El mundo ha sido testigo de fotografías, videos e información sobre los atentados en Siria que han provocado la muerte de miles de civiles y el desplazamiento de refugiados, pero, ¿cuál es la causa de este conflicto? Este es un análisis que pretende poner en claro el origen, las razones y consecuencias de este problema donde los interesados son muchos, pero no de resolverlo, sino de apropiarse de este territorio…
Siria se ubica en el Oriente Próximo, entre Líbano y Turquía y es considerado uno de los quince territorios que comprenden la Cuna de la Humanidad.
De su subsuelo se extrae asfalto, sal gema, fosfatos, petróleo y gas natural, y está localizada a ocho horas en avión desde España.
Para sacar y llevar a Europa el gas natural, que es considerado por algunos como “el nuevo petróleo”, es necesario rodear la Península Arábiga y viajar por el Canal de Suez, una vía artificial de navegación situada en Egipto que une al mar Mediterráneo con el mar Rojo.
Sin embargo, si se hiciera en línea recta, a través de Siria, quien tuviera el control decidiría los costos y destino del petróleo, al ser un punto de contacto entre Oriente y Occidente, según un video titulado #WhySyria, creado por WhyMaps y publicado en el canal de YouTube de Aristegui Noticias.
Por su parte, CuriosaMente, canal de esta plataforma que se dedica a la creación de videos sobre ciencia, cultura, historia, matemáticas, entre otros, menciona además que, Siria está ubicada en la antigua Mesopotamia, considerada el origen de la civilización.
Esta zona desde sus orígenes, en el año 1000 a. C. (antes de Cristo), fue privilegiada para el comercio y en 1271, con la llegada de Marco Polo, mercader y viajero veneciano y la creación de la Ruta de la Seda, fue la red de rutas comerciales organizadas a partir del negocio de la seda que se extendía por todo el continente asiático conectando con Europa y Africa.
LA PROMESA
Desde 1516 y hasta 1918 Siria perteneció al Imperio Otomano junto a Líbano, Israel, Palestina, Jordania y partes de Turquía e Irak, y es, al final de la Primera Guerra Mundial, cuando surgen los nuevos países.
Sin embargo, en 1916 ingleses y franceses les prometieron a los árabes un gran país, un estado árabe unificado, que nunca se formó y en su lugar se repartieron los países tomando Francia el control de Siria, en el acuerdo Sykes-Picot, firmado en secreto.
Rusia, al quedar fuera del acuerdo, lo hizo público.
Francia se quedó con Siria, dándole a compañías extranjeras el control de las pocas reservas de petróleo del país.
Tras la Segunda Guerra Mundial los europeos se van, pero antes, crean Israel, que no es aceptado por los países vecinos, por lo que siempre están en constante conflicto.
Tras múltiples golpes de Estado constantes surge el Baaz (Partido del renacimiento Arabe Socialista), un movimiento no religioso, que agrupa la mezcla de un sueño de una nación árabe con ideas socialistas.
Posteriormente, Siria y Egipto comparten la idea de un sólo país, pero dicha unión falla, por lo que Egipto los convence de nacionalizar su petróleo.
PROTESTAS Y GUERRA CIVIL
Tras independizarse de Francia en 1941 y ser evacuada por los franceses en 1946, las Naciones Unidas reconocen a Siria como Estado soberano.
Luego de varias revueltas, en 1970 toma el poder mediante un golpe de Estado, Hafez al-Asad , gobernando durante casi 30 años y a su muerte, fue sucedido por su hijo Bashar al-Asad.
Al tomar el mando, libera algunos presos, lleva Internet al país y da a los pobladores esperanzas de cambio, pero al surgir la primavera árabe (manifestaciones en pro de la democracia y los derechos sociales del 2010 a 2013), atacó a quienes protestaban.
El comienzo de las manifestaciones ocurrió el 17 de diciembre de 2010 en la ciudad de Túnez, cuando un vendedor ambulante fue despojado por la Policía de sus mercancías y se inmoló como protesta.
En respuesta, miles de tunecinos se rebelaron contra las malas condiciones, causando un efecto dominó en el resto de las naciones árabes, provocando que integrantes del ejército sirio desertaran para unirse a los manifestantes, haciéndose llamar Ejército Sirio de Liberación, creándose una guerra civil.
Se agregan extremistas jihadistas, que es la rama más violenta y radical del Islam, con una frecuente y brutal utilización del terrorismo.
Los kurdos sirios toman las armas y se independizan en el 2012, buscando autonomía, por lo que Irán, el aliado más importante de Assad manda militares y transporte aéreo para apoyar.
Posteriormente, países petroleros del Golfo Pérsico mandan dinero y armas a los rebeldes para atajar la influencia de Turquía e Irán, añadiéndose Hezbola, grupo chiíta que apoya a Assad.
En el 2013, Oriente Medio está dividido: potencias sunitas apoyan a los rebeldes y chiítas apoyan a Assad.
Los árabes pueden ser musulmanes, y dentro de los musulmanes hay dos ramas fundamentales: los suníes, que son la mayoría, y los chiítas, que aunque son menos del 13 por ciento, está integrado por jefes militares y por el mismo Assad, lo que provoca el descontento de la población.
Los suníes son el Ejército Libre de Siria, el frente islámico, que está formado por más de setenta grupos y están los suníes islamistas, pero radicales, que son: All Nusra, provenientes de Al Qaeda e Isis o Estado Islámico, que aprovecharon el sueño de un estado árabe único para ganar la aprobación.
Tras el conflicto, surge la ayuda internacional, apoyando a Assad Rusia, Irán y China; y a la oposición, Estados Unidos, Turquía, Francia, Gran Bretaña y Arabia Saudita.
La Agencia Central de Inteligencia, (CIA, por sus siglas en inglés), es autorizada por el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, para entrenar y equipar a rebeldes sirios, pero el programa se retrasa y exhorta a los países del Golfo que no financien a extremistas, los que no toman en serio el llamado.
APARECEN LAS ARMAS QUIMICAS
En el 2013, Assad emplea las armas químicas en contra de la población civil, por lo que Obama manifiesta su interés de responder al ataque, generando la sugerencia de Rusia a Siria de que ceda el control de su arsenal químico a la comunidad internacional para su destrucción y evitar la intervención estadounidense.
Días después, inicia el entrenamiento de la CIA a rebeldes sirios, entrando Estados Unidos a la guerra.
En 2014, Isis entra al conflicto, generándose ahora, no sólo la lucha contra Assad, sino contra los demás rebeldes, creando un mini Estado en Siria, cambiando por completo la guerra.
El pentágono crea su propio programa para entrenar al grupo de rebeldes, pero a diferencia de la CIA, sólo entrena a quienes están en contra de ISIS, y no contra Assad, quedando de manifiesto que Norteamérica está más preocupado por ellos que por el gobierno sirio.
En el 2015, Turquía bombardea a fuerzas kurdas en su país e Irak y aunque los kurdos luchaban en contra de ISIS en Siria, Turquía no ataca a ISIS ahí, lo que genera tensiones con Estados Unidos, quien no tiene claro si es Assad o ISIS el enemigo principal.
Debido a esto, también los kurdos entran en conflicto al no entender la posición norteamericana; de forma paralela, Assad retrocede ante ISIS y los rebeldes.
En ese mismo año, Rusia interviene a favor de Assad diciendo que llega para atacar a ISIS, pero sólo ataca a los rebeldes contrarios a Assad que son apoyados por Norteamérica, según información de VOX understand the news.
En un artículo titulado “La pequeña guerra mundial que desgarra a Siria”, publicado por la BBC, en febrero de 2016, en el campo de batalla “los enemigos y aliados se confunden”.
En este año, fuerzas kurdas, que según el diario británico, están aliadas tanto con Washington, como con Moscú, toman ventaja y extienden su territorio.
En febrero de 2016, por primera vez tras el inicio de los bombardeos aéreos de Rusia en Siria, Moscú y Washington acordaron una tregua humanitaria, pero el cese al fuego no incluía los ataques contra grupos clasificados por la Organización de las Naciones Unidas como terroristas.
En este año, la noticia más impactante del conflicto en Siria, fue el atentado con gas sarín, en lo que es calificado por el New York Times como “el peor ataque con armas químicas sucedido en Siria”, donde muchos civiles perdieron la vida, entre ellos niños.
Si bien, aún no se establece la responsabilidad de dicho ataque, hay quienes piensan que el autor fue el gobierno sirio, quien negó la acusación argumentando que nunca dañaría a su pueblo.
En respuesta, Estados Unidos, liderado ahora por el presidente Donald Trump, ataca la base aérea de Shayrat, haciendo un llamado a todas las naciones civilizadas a buscar el fin de la “matanza y el derramamiento de sangre”, lo que ha aumentado la tensión en el mundo.