Estaba un día El Apuntador sacando del armario su tienda de campaña, pues tenemos todas las intenciones del mundo de irnos a acampar afuera de un par de tiendas en el otro lado para aprovechar las ofertas del “Black Friday” (viernes negro, para quienes no mascan el idioma de mi compadre Shakespeare), cuando nos dimos cuenta de la lamentable actuación de la mayor parte de los medios de Matamoros en el lamentable caso de los cuatro jóvenes de origen norteamericano que fueron asesinados.
Como seguramente ya lo saben, a menos de que hayan estado escondidos en una cueva durante las últimas semanas, cuatro jóvenes norteamericanos, originarios de Progreso, Texas, desde el 12 de octubre no se sabía sobre su paradero y aparecieron asesinados dos semanas después.
El problema es que la madre de tres de los muertos, que resultaron ser hermanos, acusó a integrantes del llamado Grupo Hércules, como se les conoce a un escuadrón táctico de la alcaldesa de Matamoros, Leticia Salazar, de haber sido los responsables de haberse llevado a los jóvenes antes de que fueran ejecutados.
El asunto se ha convertido en un verdadero escándalo político donde nadie ha salido ileso, ni siquiera los medios de comunicación de Matamoros, a quienes podemos contar entre los damnificados de todo este asunto.
Resulta que con excepción de un par de casos, la mayor parte de los periódicos, programas de radio, televisoras y portales de Internet de los llamados serios, prefirieron callar ante los lamentables hechos que se estaban desarrollado por miedo (así como lo leen) miedo, de hacer enojar a los responsables de la administración municipal y echar a perder su convenio de publicidad.
Porque vamos dejando claro una cosa, el silencio que se vivió entre los medios matamorenses al inicio de este escándalo, no fue ordenado por nadie dentro de la administración municipal, sino que fue una decisión que tomaron directivos, editores y administradores de portales.
Pero vamos por partes, como diría mi compadre Jack el Destripador. La primer denuncia de la desaparición de los jóvenes y la acusación de la madre de éstos de que el Grupo Hércules estaba involucrado, apareció en una nota firmada por la Agencia AP y fechada en Progreso, Texas.
Esta nota fue completa y totalmente ignorada por todos los medios en Matamoros, con excepción de El Mañana, que fue el único que medio que se echó el trompo a la uña.
Pero no crean que la cosa acaba aquí. El día en que aparecen los cuerpos, la nota sí es publicada por casi todos los medios de comunicación, sin embargo en muchas de las reseñas se intentó matizar la supuesta participación de los elementos del Grupo Hércules en todo este asunto.
A partir de entonces comenzó una lamentable cobertura que ha ido desde el silencio total, porque pocos publicaron el sepelio de los muchachos o los testimonios de los taqueros que vieron cómo aparentes Hércules levantaron a estadounidenses.
Hay que decir que tanto en el arribo de los cuerpos a Control, Tamaulipas, como en los servicios funerales, el único reportero de un medio mexicano que estaba en el lugar era Agustín “Tin” Lozano de Hora Cero.
Además de Agustín, los únicos periodistas que estuvieron fueron unos enviados del San Antonio Express News, pero párenle de contar.
¿Qué fue lo que hizo que los medios de Matamoros asumieran esta posición de autocensura tan rara?
Basta recordar que en Reynosa hace unas semanas, la administración municipal enfrentó una crisis mediática con la remodelación de la Plaza Principal y la tala de una docena de árboles que tenían años en este lugar.
Este asunto provocó un verdadero revuelo en las redes sociales, donde casi crucifican al alcalde Pepe Elías Leal.
Sin embargo y a diferencia de lo que pasó en Matamoros, los medios de Reynosa no se autocensuraron, sino que al contrario: dieron vuelo a todas los reclamos y molestias de los integrantes de la sociedad y partidos de oposición, sin que hubiera de por medio un convenio.
Eso sí, también le dieron vuelo a la posición del Ayuntamiento que se defendía de las severas críticas.
En este caso, a los medios de Reynosa le quedó claro que el asunto de los árboles de la plaza y la molestia de la sociedad era una noticia que tenía que difundirse independientemente de cualquier convenio publicitario.
A nadie le importó si el alcalde Pepe Elías Leal iba a reaccionar contra la prensa, invadido del coraje por la avalancha de criticas a su administración.
Por eso es muy reprobable que si en Reynosa unos cuantos árboles talados eran nota, en Matamoros la muerte de cuatro jóvenes no fue considerada por los autocensurados.
Pero si el silencio estuvo mal, la actitud que asumieron otros compañeros reporteros también estuvo para llorar.
Un ejemplo son América Ruiz y Esteban Martínez, quienes en su intento por defender su convenio publicitario con la alcaldesa, comentaron un par de detalles bastante fuera de lugar y sin fundamentos en su programa transmitido en radio.
Ambos se refirieron a los jóvenes asesinados y sus supuestos antecedentes, que lo único que les ganó fue la reprobación de las redes sociales que les cayeron a patadas.
Porque los dos olvidaron una máxima: es que si vas a cuestionar públicamente los antecedentes de una persona o, en este caso, los norteamericanos asesinados, más vale que cuentes con los documentos o fichas policiacas que demuestren tus dichos.
De lo contrario lo único que va a suceder es que te tachen de oficioso, como fue lo que pasó en las redes sociales.
¿O qué tal el video editorial que publicó Radio Dual donde no cuestiona la cobertura que se le ha dado a todo este asunto, sino también la relevancia que tiene el caso?
En este video, de un minuto de duración, se incurren en excesos tan lamentables como preguntar si existe una acusación formal contra la alcaldesa y el grupo Hércules, ignorando con ello no sólo las acusaciones de la madre de los asesinados, sino que el hecho de que la Procuraduría Estatal ya citó a declarar a nueve elementos de seguridad.
Pero no vayan a pensar que América, Esteban y la raza de Radio Dual fueron los únicos que resultaron raspados en este asunto, hubo otras víctimas de chismes y versiones que no han sido comprobadas.
Tal es el caso de Erandi Márquez, comunicadora que trabaja en el ayuntamiento, quien fue mencionada en una red sociales como una supuesta participante en todo este escándalo, lo que la compañera ya negó de manera contundente.
Habrá que investigar cuál es el objetivo que buscaba la persona que involucró a Erandi en este asunto, sin embargo no parece que sea nada bueno.
Lo cierto en todo este relajo es que además de la actuación de los medios matamorenses, lo que también estuvo pésimo fue la estrategia asumida por las autoridades municipales.
En este tema no hay muchos culpables por señalar, y uno de los principales es la jefa de prensa de la administración municipal, Nora González.
Hay que decir que en meses recientes Nora vivía las mieles de contar con todas las confianzas de la alcaldesa, quien escuchaba atentamente todos los consejos que le susurraba al oído.
Gracias a esto, la jefa de prensa del Ayuntamiento fue capaz de quitar de su camino a un montón de personas a quienes consideraba sus “enemigos”.
Pues bien, cuando estalló todo este escándalo ¿a quién creen que recurrió la alcaldesa al momento de preparar la estrategia de medios? Por supuesto que a Nora González.
A estas alturas del partido, podemos darnos cuenta que los consejos que la jefa de prensa le ofreció fueron los peoooores del mundo.
¿O de qué otra forma podemos calificar el hecho de que al arranque de la crisis la alcaldesa optó por el ostracismo para, luego, decidir dejare entrevistar única y exclusivamente por medios nacionales que no tienen ninguna intención de proteger a la edil?
Como consecuencia de esta decisión es que la alcaldesa sufrió los feos maltratos de Joaquín López-Dóriga, quien puso contra las cuerdas en la entrevista que le hizo en Radio Fórmula.
Tan sencillo que hubiera sido que, aprovechando que tiene de su lado a todos los medios de Matamoros, haber convocado a una rueda de prensa sin sesión de preguntas y respuestas, para que la alcaldesa hubiera salido, leído una declaración pública y ya.
De ahí, la alcaldesa pudo haber ido con la familia de los jóvenes para ofrecerle todo su apoyo y solidaridad para encontrar la verdad en este terrible caso.
¿Y qué decir de la declaración que hizo Lety a Adela Micha de que ella no formó el Grupo Hércules y que ni siquiera cuenta con escolta? ¿Quién fue el “inteligente” que le recomendó que dijera lo anterior?
El problema de imagen pública que hoy enfrenta la edil es gravísimo, con notas en medios nacionales e internacionales que la dejan muy mal.
Los únicos culpables de toda esta crisis son los super asesores de la edil matamorense, encabezados por Nora González, quienes de plano en esta ocasión se ganaron una espantosa equis y pusieron a su jefa en el caldero nacional y extranjero.
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SOBRE AVISO NO HAY ENGAÑO
Ya saben que este su humilde y sencillísimo Apuntador es además de un excelente abogado laboral, asesor financiero y gastronómico, y de cuando en cuando lector de cartas y masajista.
Sin dejar de ser orientador laboral de domingo a sábado. Pues bien, como están próximas las campañas electorales del 2015, les daremos unos consejillos personales a los reporteros que buscarán andar en el mitote de redactores de presa o asesorando a políticos.
Consejo 1.- De entrada, los compañeros y compañeras que están en los medios de comunicación diversos, ya sea impresos, electrónicos y virtuales, o quienes se dediquen a las redes sociales y demás cosas nuevas que surgen con las tecnologías, no se dejen engañar por el canto de las sirenas.
Y que tanto los nuevos partidos políticos como los viejos, andarán a la caza de posibles jefes de prensa para sus campañas y candidatos. Por eso tengan cuidado a quienes les venden su tiempo y dedicación y profesionalismo, es decir, eviten arriesgar la seguridad laboral y salarial por promesas vanas, de corto o mediano plazo.
Consejo 2.- Papelito habla. Si se arriesgan a irse a una campaña o precampaña, pues que sea mediante un contrato o convenio o acuerdo por escrito, ya que las palabras se las lleva el viento y las promesas de los políticos más; por más derechos, buena onda y cuates de años que hayan sido los contratantes. De buenas intenciones está pavimentado el camino al infierno.
Consejo 3.- Si van a renunciar a sus medios, háganlo en los mejores términos, no se vayan aventando la puerta y echando pestes, ya que hay muchos ejemplos de malquerencias entre un periódico o una radiodifusora, por ejemplo, con un candidato o candidata porque su jefe de prensa se fue peleado hasta con los guardias, y a la hora de la hora ni las llamadas ni el saludo les aceptan sus antiguos patrones.
Consejo 4.- Ya por último, pero no por ello el menos importante: échele todas las ganas en su trabajo y muestren todo su profesionalismo, pero no se la crean de que sus candidatos van a ganar y, en caso de que ganen, de que los van a emplear llegando a la alcaldía, la diputación o la gubernatura. Cada proceso electoral ha demostrado que muchos pero muchos compañeros pese a ser quienes sacaron adelante el barco, se quedaron sin nada. Es decir, como el perro de las dos tortas, nomás se montaba su jefe en el erario público.
Estos sencillos consejos no deben de ser tomados a la ligera por la raza, pues en montones de ocasiones hemos visto cómo ha habido quienes deciden no escucharos y luego andan como almas en pena, paseando por los pasillos de la presidencia municipal y las oficinas públicas sin que nadie les haga caso.
Por lo tanto evítense la pena escuchen lo que este gustado espacio les recomienda.
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RETAZOS
Pasando a otros temas, después de mucho hacerla de emoción finalmente se llevaron a cabo las elecciones en la Asociación de Periodistas de Matamoros donde no hubo sorpresas, pues Miguel Garay se llevó el triunfo.
Como ya se lo habíamos adelantado, Garay iba a echar mano de todas sus mañas y tácticas torcidas para asegurar su reinado dentro del organismo que, aseguran, representa los intereses de la raza de los medios allá en la tierra de
Rigo Tovar.
De nada sirvió la inconformidad del grupo de Los Revolucionarios, quienes finalmente publicaron en varios medios la famosa carta en la que desconocieron a Garay como representante de la prensa local.
Esta táctica de poco sirvió para detener lo inevitable, que Garay convocara a todos sus cuates y se asegurara la presidencia del organismo.
En cosas más agradables hay que decir que también en Matamoros se llevó a cabo un evento muy noble y muy bonito llamado el Trovatón, organizado en honor del compañero Cesar Guerrero quien, como ya les habíamos comentado, está luchando contra el cáncer y necesita todo el apoyo económico que se le pueda proporcionar.
El evento fue el pasado 31 de octubre en el Gerry´s del hotel Ritz, donde el artista principal fue Nelson Terán quien, hay que decirlo, no cobró ni un peso por su actuación.
El evento fue organizado por iniciativa de Lety Acosta y todo el equipo de NotiGape, quienes se encargaron de contactar a los cantantes e invitar a la raza a que asistiera.
Como maestros de ceremonias estuvo Martin Sifuentes, de Televisa Noreste, y Armando Sandoval, de NotiGape.
En representación de la familia Guerrero acudió Martha, la esposa de César, la cual transmitió al inicio del evento un video de nuestro compañero agradeciendo a todos el apoyo que le proporcionaron.
Entre la raza que pudimos ver en el Trovatón estaba Enrique Juárez, José María Barrientos, Lety Montalvo, Héctor López, Idalia Beltrán y Agustín Lozano, entre mucho otros.
Por cierto, uno de los detalles que llamaron la atención en la velada fue la revelación de Nelsón Terán de que toda su familia conocía de toda la vida a los Alvarado de Control, Tamaulipas, quienes son los parientes de los jóvenes de origen norteamericano recientemente asesinados.
Es por ello que al momento en que cantó la de “Y nos dieron la diez”, de Joaquín Sabina, decidió cambiar la estrofa cuando dice: “Me llevaron los municipales…”, por “Me llevaron los Hércules…”, lo que provocó las más variadas reacciones por parte de los presentes.
Da gusto ver que la raza se pone de acuerdo para atender un evento de este tipo que no tiene más intención que ayudar a un compañero en necesidad.
Y no nos vamos sin antes dejarlos con la gustada pregunta de la quincena: ¿Cuál es el verdadero motivo de que oooootra vez le volvieron a poner pausa a la tan cacaraqueada llegada de El Expreso a la ciudad de Reynosa?