• Saltar a la navegación principal
  • Saltar al contenido principal
  • Saltar a la barra lateral primaria
  • Saltar al pie de página

Edición Impresa

Hora Cero Tamaulipas

Hora Cero Tamaulipas

Periódico con las noticias mas relevantes de los sucesos en Tamaulipas

  • Local
  • Regional
  • Nacional
  • Internacional
  • Deportes
  • Espectáculos

Forjando su propia historia

3 de octubre de 2017 por Gerardo Ramos Minor

Cualquiera pensaría que ser hijo de un ex gobernador y actual senador de la República automáticamente significa tener la vida arreglada. Miguel Cavazos Guerrero, vástago de Manuel Cavazos Lerma, es la prueba viviente de que se puede elegir que no sea así.
Su infancia transcurrió muy cerca del poder, en el interior de la Casa de Gobierno de Tamaulipas donde, recuerda, aprendió la importancia de trabajar para conseguir lo que deseaba.
Fue así como en compañía de sus hermanos inició un negocio de venta de quesos y productos lácteos aprovechando que había algunas vacas al interior de la residencia oficial.
Curiosamente los clientes exclusivos del incipiente negocio eran los integrantes del equipo de seguridad de su padre y los miembros del gabinete estatal.
Esta circunstancia le dio al niño su primera lección en lo que sería su vida profesional: nunca confiar en la honestidad de un político pues, recuerda, el queso que inauguró el negocio sabía horrible, pero aún así ganó los elogios de los colaboradores de su padre.
Al final la empresa duraría muy poco, pues un día una vaca se escapó del establo y logró abrirse paso hasta el exclusivo Club Campestre de Ciudad Victoria donde causó algunos daños. Correspondió al pequeño Miguel tomar un lazo e ir a recoger a su animal, que de inmediato fue enviado a un rancho cercano.
Desde entonces Miguel aprendió a trabajar para conseguir sus metas, siempre solo pues aunque su padre lo vigilaba desde la distancia, nunca se involucró para hacerle las cosas más sencillas.
“Él (mi padre) siempre ha sido un gran ejemplo, independientemente de la admiración, el cariño, el respeto que puedo tener por él, ha sido un ejemplo de superación, ha sido un ejemplo de liderazgo, pero sobre todo de amor al servicio y él me ha enseñado muchas cosas.
“Siempre ha dicho que ‘si quieres que tus hijos vuelen, no les quites el aire en contra’ y esto ha permitido que yo en la vida pueda siempre saber y tomar las decisiones por
mí mismo”, expresó.
La estrategia no ha salido tan mal, pues gracias a su empeño el joven político logró ocupar la dirigencia estatal del Frente Juvenil Revolucionario, la organización que aglutina a los noveles priistas.
Ese acercamiento con el priismo juvenil no fue sencillo para Miguel, pues de entrada se topó con la apatía de algunos sectores que le enseñaron que la política tiene que ser atractiva para la sociedad.
“Cuando yo estuve en el Frente Juvenil Revolucionario me enfrenté a la apatía, me enfrenté a condiciones diferentes, sin redes sociales, sin una agilidad de la información como sucede hoy, pero de alguna u otra manera me encontré con muchos jóvenes que están dentro del partido, que quieren al partido, que creen en el partido, que sueñan con un partido y un país mejor”, sentenció.
Este cargo también le enseñó la importancia del sacrificio y el compromiso que representa contar con una posición de esta envergadura.
“Estar en el Frente Juvenil fue una etapa de mucho sacrificio en mi vida personal. Yo estudiaba en la Ciudad de México y trabajaba en el Frente Juvenil -que estaba en Ciudad Victoria-, los jueves, viernes, sábado y domingo, entonces no había fiestas, no había descanso, no había muchas cosas que un
joven tiene que vivir.
“Viajaba en autobús todas las semanas sin ninguna excepción. Los jueves en la noche salía de México a Ciudad Victoria, viajaba toda la noche y todo el viernes, todo el sábado, todo el domingo me la pasaba de gira o en la oficina y el domingo en la noche viajaba a la Ciudad de México para llegar a clase de siete de la mañana y eso era todas las semanas”, recordó.
Contrario a lo que cualquiera pensaría, estas condiciones tenían que darse puesto que el organismo priista solo contaba con un presupuesto de 10 mil pesos mensuales, que apenas alcanzaban para pagar los gastos de la oficina y organizar algunos eventos.
Y aunque la tentación siempre estuvo presente, Miguel nunca decidió tomar el teléfono y llamarle a su padre para pedirle que moviera sus influencias y lo colocara en alguna posición política.
“Siempre he tratado de tomar el camino de mayor resistencia para poder consolidarme, en ese sentido a lo mejor hubiera sido muy fácil no estar en el Frente Juvenil, que el señor levantara la mano y dijera: ‘mi hijo quiere ser diputado’”, manifestó.
De hecho, la ausencia de su padre en mucha de la carrera política y profesional de Miguel fue algo planeado, aunque ello significara
que no estuvieran juntos en varios momentos importantes de su vida.
“Cuando yo fui dirigente del Frente Juvenil él no fue a mi toma de protesta. No se enteró que yo era dirigente. Estuvo seis meses fuera del país y cuando regresó y se enteró no me dijo nada. Se que el día de mañana si levanto el teléfono él va a estar ahí, pero bendito sea Dios, no lo he necesitado”, aclaró.

SU VIDA EN EL SERVICIO PÚBLICO
Su perseverancia lo llevó a ingresar al servicio público, sin embargo no lo hizo con los grandes cargos -su primer empleo fue el de Coordinador de Participación Ciudadana de Sedesol en Tamaulipas, un puesto de nivel medio-, algo que poco a poco le fue dando resultados.
Fue así como desde hace cuatro años está al frente de la delegación estatal del Programa Prospera, el programa de inclusión social del gobierno federal que contempla una serie de apoyos económicos para las clases necesitadas.
Indicó que además de la experiencia, este empleo lo ha sensibilizado sobre la importancia que tiene el trabajar en una oficina gubernamental y la diferencia que puede hacer en la vida de las personas.
“Vas a estos eventos, escuchas estas historias, platicas con la gente y te das cuenta que vale la pena, te das cuenta que estás haciendo algo para mejorar la condición de una familia y con ello estás mejorando la condición de la colonia, del municipio, del Estado y del país y aunque suene muy idealista se sensibiliza mucho uno cuando está en esto”, indicó.
Explicó que una de sus mayores satisfacciones es encabezar un equipo de trabajo donde todos están comprometidos con su labor.
“Cuando llegamos al programa no corrimos a nadie. La gente que estaba por el dinero se fue yendo sola y fueron llegando personas que les gustaba servir y ayudar pues es un programa donde la gente gana muy poco y trabaja mucho, entonces no cualquiera aguanta. Quien no tiene vocación para servir, no dura en el programa”, manifestó.

UN CHARRO CAMPEÓN
Paralelo a su carrera en la política y el servicio público, Miguel ha sobresalido en el deporte más mexicano de todos: la charrería, donde ha conseguido campeonatos nacionales en todas las categorías, desde infantil hasta adulto.
Llegar a estos niveles no fue sencillo, requirieron horas y horas de entrenamiento que al final rindieron frutos.
Aseguró que el practicar la charrería no sólo le ha dado grandes satisfacciones en lo personal, sino también lo han ayudado a su vida dentro del servicio público y la política.
“De entrada he conocido a muchísima gente por el medio, te abre muchas puertas, pero lo más importante es que la relación con el caballo es muy similar a una relación humana y a lo mejor habrá quien critique esta parte, pero la relación con el caballo tiene niveles de liderazgo y necesitas tener un liderazgo donde se gana con sensibilidad, tienen que tener la capacidad de poder convencer al caballo para poder educarlo, sea cual sea la suerte y eso a mí me ayuda mucho”, expresó.
Pero además de los trofeos, la charrería le ha dado a Miguel la oportunidad de invertir en un negocio que ya es reconocido a nivel nacional: la crianza de caballos.
Lo que más lo enorgullece, es que esta empresa la creó con sus propias manos, sin ayuda de nadie.
“Mucha gente piensa que yo la tenía muy fácil, que sólo tenía que estirar la mano y no, mi negocio de los caballos fue un negocio que fue creciendo y hoy está consolidado, es un criadero importante en este país. De ahí rasguñaba cuando podía y hoy me siento muy contento con todo, porque el tener la necesidad hizo que emprendiera una empresa que ha sido dos veces el criador del año, que ha tenido al caballo del año y todo eso se dio gracias a que tuvimos necesidad”, sentenció.

SUS ASPIRACIONES
Aunque nunca ha recibido el apoyo de su padre para avanzar en su carrera política, existen personas que han visto en Miguel una opción válida para un escaño en el Congreso Local o, más recientemente, la Cámara de Diputados a nivel federal.
Acerca de sus aspiraciones, aseguró que siempre ha deseado contender en un proceso electoral y poder estar en una posición donde pueda ayudar a una cantidad mayor de personas.
“Claro que me gustaría, lo he soñado desde niño y he soñado con la posibilidad de servir y servir a mi gente, hoy creo que tengo una posibilidad bien bonita desde el programa donde estoy de poder ayudarle a mucha gente y poder regresarle a la comunidad un poquito a través del servicio y a través de un trabajo bien noble como lo es el programa en el cual estoy, pero también viene otra parte formativa importante que tiene que ver con el trabajo legislativo”.
Indicó que todo el trabajo que ha realizado desde los años en el Frente Juvenil Revolucionario lo han ayudado a prepararse para, llegado el momento, poder servir con eficacia desde un cargo de elección popular.
“Yo creo que todo tiene un tiempo en esta vida. Creo que el proceso formativo de una persona tiene que vivirse a plenitud, sobre todo la parte de poder educarte en esto para poder servir mejor y servir con calidad.
“Yo tengo el monte muy alto porque considero que mi papá fue extremadamente bueno en lo que hizo, como todos, tiene defectos y yo como hijo tengo que hablar de sus virtudes y de alguna u otra manera yo quería vivir esa parte formativa”, expresó.
Reconoció que su partido, el PRI de Tamaulipas, vive un momento trascendental donde no sólo tiene el gran reto de hacer click con la juventud, sino mantenerse unido para volver a ganar la confianza de los electores.
“En el rancho dicen que para atrás ni para agarrar vuelo, yo creo que es momento de demostrar por qué somos la mejor opción.
“Es un momento de unidad, es un momento de no pensar en intereses personales, es un momento para pensar que hoy necesitamos de todos, hoy es momento de estar juntos, de trabajar con objetivos muy claros y de saber cada paso bueno que podemos dar los que estamos en el servicio público es abonar para que la gente vuelva a creer en el partido que representamos”, sentenció.
Y aunque está listo para ofrecer su experiencia y entusiasmo al servicio del PRI en las próximas elecciones, en caso de ser convocado, también está listo para no ser candidato en el 2018 pues, después de todo, con los años ha aprendido que la paciencia es una cualidad y a todos les llega su momento.

Busca más noticias

Síguenos en:

  • Facebook
  • Instagram
  • Pinterest
  • Twitter
  • Youtube

Infonavit 2.0

Martha Teresa Reséndez

Destaca México en el G7

Fortino Cisneros Calzada

Los riesgos de la democracia judicial

Neptuno

¡En esta esquinaaa…!

El Apuntador

Archivado bajo: Nacional

Barra lateral primaria

Footer

Sitios de Interés

  • El Universal
  • Diario Milenio
  • El Mañana de Nuevo Laredo
  • El Diario de Laredo
  • El Norte
  • La Jornada
  • En Río Bravo
  • La Prensa

Nuestros Sitios

  • Hora Cero Web
  • Hora Cero Tamaulipas
  • Hora Cero Encuestas
  • Hora Cero Nuevo León
  • Revista TOP
  • Revista Doctors

Hora Cero Tamaulipas · Derechos Reservados 2020 ©

Síguenos en:

  • Facebook
  • Instagram
  • Pinterest
  • Twitter
  • Youtube

Periódico líder en información y noticias de hoy: política, cultura, espectáculos y más del Estado de Tamaulipas

  • Local
  • Regional
  • Nacional
  • Internacional
  • Deportes
  • Espectáculos
  • Vida y Cultura