Estaba un día El Apuntador viendo cómo si iPhone 7 (¿qué, todavía no lo tienen?) no dejaba de vibrar por todas las notificaciones que le están llegando del chat de WhatsApp “Medios” que los reporteros de Reynosa tienen activado.
Porque no están ustedes para saberlo, pero nosotros sí para contarlo, queridos lectores, pero desde hace ya bastantito tiempo opera en esta frontera el grupo de comunicación interna por la popular aplicación móvil entre los representantes de los medios.
Por lo general este grupo funciona para avisarse de eventos, alertar a la raza que tal o cual funcionario va a ofrecer una conferencia de prensa y otros asuntos prácticos para el buen desempeño periodístico en tierras caleras.
En honor a la verdad “Medios” no es el único grupo que existe, también está el de “Corresponsales”, el de “Puntos Rojos” y otro que es tan, pero tan VIP, que ni siquiera estamos autorizados para decirles su nombre.
De cuando en cuando este chat de WhatsApp sirve de foro para echar chisme sobre los asuntos más relevantes de la talacha diaria… hagan de cuenta que es como una especie de Caja de Pandora pero con celulares.
Entre los temas más controvertidos que se han tratado en este chat está, por ejemplo, la indignación de algunos compañeros cuando en este infame espacio se mencionó todo el incidente del despido de Javier Izaguirre de Cablecom y cómo quiso picarle los ojos a la raza intentando hacerles creer que lo habían invitado a trabajar en La Tarde de Reynosa… lo que, insistimos, es totalmente falso.
Durante un buen rato este chat estuvo plagado de todo tipo de epítetos y descalificaciones en contra de este columnista, al que acusaban de haberse excedido en sus comentarios en contra del “pobrecito” de Izaguirre.
Pues bien, hace un par de días el chat volvió a arder con las quejas de la raza pero ahora en contra de las titulares de Comunicación Social del Ayuntamiento y el DIF: Patricia Ortiz (ya está muy grandecita para que le digan Paty ¿no creen?) y Sandra Tovar.
En un ratito, las orgullosas líderes del auto llamado “Club de Lulú” (antes conocido como “Las Chicas Superpoderosas”, antes conocido como… la verdad es que le han puesto tantos nombres que la verdad ya da flojera
recordarlos todos), pasaron de ser las mujeres más populares del pueblo, a las más odiadas y todo por un evento que fue encabezado por la dirigencia nacional del Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia.
Pero vamos por partes, como diría Jack el Destripador. Ahí tienen que el Parque Cultural de Reynosa iba a recibir a la plana mayor del DIF Nacional para un evento sobre niños migrantes.
Como puede esperarse, un evento de este tamaño es coordinador por el Estado Mayor Presidencial, quien se apoya en el Gobierno del Estado y el Ayuntamiento de Reynosa que son los que tienen la lista de los medios acreditables para cubrir la nota.
Hace tiempo cada vez que había una gira de este tipo, los editores y reporteros de los medios locales recibían una llamada de Carlos Peña, quien estaba encargado de coordinarse con la prensa local para preguntar quién iba a cubrir el evento.
Hasta ahí las cosas funcionaban de peluche… sin embargo un día Carlos Peña salió de la administración municipal y llegaron Patricia Ortiz y Sandra Tovar.
Desde que este par está encargado de las relaciones del Ayuntamiento con la prensa, se acabaron las alertas sobre eventos de importancia para la raza reporteril… bueno, para decir la verdad, los anuncios no se acabaron, sólo que ahora llegan a un selecto grupo de “favoritos”.
El problema es que en esta ocasión muchos compañeros se enteraron que iba a haber un evento del DIF en el Parque Cultural y cuando llegaron intentando cubrir el evento, fueron literalmente corridos por el Estado Mayor Presidencial.
Como era de esperarse apenas sucedió esto y la raza de los medios buscó un culpable y no encontró otra que Patricia Ortiz, a quien acusaron de haber privilegiado a sus amigas con las acreditaciones para el evento.
Tan violentos estuvieron los reclamos, que hasta Javier Izaguirre redactó (hay que llamar de alguna forma los golpes que le da a los teclados de su compu), una virulenta nota en contra de Ortiz en un portal de Internet que administra.
Por supuesto que Ortiz intentó quitarse la culpa asegurando que ella no estuvo a cargo de las acreditaciones, que todo fue culpa del Estado Mayor Presidencial y el Gobierno del Estado.
Incluso subió a su perfil de Facebook una lacrimógena nota donde se queja que la hayan convertido en la villana de este cuento.
Y aunque en cierta forma Ortiz tiene razón, tampoco puede negar que tanto el Estado Mayor Presidencial como el Gobierno del Estado se apoyan en lo que ella les dice sobre quién puede entrar a este tipo de eventos oficiales y quien no, después de todo ella es la responsable de la relación de los medios de comunicación con el ayuntamiento, una chamba que tiene que realizar sin ningún distingo o preferencias hacia sus amigas y comadres.
Pues bien, durante varias horas la raza de los medios aprovechó esta coyuntura para desquitar todas sus frustraciones contra Patricia, a quien ya están echando la culpa de todo, desde que no los invita a los eventos oficiales, hasta que no han pagado las facturas de los convenios personales que el ayuntamiento tiene con algunos reporteros en la cuidad.
¿Y dónde cabe Sandra Tovar en todo esto? Se han de preguntar más de dos compañeros. Pues es muy sencillo, ella fue una de las que también anduvo “palomeando” raza para el citado evento.
Nomás como ejemplo está lo que le dijo a su compañero Iván Moyle en El Mañana de Reynosa, a quien le advirtió un día antes que “ni se parara en el evento” pues no iba a haber acceso para nadie.
Hay quienes andan muy sacados de onda con el hecho de que Sandra es la jefa de Prensa de el DIF municipal pero al mismo tiempo es reportera de El Mañana de Reynosa, lo que para algunos podría ser considerado como un conflicto de intereses.
Sin embargo la discusión se acaba con un argumento muy sencillo: Sandra puede ejercer los dos puestos porque sus jefes tanto en El Mañana como en el ayuntamiento se lo permiten y están de acuerdo.
Por lo tanto la gente puede decir misa, pero si Sandra tiene permiso de andar sirviendo a dos amos, nadie puede hacer algo por evitarlo.
Queremos concluir este largo comentario con una reflexión: Ser jefe de Comunicación Social de un ayuntamiento o una dependencia pública es un cargo muy delicado que debe de ser ejercido con el mayor tacto posible.
Quien llegue a una posición de este tipo tiene que comprender que es un funcionario público y por lo tanto está obligado por la ley para ejercer con imparcialidad y sin favoritismos su labor.
Desgraciadamente “El Club de Lulú” está haciendo exactamente lo contrario y lo que es peor: están usando el puesto para desquitarse de todos aquellos que ellas creen que son sus enemigos… aunque éstos ni en el mundo las hagan.
SIGUE EL MARIDAJE PERVERSO
¿Recuerdan que en la pasada entrega les comentábamos el curioso fenómeno que se vive cada vez que se acerca un proceso electoral y algunos reporteros y políticos se unen en un perverso maridaje que busca beneficiar la imagen personal de un aspirante a un cargo de elección popular?
Pues bien, hay que decir que el que está ejecutando a la perfección esta práctica que pone en entredicho todos los fundamentos éticos que deben de regular esta actividad, es el corresponsal de El Universal en Reynosa, Julio Guzmán Loya.
De un tiempo a la fecha Julio ha estado entregado en cuerpo y alma al proyecto económico del ex alcalde de Reynosa, Francisco García Cabeza de Vaca, quien muere por un día convertirse en candidato del PAN al gobierno del Estado.
Y quizás haya quien pueda decir que eso no tiene nada de malo, que todos los ciudadanos, incluyendo los reporteros, son libres de comulgar con la fuerza política que se les de su regalada gana.
Lo que no es vale, es que un reportero como Julio, quien además representa en Tamaulipas a un medio tan importante como El Universal, mienta de forma descarada e impune con tal de no sólo beneficiar a su jefe político, sino perjudicar a sus contrincantes.
Un ejemplo de esta actitud se dio hace apenas unos días, en la ceremonia de inauguración del puente internacional ferroviario que une a Matamoros, Tamaulipas, con Brownsville, Texas.
Ahí tienen que en este evento estuvo presente la alcaldesa de Matamoros, Leticia Salazar Vázquez, quien para algunos tiene los tamaños suficientes para convertirse en la próxima candidata del PAN al gobierno del Estado.
Que Lety sea considerada como una aspirante con posibilidades para ganar la candidatura, enferma de sobremanera a Cabeza de Vaca, quien ordenó a su lacayo periodístico que omitiera mencionar en su crónica del evento del puente que la alcaldesa estuvo ahí.
Es cierto, si buscan la nota de El Universal, van a darse cuenta que Leticia Salazar no existe, es más, que Matamoros no tiene autoridad municipal.
Y no vayan a creer que esta es la primera vez que sucede, en otras ocasiones Julio ha emprendido verdaderas campañitas en contra de la alcaldesa matamorense aprovechando que sus jefes en El Universal le tienen plena confianza de que está actuando con ética y honestidad en esta frontera.
Otros que andan jugando el juego del maridaje político, al menos en las redes sociales, son los compañeros de la Unión de Periodistas Democráticos en Reynosa, también conocida como la organización de las tres mentiras (neta raza, el chiste se cuenta solo).
A diferencia de Julio, que trae tatuado a Cabeza de Vaca en lo más profundo de su ser, la raza de la UPD son mucho más democráticos con respecto a los candidatos a los que les andan echando la mano.
Basta ver las redes sociales de la UPD en Reynosa para darnos cuenta que un día le echan porras a un panista, como otro a un priista o quizás otro panista completamente diferente.
Y conste que no estamos hablando de notas informativas, ellos comparten toda la promoción que estos candidatos se hacen en las redes sociales.
Por lo menos son plurales a la hora de andar candidateando a tal o cual personaje a un cargo de elección popular.
RETAZOS
Pasando a otros temas debemos de comentar la tristeza que ha invadido a los compañeros reporteros de la tierra de Rigo Tovar por el sensible y trágico fallecimiento de José Alfredo Fernández Cárdenas, mejor conocido entre la raza como el Súper Cuate.
No vale la pena entrar en detalles respecto a la forma en la que el Súper Cuate perdió la vida, lo que hay que decir es que nadie de los compañeros reporteros pudo mostrarse insensible por la pérdida de este gran amigo.
Hoy que ya no está con nosotros, todos van a extrañar su alegría, su afición por todo lo relacionado con Superman y la forma en la que apenas agarraba el micrófono de un karaoke, ya todos sabían que no lo iba a soltar en toda la noche.
El Súper Cuate duró muchos años en los rumbos de Canal 12 para posteriormente pasar a las filas de El Bravo, donde laboró hasta el día de su fallecimiento.
Sin embargo y como no podía quedarse quieto, durante mucho tiempo también fue maestro en la Universidad de Matamoros, ayudando a formar nuevas generaciones de periodistas, muchos de los cuales aún siguen en la calle dándole a la talacha diaria.
Hay que decir que el sepelio del Súper Cuate fue muy emotivo, con decenas de sus amigos portando la camiseta de Superman además de la música de una banda sinaloense, que era el género preferido de José Alfredo.
Descansa en paz Súper Cuate, todos en Matamoros te vamos a extrañar aunque sabemos que pronto, muy pronto, nos volveremos a encontrar.
Pasando a otras cosas donde de plano quién sabe en qué están pensando es en la Departamento Web de El Mañana de Reynosa, donde de plano se están pasando por el arco de el triunfo todo tipo de reglas con tal de ganarse el rating facilón.
Ahí tienen que a la fecha, con tal de hacer ruido en las redes sociales, son capaces de subir una nota de una parejitas de novios que fue detenida por la Policía por estarse besando dentro de un vehículo estacionado o de dos estudiantes menores de edad arrestados por estar fumando marihuana.
Lo triste de eso es darnos cuenta el bajón que le dan a la calidad de las notas que El Mañana web le ofrece a sus lectores de su edición digital, pues parece que en Reynosa no hay cosas más importantes qué informar en la sección policiaca que unos novios detenidos o unos estudiantes pachecos.
El problema aquí es que se pueden meter en un problema legal, pues por ejemplo en la nota de los estudiantes están publicando la fotografía y el nombre completo de uno de ellos sin importar que se trata de un menor de edad, lo que sabemos, está penado por la ley.
Además, este tipo de notas para lo único que sirven es para alimentar el morbo de algunas personas, por lo que pueden ser perfectamente ignoradas, a menos de que estés tan hambriento de “likes” que estés dispuesto a destruir reputaciones a punta de periodicazos.
Pero bueno, ya no le seguimos porque nos da coraje… es más, andamos tan enojados que ni siquiera les vamos a poner pregunta de la quincena.