
Ante los ataques mediáticos orquestados por las élites del pasado, por los políticos derrotados en la elección federal del 2018 y sus aliados, es oportuno alzar la voz para reiterar nuestra confianza en el presidente Andrés Manuel, y para decirle, a propios y extraños, que “sigue siendo un honor, estar con Obrador”.
La esperanza en un futuro mejor para nuestra patria, hizo posible la convergencia de millones de ciudadanos, de miles de representantes de organizaciones civiles, de hombres y mujeres de todas las edades, de viejos compañeros de lucha del ahora presidente, y de muchos otros que vieron en López Obrador, el mejor hombre para el momento histórico que estamos viviendo.
Logramos la hazaña de llevar a Andrés Manuel López Obrador a la presidencia, más no a “Los Pinos”, conforme a su compromiso de seguir llevando un estilo de vida austero, sencillo, discreto, alejado del lujo y el despilfarro, que fue el rasgo distintivo de la residencia oficial de “Los Pinos”, ahora convertida en museo y casa abierta al pueblo.
Para ser partícipes de la cuarta transformación de la patria, para orientar los esfuerzos, las decisiones y las inversiones de los gobiernos locales, en el mismo sentido que ha señalado el presidente Andrés Manuel, es necesario derrotar a la reacción, y para eso necesitamos volver a unirnos, reforzar nuestras coincidencias y hacer a un lado nuestras diferencias.
El Movimiento de Regeneración Nacional, como tal, estimuló el surgimiento de múltiples organizaciones que hoy están aprendiendo a convivir, a generar consensos, a reclamar espacios, a proponer agendas y programas a los representantes populares, y a interactuar como miembros del Partido Movimiento de Regeneración Nacional.
El Partido no tiene dueño (en singular), es un instrumento del pueblo, en el que confluyen compañeros de muy diversos orígenes, con la mirada puesta en el futuro, y no en un pasado que por ser tan reciente, no alcanza para reclamar derechos de antigüedad a manera de escalafones burocráticos.
Aunque estemos inmersos en la curva de aprendizaje, y a pesar de ser incipiente la institucionalidad de MORENA, tenemos un gran compromiso con los habitantes de Reynosa y de Tamaulipas, para hacer realidad la verdadera alternancia política en nuestra entidad y municipio.
Aunque el reto es mayúsculo sé que lo podemos lograr con la condición de trabajar unidos, por eso hago un llamado a todos los militantes de Morena, a los líderes del partido y de las organizaciones afines, a los ciudadanos de bien que anhelan un gobierno honesto, eficiente y comprometido con las causas del pueblo, a que sigan apoyando al presidente Andrés Manuel López Obrador y participen en la construcción de los triunfos de Morena, para llevar a nuestros candidatos a la presidencia municipal de Reynosa (2021) y al gobierno de Tamaulipas (2022).