
Por Rafael Martínez
Con el paso de los años la solicitud de los adolescentes al cumplir 15 años o la mayoría de edad va cambiando, primero era necesario solicitar permiso para tener novio, con el paso de los años el consentimiento para hacerse un piercing o un tatuaje. Ahora, la moda es una cirugía estética.
Si bien es cierto que muchos cirujanos advierten de los problemas de realizar un procedimiento a mujeres menores de 17 años, cada vez la solicitud de una rinoplastia (cirugía de la nariz), liposucción, reducción de mamas, aumento de mamas (implantes mamarios) y ocasionalmente otoplastía (cirugía de las orejas) va en aumento.
Sin embargo, los hombres no se quedan atrás pues ocupan el 20 por ciento de las estadísticas. En especial buscando un aumento de glúteos y liposucción para marcar el “six pack”.
El sentido de pertenencia ocasiona que el sueño para muchas féminas sea el poder presumir de unos senos tersos y firmes que hagan de un inocente escote un atractivo irresistible para quien las voltee a ver.
Desafortunadamente muchas mujeres al mirarse al espejo no se encuentran a gusto con la delantera que la madre naturaleza les dio y buscan la solución artificial.
Aunque hoy en día, los pechos exagerados ya no son moda, el aumento de pecho sigue siendo una de las operaciones estéticas más demandadas en Reynosa.
Años atrás la gran parte de las mujeres exigía resultados exagerados y en ocasiones artificiales al estilo Ninel Conde o Sabrina Sabrok. No obstante, hoy en día, la tendencia son los resultados naturales, más armónicos, elegantes y que permitan la duda de saber si están operados o son naturales.
Pero el problema no es solo verse mejor, advierte la psicóloga, Margarita Muzquiz Cigarroa.
“La necesidad de que sean aceptadas es un factor determinante pues al momento que se sienten rechazadas y no pueden cambiar su situación buscan otra alternativa”, indicó.
Mientras que el cirujano plástico y director general de Laser Clinic, Raúl López Castillo, asegura que los riesgos de caer en las manos de un pseudo cirujano les podría costar la vida y en el menor de los casos la necesidad de extirpar piel y carne del cuerpo humano.
UNA INVERSION
Un buen procedimiento (dependiendo de lo que quieran operarse) puede ir de los 86 mil hasta los 153 mil pesos. Claro, dependerá del cirujano, la experiencia y el reconocimiento, así como el lugar donde se realice el procedimiento.
“La recomendación es que cuando alguien viene a una consulta y pide una liposucción se haga en las áreas que le afectan, desde panza, derrier, cintura y cadera” expresó López Castillo.
Indica que el costo promedio puede variar dependiendo el grado de dificultad y del resultado a obtener.
Generalmente una liposucción para hombre ronda en los 7 mil dólares (126 mil pesos), mientras que para una mujer puede alcanzar los 8 mil 500 dólares (153 mil pesos).
Para aumentar las mamas se tienen que de-
sembolsar unos 4 mil 800 dólares (86 mil pesos), mientras que el aumento de glúteos a través de la lipoinyección cuesta unos 600 dólares (11 mil pesos), esto luego de cubrir el procedimiento completamente.
“Para una liposucción se recomienda que se haga después de los 17 años ya que su estructura esté totalmente definida” resalta.
QUINCEAÑERAS ‘DESARROLLADAS’
La operación de busto generalmente es socorrida por tres tipos de personas, las primeras son jovencitas de los 17 a los 25 años, el segundo grupo es de los 35 en adelante, mientras que el tercero son hombres en busca de convertirse en mujer.
“Muchas mujeres se operan antes de ser madres para ganar volumen, mientras que las otras lo hacen para eliminar el busto caído”
El incremento de busto varía dependiendo de la complexión de la solicitante, pero por lo general aquellas que son copa “A” buscan convertirse en una Copa “C” e incluso hasta “D”.
“No siempre se puede poner lo que el paciente quiere, en ocasiones es mucho lo que solicitan pero durante la primer cirugía se puede incrementar hasta dos tallas y media”
En muchas personas existe una obsesión por mantener la belleza y la juventud, lo que convirtió a muchos doctores en pseudo cirujanos para aprovecharse de los pacientes al distribuir sustancias nocivas para el organismo, que tarde o temprano conducen a enfermedades, complicaciones, rechazo y la muerte.
Indicó que en Reynosa cada día se suman más casos de deformidades corporales y complicaciones que amenazan la vida a consecuencia de la aplicación de biopolímeros para mejorar esa zona del cuerpo convertida en blanco de inconformidad.
“Hemos tenido que hacer correcciones en mujeres que se inyectaron biopolímeros, sustancia autorizada en Brasil para el tratamiento de las personas con SIDA por la pérdida de volumen a raíz de tomar antivirales”.
Indicó que algunos médicos aprovecharon esa autorización para usarlo con personas para aumentar glúteos, mamas y otros lugares del cuerpo.
“El problema surgía en ciertas personas inmediatamente, en otros a corto tiempo que terminaban con la necesidad de retraer la sustancia”.
Los biopolímeros al ser un cuerpo extraño, cuando se inyectan el organismo suelen responder de una manera diferente, puesto que es como si se estuviese atacando al cuerpo.
“El sistema inmunológico está activo todo el tiempo, lo rechaza y los pacientes desarrollan una enfermedad inmunológica, procesos infecciosos, dolor, inflamación”.
Asegura que la diferencia con los implantes, que también son cuerpos extraños, es que están envueltos con una membrana y si hay algún problema, se saca completo sin que el líquido
se distribuya por todo el cuerpo del paciente.
En cuanto a la existencia de un tratamiento para extirpar del todo esta sustancia, el médico cirujano aclaró que no, sin embargo, sí se puede retirar una gran parte de ella.
Resalta que la comodidad y el costo influyen mucho ya que la sustancia es mucho más económica a realizar la colocación de una prótesis.
“Existen médicos que hacen cirugía plástica sin haber estudiado, pues es una carrera como pediatría, cirugía general, neurocirugía, entre otras”
Es decir, que primero se debe aplicar para un examen y competir para hacer la especialidad a su elección.
“En el caso de cirugía plástica se hacen tres años de cirugía general y después otros tres de cirugía plástica”, explicó.
Manifiesta que si no se tiene este entrenamiento y alguien toma un curso por Internet
difícilmente podrá contar con la credibilidad para hacer algún procedimiento.
“Hay una Asociación Mexicana de Cirugía Plástica donde se dan a conocer los nombres de aquellos médicos certificados y actualizados en la materia”, dijo.
Ya que en repetidas ocasiones ha tenido que solucionar procedimientos mal elaborados por pseudo cirujanos.
LO BARATO SALE CARO
A lo largo de años se han presentado varios decesos por cirugías mal elaboradas mientras que las más afortunadas terminaron con procedimientos mal hechos por personas inexpertas al no contar con los estudios necesarios.
En abril del 2012, la regidora del Partido
Acción Nacional en el municipio de Reynosa, Ana María Zamarripa Mondragón, perdió la vida durante una operación de cirugía estética en una clínica de la Ciudad de México.
La información que se propagó por las redes sociales conmocionó a los reynosenses.
En febrero del 2014 Hora Cero publicó una investigación derivada del caso contra el ginecólogo Antonio Hernández Romero por practicarle a Jessica (nombre ficticio) una liposucción para eliminar la grasa de su abdomen, brazos y piernas.
En noviembre de 2011 la afectada presentó una denuncia ante la Agencia del Ministerio Público por negligencia y usurpación de funciones médicas.
De ahí se desprendió el expediente 241/2012 que se mantiene reservado en el Juzgado Segundo de lo Penal.
En los registros de la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Coepris) de Reynosa, el doctor Antonio Hernández Romero esta dado de alta para la obtención de la licencia sanitaria como ginecólogo, no como cirujano estético.
En el 2014 el titular de la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Coepris) de Reynosa, Armando Covarrubias Treviño, explicó que uno de los fraudes más comunes a la salud es que los médicos tengan una preparación profesional
Y es que en los registros de la Coepris en aquel entonces, el doctor Antonio Hernández Romero únicamente contaba con la licencia como ginecólogo.
El dictamen salió a favor del ginecólogo por no existir pruebas suficientes.
NECESIDAD DE ACEPTACION
La necesidad de aceptación ante un grupo de amigos, en el trabajo o simplemente por encajar en la sociedad, son las causas del porqué las mujeres y hombres acuden con el bisturí.
Ante todas estas preguntas, un nuevo estudio a largo plazo realizado en Europa ha investigado los efectos psicológicos de la cirugía estética en aproximadamente 550 pacientes descubriendo que la mayoría de los pacientes afirman un mayor disfrute de la vida, mayor satisfacción y autoestima tras haber “alterado” su aspecto físico mediante cirugía.
“La mayoría de los adolescentes buscan hacerse una cirugía plástica porque quieren verse mejor y elevar su autoestima. Es necesario que si tu hijo(a) adolescente está considerando este tipo de cirugía lo busque por él o ella misma y no por satisfacer los deseos de alguien más”, resalta la psicóloga, Margarita Múzquiz Cigarroa.
Dice que no es un secreto que durante la adolescencia la presión por partes de amigos o los novios, donde incluso el deseo de parecerse a un artista o famosa de la televisión les permitirá abrirse puertas.
Muzquiz Cigarroa menciona que puede ser que la cirugía no cumpla con sus expectativas y es necesario enfrentar esto.
“Lo mejor es elegir a un médico que tenga las credenciales y la experiencia en este tipo de operaciones. Su profesionalismo es indispensable para que la cirugía y la recuperación sean un éxito”, dijo.
La psicóloga aclara que el tener una buena apariencia física no lo es todo en la vida, aunque ayuda.
“Lamentablemente en esta época en que la belleza física es tan importante, lo mejor es que aprendas a crecer interiormente y a cultivar tus cualidades para ser una buena persona”, concluyó.