Expiación, Deseo y Pecado (Atonement)
Director: Joe Wright
Actores: James McAvoy, Keira Knightley
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Es el caótico manejo del tiempo lo que le da a Expiación, Deseo y Pecado su calidad de joya dramática, que mezcla cine y literatura, con un perfecto manejo actuaciones y ambientación.
El director Joe Wright confunde con astucia tiempo y espacio, ficción y realidad. Sus saltos entre momentos y lugares, la repentina recreación de escenas previamente presentadas, con flashbacks instantáneos y el sutil desarrollo de una trágica historia de amor en tiempos de guerra, hacen de esa una de las experiencias épicas más bellas de la década.
La música incidental combina acordes y golpes de máquina de escribir, que marcan el ritmo de la acción, enfatizando la naturaleza novelesca de la historia.
Son tiempos aciagos para Europa, los que presenta Wright, basado en el libro de Ian McEwan. La amenaza de Hitler se cierne sobre la aristocracia londinense, que vive desprevenida y con donaire en una realidad lejana. Los goces son sensuales y la atmósfera está cargada de erotismo.
En medio de la dulzura apacible de un mundo perfecto, subyace la perversión encarnada en un personaje angelical.
Wright descarga, sin clemencia, el peso de la casualidad en una serie de personajes inocentes en medio de una mala noche, en la que surgen desafortunadas confusiones y una declaración motivada por el despecho.
Algunas personas son condenadas, otras sufren por ello y otras más quedan impunes. Pero la película no da descanso, ni certezas. El director utiliza el poder de la ficción para dar premios al espectador, y luego decepciones, de manera alternada, involucrándolo en un juego de engaños, de esos que le dan razón y esencia al arte cinematográfico.
Segmentada en escenarios contrastantes, con personajes que tienen destinos impensados, y con virajes repentinos, Expiación… es un oda al remordimiento. Un instante de flaqueza, una baja mentira, ocasiona la ruina de una persona, y quien provocó esa desgracia, carga con la culpa durante décadas, hasta el último día de su larga vida. ¿Debe, una persona genuinamente arrepentida, ser perdonada por una infamia?
Los amantes son separados por la traición y distanciados por la guerra, pero lucharán con toda la fuerza de su corazón para encontrarse en un esfuerzo épico guiado por el amor, en su más desesperada manifestación.
Hay, en medio de la conflagración bélica, un hermoso plano secuencia de cinco minutos que presenta un fresco sobre la podredumbre de un conflicto militar y la locura que hay en medio de esa vorágine.
El joven que pasa por el suplicio de la condena judicial, luego se enfrenta a la metralla y soporta todo para regresar con la Amanda, se va inmiscuyendo en una serie de situaciones que lo alejan y lo acercan a la realidad, mientras se aproxima a su destino.
Pero en esta historia no hay concesiones.
Expiación, Deseo y Pecado es un drama grandioso, con hermosa cinematografía, emocionalmente devastador y que deja el corazón hecho pedazos.