
El gobernador, Américo Villarreal Anaya, coordinó personalmente las tareas de rescate y la asistencia a los lesionados en la iglesia de la Santa Cruz, que colapsó en la colonia Unidad Nacional de ese municipio.
El mandatario estatal lamentó los sucesos ocurridos el domingo 1 de octubre en un parroquia del sur de la entidad, en la que lamentablemente hubo 10 personas fallecidas.
Durante el evento de “365 días contigo” en el Estadio Marte R. Gómez, el gobernador, Américo Villarreal Anaya, pidió guardar un minuto de silencio en memoria de las víctimas. Posteriormente anunció todo el apoyo del gobierno de Tamaulipas para las personas afectadas por el derrumbe.
“Al momento sabemos que hay personas fallecidas y varios heridos, por lo que desde aquí con una visión humanista y de solidaridad pedimos un minuto de silencio y para que cada quien desde su corazón eleve una oración por aquellos que hayan perdido la vida y a los heridos y sus familiares”, dijo.
Ese mismo día la primera autoridad en el estado se trasladó a Ciudad Madero para coordinar el rescate de personas.
Acompañado por el secretario general de Gobierno, Héctor Joel Villegas González; el coordinador estatal de Protección Civil, Luis Gerardo González de la Fuente y del alcalde de Madero, Adrián Oseguera, el gobernador Villarreal Anaya se puso al tanto de las maniobras realizadas por elementos militares y cuerpos de socorro de diversas dependencias.
Binomios caninos de la Cruz Roja Mexicana y de la Secretaría de Marina también se sumaron a las labores para hallar a personas atrapadas entre los escombros, además de dos células de paramédicos especializados en tareas de rescate de estructuras colapsadas.
APOYO CIUDADANO
El gobernador destacó la solidaridad de la ciudadanía en este hecho y el apoyo de las Fuerzas Armadas, ya que se aplicó el Plan DN III, aunado a que se pusieron a disposición todas las unidades hospitalarias y se contó con el apoyo de empresarios que aportaron maquinaria pesada y vehículos.
Para los familiares de los fallecidos, así como los heridos, el mandatario estatal, reiteró su completa comprensión y ayuda.
“Tienen toda nuestra solidaridad, cuentan con todo el apoyo del Gobierno del Estado en este momento tan difícil de un evento sorpresivo y trágico y estaremos muy atentos de lo que podamos estar apoyándolos y cuentan incondicionalmente con el apoyo del Estado de Tamaulipas”, señaló.
En entrevista con los medios de comunicación, Villarreal Anaya confirmó el lamentable deceso de 10 personas, tres de ellas menores de edad y además señaló que 60 feligreses ameritaron atención hospitalaria, quedando 23 personas con lesiones, de las cuales dos estaban en condiciones graves. Al paso de los días fue declarado otro deceso con relación a este suceso.
Las autoridades utilizaron cámaras térmicas como método para descartar más personas entre los escombros. La ciudadanía agradeció la pronta respuesta del gobierno de Tamaulipas, de lo contrario la cifra de fallecidos pudo haber sido mayor.
El gobierno del Estado anunció que una vez terminadas las labores de rescate y remoción de escombros se hará una investigación con peritos especializados en obra civil y pública correspondiente a una construcción con medio siglo de antigüedad.
Y anunció que las estructuras de centros religiosos tendrán que ser inspeccionadas para evitar este tipo de incidentes. v