
Estaba un día El Apuntador acomodando en sus pequeñas cunitas a todos los niños de las roscas que le salieron en las múltiples celebraciones a donde fue invitado el pasado 6 de enero, cuando un amigo de Reynosa le preguntó si no iba a comentar nada respecto al próximo proceso electoral interno que se vivirá en la llamada “asociación de las tres mentiras”.
Para quienes no lo recuerden, eso de la “asociación de las tres mentiras” es como el nombre alterno a la Unión de
Periodistas Democráticos (neta, el chiste se explica solo), cuya delegación en Reynosa es la que está dando la nota en
estos momentos.
Resulta que ha llegado el bonito momento en el calendario interno del organismo que a nivel estatal sigue siendo encabezado por Óscar Alvizo, para renovar la dirigencia del grupo en la capital de las fajipapas y los socavones en las avenidas.
Generalmente los procesos internos dentro de la “asociación de las tres mentiras” se viven de manera bastante intensa, pues más de dos compañeros en el grupo se aceleran y agarran muy en serio el proceso eleccionario.
Incluso ha habido ocasiones en las que Miguel Turriza, quien ha ocupado el liderato del grupo en fechas más recientes, ha sufrido las patadas abajo de la mesa y los golpes bajos de quien se supone son sus amigos, pero luego se ponen muy lurias por el proceso electoral interno… un saludo para Alejandro Alonso Rico, mejor conocido en el mundo del hampa reporteril como “campanino”.
Pues bueno, en esta ocasión trascendió que además de Turriza existen otros dos personajes que anhelan quedarse con la dirigencia municipal de la “asociación de las tres mentiras”.
Ellos son Alfonso Madera (que siempre la ha deseado) y ¡Jaime Aguirre!
Del caso de Madera no hay mucho que decir, se trata de un buen compañero que tiene años en la talacha diaria de la radio, pero que ha tenido muy mala suerte cuando se trata de buscar un puesto de representación en uno de los tantos organismos de reporteros que pululan por la región.
El tema de Aguirre no sólo es diferente, sino que hasta logra que llame la atención, pues se supone que la UPD aglutina a trabajadores de los medios de comunicación y aunque este personaje ya tiene muchos años en la radio diciendo cosas (demasiados, considerarían algunos), eso no es suficiente para elevarlo a la calidad de periodista.
Es más, en honor a la verdad podría decirse que Aguirre cayó en esta profesión como un último recurso… considerando su trayectoria.
Como seguramente mucha raza no lo recuerda, por aquello de la mala memoria que se tiene en este tipo de asuntos, Aguirre estaba en el desaparecido Resguardo Aduanal Mexicano, donde su gusto por la grilla y la tenebra lo llevó a ocupar la dirigencia de la representación sindical en Reynosa.
Aguirre, quien en este entonces era conocido entre sus compañeros aduanales como “la Barbie”, no concluyó su gestión sindical en muy buenos términos, pues muchos de los viejos aduanales se sintieron traicionados por quien, se supone, era el encargado de defender sus derechos laborales.
Esto sucedió cuando el gobierno federal, encabezado por Carlos Salinas de Gortari, decidió desaparecer el Resguardo Aduanal Mexicano para sustituirlo por lo que se conoció como la Policía Fiscal.
Obviamente para poder hacer este cambio, el gobierno federal tuvo que pisotear los derechos laborales de los aduanales y para ello contó con el apoyo de los líderes sindicales a nivel nacional (Aguirre incluido), quienes doblaron las manos sin chistar.
Sobra decir que tras el incidente, Aguirre quedó muy mal con sus compañeros aduanales, sin embargo, eso no le preocupó demasiado y como tenía que seguir comiendo, decidió seguirle por el camino de la grilla.
Tras andar picando piedra por aquí y por allá, Aguirre logró agenciarse un hueso con la dirigencia municipal de la Confederación Nacional de Organizaciones Populares (CNOP), también conocido como el sector popular del PRI.
Este cargo le ayudó a acceder a una regiduría durante la gestión de Luis Gerardo Higareda Adam quien, muchos recuerdan, tuyo que salir por piernas del país, al comprobársele una serie de actos de corrupción.
Aquí fue donde Aguirre tuvo un papel protagónico en esta historia, pues él fue el encargado de auxiliar al alcalde prófugo de la justicia a escapar de la presidencia municipal y llegar hasta el puente internacional para internarse a Estados Unidos, de donde nunca ha regresado.
Este incidente “saló” la carrera política de Aguirre, quien primero buscó una diputación local por el PRI, pero como nadie le hizo caso entonces renunció a las filas del tricolor para buscarla bajo las siglas del PRD.
La aventura izquierdosa de Aguirre no tuvo buen final, ya que no logró quedarse con la curul en el Congreso local por lo que llegó el momento en que debía de decidir qué iba a hacer con su vida… fue entonces cuando se decidió por el periodismo.
Sin ninguna experiencia de por medio (recuerden, había sido aduanal y político), Aguirre rentó un espacio en Corpo Radio Gape y ahí ha estado durante muchos años.
Hay que decir que Aguirre ya ocupó en una ocasión la dirigencia local de la “asociación de las tres mentiras”, desde donde quiso ooooootra vez, buscar una candidatura a una diputación local.
De hecho si se ponen a pensarlo, queda claro que lo único para lo que Aguirre quiere la presidencia de la UPD es usarla como trampolín y ver qué partido voltea a verlo para un cargo de elección popular.
Ya dependerá de los socios de la “asociación de las tres mentiras” si quieren darle la oportunidad a Aguirre de usar las siglas del grupo para conseguir huesos políticos.
RETAZOS
Va un sincero y cariñoso abrazo para el compañero Ciro Andrés Ibarra, ex director editorial de La Tarde de Reynosa, por el sensible fallecimiento de su señor padre, el pasado mes de diciembre.
Este columnista le desea pronta resignación a Ciro y sus familiares por tan dolorosa pérdida.
Pasando a otros temas, la pasada conmemoración del Día del Periodista fue aprovechado por las diferentes fuerzas políticas para darse un agarrón y ver quién tiene el mayor poder de convocatoria.
Con aquello de que el ayuntamiento y el Gobierno del Estado no se quieren y cada vez que se miran se sacan la lengua, cada uno organizó su propio ágape para celebrar a los reporteros locales.
De acuerdo a los reportes que le llegaron al columnista, el saldo final de los festejos es un claro empate entre el Gobierno del Estado y el municipio, lo que suena bastante lógico considerando que la raza de los medios sabe aplicar muy bien aquella máxima de Juan Ramos: “A la gorra no hay quien le corra”.
Lo que también reportaron es que en esta ocasión la rifa de regalos estuvo bastante triste, encabritando a la raza.
Antes de acabar esta colaboración hay que comentar el escándalo que se ha armado allá por los rumbos de Tampico donde Esteban Paredes, reportero de la revista Vertical en Tampico, trae un pleito marca demonio con un grupo de regidores del ayuntamiento porteño.
Resulta que el comunicador fue denunciado penalmente por los ediles José Luis Ortiz López, Rodolfo Pizarro Ponce, Abel López Pacheco y Paloma González Carrasco por los delitos de amenazas y delitos cometidos en contra de servidores públicos.
Por si esto fuera poco, el comunicador también enfrenta una querella por daños a la presidencia municipal valuados en 3 mil 500 pesos, todo por un incidente registrado el pasado 31 de octubre de 2016.
Sin embargo, Paredes no sólo niega los delitos que se le imputan, sino que asegura que él fue el agredido, por lo que ya solicitó el apoyo tanto de la Procuraduría General de la República y la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.
Habrá que ver en qué acaba todo este escándalo que la verdad está comenzando a convertirse en una bola de nieve.
Y ahora la gustada pregunta de la quincena: ¿quién será el suertudo que se va a quedar con la Dirección de Comunicación Social de la Universidad Autónoma de Tamaulipas?