomarse sino como un desafío directo a los designios del mandatario estatal, lo que pone en una situación muy complicada
al alcalde, Pepe Elías Leal.
Cuentan nuestras fuentes que este hecho fue considerado el tercer strike de Karla, que está a cosa de nada de dejar la titularidad de Comunicación Social del Ayuntamiento de Reynosa.
Tan fuerte está el rumor que hasta ya se tiene el nombre de quien sería su sucesor: se trata de Rodolfo Martínez Galván, quien acaba de dejar la dirección de Noticias de Corpo Radio Gape para ocupar un puesto como asesor de Comunicación Social.
Lo único que no alcanzamos a comprender es por qué el edil reynosense le está dando tantas vueltas a este asunto, cuando tiene la solución al alcance de la mano en la figura de Feliciano “Chano” Rangel, quien desde los tiempos de la campaña ha demostrado ser un elemento valioso y de confianza para él.
Hay que decir que “Chano” ha mostrado su valía en el Ayuntamiento de San Fernando, donde labora como asesor y se ha encargado de manejar con talento la imagen del edil de aquella población.
El más reciente de sus éxitos fue organizar un evento por los 100 días de la administración municipal con muy buenos resultados.
Sea quien sea el que se vaya a quedar como jefe de Comunicación Social en Reynosa, tiene mucho trabajo por delante, considerando que entre sus prioridades tiene que estar mejorar la relación entre el alcalde, Pepe Elías Leal y los directivos de los principales medios de la ciudad donde, hay que decirlo, existen sentimientos y molestias por algunos desaires.
Con decirles que la cosa está tan triste que en los pasados festejos decembrinos, que la presidencia municipal no tuvo la cortesía de enviar ya no se diga una canasta navideña, de perdido una lata de chiles jalapeños a los dueños o directivos de los principales medios de comunicación como una muestra de buena voluntad.
Y aunque nadie se va a morir de hambre por no recibir paté, galletitas y sobrecitos de té, siempre es lindo recibir un “alguito” por parte del alcalde, quien debería tener asesores eficientes.
Habrá que esperar lo que sucede en todo este asunto, que seguramente no tarda en ofrecer una conclusión a esta historia que se ha puesto más interesante que los últimos capítulos de la novela de la noche.
RETAZOS
No podemos dejar de comentarles algunos otros detalles que se vivieron en la celebración del Día del Periodista en Reynosa, como lo agradable que es ver que finalmente y tras muchos años, parece que el gremio en esta ciudad va dejando a un lado las envidias y la mala leche.
El festejo fue una verdadera celebración, con todos muy contentos risa y risa y condenando a los envidiosos y grilleros de toda la vida al oscuro rincón de donde nunca debieron de haber salido.
No tenemos que decirles sus nombres, todos se dieron cuenta quiénes son, principalmente con los aplausos o las rechiflas que les ofrecieron al momento en que pasaron a recoger sus regalos.
Por cierto, ya que les platicamos de este tema, quien de plano hizo el oso del año fue Jaime Aguirre Treviño, el ex aduanal, ex regidor y ahora metido a conductor de un espacio de radio.
Resulta que durante la rifa de los regalos en el festejo y por unos problemas de organización, hubo compañeros que salieron premiados en dos ocasiones. Afortunadamente todos demostraron que son bastante legales y rechazaron el segundo premio que pudieron haberse llevado.
El único que mostró el cobre fue precisamente Aguirre Treviño, quien ignorando los reclamos de todos los presentes, se llevó los dos regalos que supuestamente se sacó en la rifa, lo que fue muy mal visto por toda la raza de los medios.
Porque hay que reconocerlo, compañeros: sacarte un regalo es premio suficiente y andar de avorazado queriendo agandallar dos es simplemente patético ¿no creen?
Luego preguntan por qué las fuentes hay quienes ven a los reporteros como “muertos de hambre”.
Por cierto, ya que hablamos de regalos, no podemos dejar fuera lo gracioso que fue que en la citada rifa de regalos casi todos los integrantes de El Mañana de Reynosa que asistieron al evento salieron con sus teles, tablets, teléfonos celulares o, de perdis, una radiograbadora.
La aclaración del casi es porque el buen amigo Juan Carlos Flores fue único que salió con las manos vacías, algo que hay que decir tomó con bastante buen humor.
Pasando a otros temas van a decir que cómo somos tercos, pero no podemos dejar de sorprendernos con el cinismo que operan los medios de comunicación del valle del sur de Texas y lo evidente que muestran que tienen una agenda para fastidiar al norte de Tamaulipas.
Otra vez, reporteros como Sergio Chapa, sus compañeros de Valley Central y los integrantes de El Monitor de McAllen, han demostrado que son buenísimos para ver la paja en el ojo ajeno pero ignoran la vida que tienen en el suyo (o algo así).
Si alguno de ustedes ha estado al pendiente de las redes sociales y las noticias, podrán darse cuenta que desgraciadamente la frontera texana vive un preocupante problema de violencia e inseguridad.
Diariamente se registran balaceras, invasiones a hogares, decomiso de enervantes y otro tipo de incidentes que nos demuestran que aquella parte de la unión americana ha dejado de ser el paraíso de la seguridad que nos vendieron hace años.
Tan grave está el asunto, que hace unos días se reportó que las autoridades encontraron que un grupo de delincuentes estaban utilizando ¡patrullas clonadas! Para cometer sus ilícitos.
Sin embargo ¿qué es lo que han publicado los medios del sur de Texas sobre estos incidentes? Se los diremos despacito para que nadie se confunda: n-a-d-a.
Hagan de cuenta que las balaceras, los muertitos, las persecuciones y la invasión de viviendas no existen, pues no son reportadas por los “valientes” periodistas texanos.
¡Ah pero eso sí! Que no suceda algo de este lado del charco porque ahora si Sergio Chapa y el resto de sus compañeros invaden el Twitter con detallados reportes de lo feo que está la cosa en Reynosa, Matamoros y Nuevo Laredo.
Tan ridículo está el asunto, que en las redes sociales los integrantes de los medios texanos se dedicaron a reportar hasta que estaban tronando cuetes en Reynosa, como si el asunto pudiera tomarse como algo altamente peligroso.
Lo dicho, en todos lados se cuecen habas y los que pensaban que los medios de Texas eran imparciales, éticos y profesionales, seguramente se están llevando un chasco del tamaño del mundo.
No nos vamos sin antes dejarlos con una felicitación para Carlos Tovar, de El Mañana de Reynosa, por todo el tratamiento que le dio a la nota de la existencia de dos casos de adictos a la droga conocida como Kokodril, y cómo después la fuente que le dio los datos se quiso echar para atrás de todo el asunto.
Carlos demostró que tiene bien aprendidos los fundamentos de esta profesión que son: cuando tienes una declaración “bomba”, asegúrate de tenerla grabada y ese archivo mantenerlo en un lugar seguro, pues nunca puedes saber cuándo lo vas a necesitar.
Ahora sí, los dejamos con la gustadísima pregunta de la quincena: ¿Quiénes son los integrantes de un equipo de Prensa que están preparando las cajitas en donde guardarán sus artículos personales porque se enteraron que la guillotina está próxima a caer?