
El espíritu de los niños campeones de 1997, que este día cumplieron 15 años del último título de México en una Serie Mundial, rondó por el estadio Howard Lamade pero no fue suficiente y la Liga Agua Dulce de Panamá terminó por darle a los niños de la Liga Oriente un “trago amargo” al derrotarlos 2-1 en un gran partido de beisbol en el que hubo 23 ponches.
Un cuadrangular de James González en la primera entrada puso a Panamá arriba 2-0 y luego Edisson González se encargó de mantener dominada a la fuerte artillería de México para con ello avanzar a la final Internacional, donde se verán la cara con Japón el próximo sábado-
Por el otro lado, Ramón Ballina estuvo igual o mejor que González, pues en seis entradas completas permitió cinco hits y ponchó a 12 para sufrir una dolorosa derrota. México tuvo corredor en segunda con dos outs en la última entrada, pero Edisson metió el brazo para terminar a tambor batiente con un chocolate sobre Andrés Carrillo.
Fue un partido emocionante que tuvo a 12 mil 950 aficionados al filo de la butaca una hora con 42 minutos. El único error de Ballina fue dejarle una curva en el centro del plato a González, quien encontró corredor en segunda base. Ningún otro corredor de Panamá pudo alcanzar la tercera base.
México, que entró al partido como líder de jonrones, carreras anotadas, hits y total de bases alcanzadas, no pudo descifrar los lanzamientos de Edisson González, quien con una recta de 71 millas y una curva dormilona los trajo por la calle de la amargura todo el encuentro.
Una amenaza vino en la tercera entrada cuando Andrés Santos se embasó en infield hit. En esa jugada el catcher hizo un tiro malo a primera, pero Santos tropezó y no pudo alcanzar una base extra. Los dos siguiente bateadores se poncharon.
En la quinta, Eduardo Abrego conectó doblete con un out y Marcelo Pérez siguió con sencillo para producir la única carrera del conjunto tricolor. La sexta empezó favorable para México, ya que el emergente Juan Rodríguez abrió con sencillo al izquierdo. Cuando se esperaba la orden de toque para Omar Cervantes se mantuvo el bateo libre y el resultado fue un ponche. Ramón Ballina vino a batear y rodó por el short, forzando en segundo a su compañero. La última esperanza estaba en el bat de Andrés Carrillo, quien fue chocolateado para el out 18.
“Se hizo todo lo que se pudo, fue un partido muy difícil”, dijo César Mata, el coach de México que tuvo que dirigir porque el manager Fernando Ríos fue suspendido dos juegos por cuestiones de reglamento.
Los padres de familia estaban tristes, pero satisfechos porque sus hijos hicieron un gran esfuerzo luego de perder el primero partido ante Canadá y luego hilvanar victoria ante Uganda, Taipei y Curazao. Estos tres triunfos consecutivos superaron la marca de dos que se obtuvieron en 2010.
David González, el papá del cañonero mexicano Adrián González, estuvo presente en el partido y comentó que había sido un gran encuentro de pelota.
“El pitcher de Panamá estuvo muy duro, pero México siempre estuvo en la pelea”, dijo González, quien junto a su esposa Alba recibieron más tarde el premio “Padres del año” por su impulso a las Ligas Pequeñas en México.
Los tres hijos de la pareja, David, Edgar y Adrián, jugaron ligas pequeñas en Tijuana y California, para luego llegar a niveles profesionales destacados. Edgar y Adrián tienen experiencia de Ligas Mayores. El primero está en el beisbol de Japón y Adrián es uno de los principales jugadores de los Medias Rojas de Boston.
En cuanto a la historia, un 23 de agosto de 1957 los niños campeones de Monterrey (Liga Industrial) ganaron el primer título para un equipo mexicano. Ellos inspiraron con esa victoria dos películas y varios libros. Como coincidencia, esa misma fecha quedó en los archivos de 1997 cuando la Liga Linda Vista regresó de un 4-1 en contra en la sexta entrada para dejar en el terreno de juego a California y obtener el banderín.
De esta manera la Liga Oriente termina su participación en la Serie Mundial de 2012 y los resultados son favorables. Esta actuación sin duda aumentará las inscripciones en las ligas de Nuevo Laredo y provocará que las autoridades fomenten más el deporte infantil.
A partir de este momento comienza el trabajo para regresar en 2013. Dependen de los niños y también de los directivos.