Estaba un día El Apuntador pensando qué paradisíaco destino turístico visitará en esta temporada vacacional cuando de repente se dio cuenta de que soñar no cuesta nada, pero viajar sí, y que con los tres pesos y unas cuantas pelusas que trae en los bolsillos de su pantalón pues no podrá llegar muy lejos.
Así que no le quedó de otra que salir a echarse un elote (de esos que ahora más bien parecen platillos de pozole por tanto menjurje que le echan), a una placita local y aprovechó para reflexionar sobre el turbulento ámbito periodístico local y regional, y vaya que hay tela de dónde cortar.
Este incómodo espacio para muchos (sorry, not sorry), arranca destacando que ¡qué fea la gente que cree que todo lo extranjero es mejor! porque sí son, no se hagan; ¿cuántos hay que por el simple hecho de que algo no esté hecho en México y sí en Estados Unidos consideran que es de mejor calidad?, solo por proceder del país vecino ya creen que es la gran cosa; luego ahí andan celebrando el “July 4th Independence Day”, aunque sean más mojados que el pastel de tres leches… ah no perdón, perdón, el autor se ofuscó, la cosa ¡no va por ahí, a ver, de vuelta al redil…
Pero lo que sí va por ahí es que muchos adoran, idolatran e idealizan (y no se mencionan otras palabras porque no son permitidas en estas líneas) a la prensa gringa, o del Valle de Texas y se llevaron tremendo chasco porque esa prensa demuestra que es igual de corrupta, de tendenciosa ¡incluso peooor que la mexicana!, ¿qué por qué?, simple: por el caso de los tiburones de la Isla del Padre.
Ni el Monitor, ni el 4, ni el 5, ni Univisión, ni Telemundo, sacaron una sola línea del desastre de los tiburones; todas las notas fueron de las agencias y televisoras nacionales.
Los gringos, especialmente los del Valle de Texas, solamente responden al interés del billete,¡claaaro!, ¡que no se vaya el turismo! que sigan llegando y más vale no asustarlos.
Que sigan yéndose a emborrachar a la calle 17 de McAllen porque, pues, “allá no hay balaceras”, porque “¡uy en México que fea la inseguridad!”; así las cosas estimados, porque allá, los dólares mandan, aunque antes
hayan sido pesos.
Y en detalles de los medios, desde aquí la pregunta es ¿qué onda TV Azteca Deportes? Pues resulta que en su página de Facebook compartieron el enlace para acceder a una nota sobre la convocatoria de Chivas para el Apertura 2024 y en el post decía: “¿Está Chichairto?”… “¡Chichairto!”, o sea, no Chicharito, ¿qué onda con su gente de redes?, ¿será disléxica?, ¿o será solo un error de dedo?; como quiera que sea error es error, y con la pena, se notó y ni modo, así que hay que estar más listos pa’ la otra.
RETAZOS
En otros temas, la que está estrenando casa laboral es Celina Donada, pues quedaron atrás los días como chica Capital Sports de Noti Gape, para unirse al equipo de Telemundo 40 como la nueva presentadora de Deportes, haciendo su debut al aire el 26 de junio.
Celi, no te vayas a tomar personal la anterior contribución de El Apuntador, ahora que serás prensa gringa este humilde redactor espera que realices tu trabajo con completa objetividad y ética profesional, que se vea que el talento mexicano sabe hacer su chamba; desde aquí van las felicitaciones.
Que suenen las fanfarrias también para Fructuoso Sáenz, que recientemente recibió un reconocimiento a cargo de la Asociación Nacional de Periodistas, Locutores y Comunicadores de U.S.A., siendo acreedor al premio “Honor a quien honor merece” debido a su trayectoria en la presentación de noticias y su labor en beneficio de la sociedad.
En el evento también fue premiado el reportero de N+ Tamaulipas, Joaquín Peña debido a su “destacada labor y trayectoria periodística”.
Pero de aquí no solamente salen felicitaciones, también los deseos de pronta mejoría para Sandra Tovar, que vaya que le ha “llovido” pues hace unos meses apenas se quejaba de una molestia en una de las rodillas (ya a determinada edad es lo primero que chafea y que conste que no se te está diciendo vieja), y ahora se lastimó uno de los pulgares de sus manitas ¡mientras estaba en el cine!
Ella contó que, la culpa fue del antojo de mayonesa en sus palomitas (ya de por sí andaba mal, ¿qué clase de antojo es ese Sandrita?), así que se levantó para satisfacer las necesidades de su paladar cuando le metió turbo en las escaleras, de ahí se pasó a la rampa y terminó estampada en la pared.
Pero la cosa no paró ahí, al intentar abrir la puerta que le truena el dedo, así que lo de “pulgar arriba” pues no aplica para ella por ahora.
Ya con radiografía y toda la cosa pues Sandra no tuvo más remedio que dejar descansar ese dedo por algún tiempo hasta su recuperación.
